Unos refugiados huyen de la Policía en Hungría. Hombres, mujeres y niños corren desesperados. Una “periodista” ultraderechista patea a un niño y luego a otro refugiado que lleva a su hijo en brazos. La indignación estalla en las redes sociales.
Josefina L. Martínez @josefinamar14
Miércoles 9 de septiembre de 2015
El grupo de refugiados estaba escapando de la policía, en la localidad de Roeszke, en la frontera entre Serbia y Hungría. Varios periodistas graban la escena. Entonces puede verse claramente a la mujer que lleva una cámara en la mano, pateando dos veces a refugiados que corren, entre ellos a una niña. Pero hay más. Cuando pasa a su lado un refugiado con su hijo en brazos, perseguido por la policía, le pone el pie intencionalmente para que se caiga. Y lo filma. La mujer es Petra László, camarógrafa de la cadena húngara N1TV.
El video se hizo viral en las redes sociales este martes. La rabia se multiplicó por decenas de miles. Según información que circuló poco después del incidente, la “periodista” (entre comillas, porque de periodista no tiene nada) es una ultra derechista ligada al partido de extrema derecha Jobbik (Movimiento por una Hungría mejor), así como la cadena para la que trabajaba. Aparentemente, fue despedida de su trabajo por el escándalo internacional de las imágenes.
Jobbik es un partido neonazi que en las elecciones parlamentarias del 2014 obtuvo un 20,5% de los votos, manteniéndose como tercera fuerza política en el país. Están relacionados a la organización paramilitar fascista “Guardia Húngara”, que realiza acciones violentas contra los gitanos.
El actual primer ministro de Hungría, Viktor Orbán, pertenece al partido conservador Fidesz, y sostiene una política nacionalista, católica y xenófoba. Recientemente dijo que los inmigrantes musulmanes son “un peligro” para su país y para la “cultura católica”.
El parlamento de Hungría acaba de aprobar una legislación xenófoba que penaliza a los inmigrantes ilegales con varios meses de cárcel, al igual que a todos los que traspasen la valla de alambre de 170 km que se levantó en la frontera con Serbia.
Según informa la periodista Olga Rodriguez para Eldiario.es desde la frontera de Hungría con Serbia, en los últimos días (después de una "flexibilidad" relativa), volvieron con fuerza las resricciones, la represión y el maltrato para los refugiados en Hungría. El día lunes, un centenar de personas intentó escapar del campamento de refugiados en Roeszke, pero fueron acorralados por la policía, que los retuvo durante horas a la intemperie, con bajas temperaturas, torturando así a hombres, mujeres y niños.
Esta es la "puerta" a la Europa de la xenofobia y el capital, que habla de "solidaridad" pero muestra su cara de perro en la fronteras. Como los perros que usaron para aterrorizar a los refugiados.
La "periodista" fascista es un otra muestra de esa xenofobia en los medios de comunicación y como "política de estado".
Josefina L. Martínez
Nació en Buenos Aires, vive en Madrid. Es historiadora (UNR). Autora de No somos esclavas (2021). Coautora de Patriarcado y capitalismo (Akal, 2019), autora de Revolucionarias (Lengua de Trapo, 2018), coautora de Cien años de historia obrera en Argentina (Ediciones IPS). Escribe en Izquierda Diario.es, CTXT y otros medios.
