En la mañana de este martes 22 de agosto se llevó a cabo la comparecencia de ante el Congreso de la Unión del titular de la Secretaría de Comunicaciones y Transportes (STC), Gerardo Ruiz Esparza.
Leah Muñoz @leahdanmunoz
Martes 22 de agosto de 2017
La tragedia del socavón del Paso Express en Cuernavaca del 12 de julio pasado, que se llevó la vida de Juan Mena López y Juan Mena Romero (padre e hijo), el gasto público y la interrupción del tránsito por dicha carretera, no tiene aún responsables.
Ruíz Esparza días antes de su cita en el Congreso culpó de la tragedia al gobierno de Morelos, a las empresas constructoras y a la alcaldía de Cuernavaca.
Este martes, en el Congreso de la Unión el titular de la SCT pidió que no se busquen responsables políticos por el socavón sino que se busque responzabilizar a los culpables por omisiones que hayan existido en el proceso de construcción.
“Mi principal responsabilidad en este lamentable acontecimiento es hacer que las empresas involucradas asuman su responsabilidad y respondan por ella”, señaló Ruiz Esparza en la comparecencia.
“En ningún momento se han repartido culpas ni señalado responsables, aunque debo informarles con claridad, que tanto el dictamen de peritos independientes como las instancias externas a la SCT que han emitido opinión sobre el tema, sí han señalado responsabilidad de diferentes actores”, agregó.
Aunque lo cierto es que ninguna entidad del gobierno ni funcionario quiere hacerse responsable de lo sucedido con el socavón -una construcción federal- y desde julio han estado pasándose la bolita de la responsabilidad del gobierno del estado a la SCT y viceversa, haciendo de este caso un nuevo circo mediático.
Sin embargo, el titular de SCT no quiere hacerse responsable de que ignoró el llamado de los peritos independientes que señalaron desde 2016 que la tubería de más de 40 años de edad debía de cambiarse o hacerse más grande.
Además, tres meses antes de la construcción del Paso Express la SCT se había comprometido a cumplir con cinco puntos de riesgo, lo cual no hizo.
A su vez, frente a la demanda de los familiares de las dos personas muertas por el socavón Ruiz Esparza intentó frenarla y les hizo entrega de unas mochilas, además de intentar disuadirlos de seguir el caso con el argumento de que un juicio tardaría 15 años.
El caso continúa en una cortina de humo mientras los funcionarios se llenan la boca diciendo que el presupuesto público se ocupa de la mejor forma para las obras públicas cuando muchas reparaciones, como la que necesitada para la realización del Paso Exprés, no se llevan a cabo por el desvío de recursos, como ya se ha visto con los recientes escándalos de corrupción protagonizados por el gobierno de Peña Nieto.
