El Diputado Nacional Nicolás del Caño presentó esta semana un proyecto de ley que apunta a revertir una medida de Alberto Fernandez que deja sin leche a millones de niñes. El apoyo de las trabajadoras especialistas en infancias.
Viernes 29 de abril de 2022 09:03
Como informamos por este medio el gobierno nacional tomó una medida donde a través de una Resolución del Ministerio de Salud se dispuso que los 2 kg. de leche en polvo fortificada para niñxs de hasta 5 años, que se entregaban mediante los centros de salud, se transformen en $800 que se acreditarán vía AUH, a través del ANSES. A partir de este informe que presentaremos desde la banca del diputado nacional Nicolás del Caño se presentó un proyecto de ley para dar vuelta atrás con esta medida regresiva.
Por decisión del gobierno nacional, se eliminó la asistencia alimentaria para la 1era infancia del Ministerio de Salud a cambio de un subsidio de la Anses. Ahora en vez de 2 kg de leche en polvo fortificada en Centros de Salud se entregarán 800 pesos a quienes perciben la AUH.👇
— Nicolas del Caño (@NicolasdelCano) April 22, 2022
Para revertir esa medida, y sin perjuicio del cobro de esos 800 pesos o de cualquier otra asignación, el proyecto propone modificar la ley N° 27611 - Ley Nacional de Atención y Cuidado Integral de la salud durante el embarazo y la primera infancia, más conocida como "ley de los mil días". Frente a la letra muerta, que abre la puerta a resoluciones como las del gobierno nacional, que ajustan en nombre de la vida a quienes menos tienen, el texto del FITU pone sobre el Estado y particularmente sobre el Ministerio de Salud, la responsabilidad de garantizar la provisión pública de este insumo fundamental.
"A tal fin, deberá proveerse de estos insumos a los Centros de salud de todo el territorio nacional, donde deberán ser distribuidos por personal idóneo correctamente remunerado y sin perjuicio del cobro de cualquier otra asignación y/o de montos que las refuercen con el objeto de dar cumplimiento a la presente ley", dice el proyecto de autoría de Del Caño.
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Las vaquitas son ajenas
La medida, que comenzará a implementarse próximamente, resulta escandalosa para distintos sectores que alzan la voz y denuncian que mientras el gobierno nacional decide recortar en un área tan sensible como la niñez y en una cuestión tan fundamental como la leche para bebés, en las mismas horas, un puñado de empresarios del campo en tractores se manifestaban por sus privilegios patronales, para custodiar sus fortunas, mientras la leche para les pibes queda suspendida. El contraste es evidente, mientras no se tocan los intereses de los patrones de estancia que se la llevan en pala con precios récord de las exportaciones, el gobierno ataca a los más vulnerables de los sectores más pobres, les niñes.
Las y les trabajadores de niñez, que nos organizamos y peleamos por nuestras propias condiciones laborales, contra la precarización y la pobreza en la que vivimos, también queremos poner todo nuestro conocimiento para denunciar y visibilizar estas vulneraciones de derechos a las infancias por parte del mismo Estado que nos precariza. Somos los únicos, además, que podemos hacerlo desde nuestros propios lugares de trabajo.
La mirada desde la perspectiva de la restitución de derechos
Hablamos con especialistas en infancias, que aportan la visión de quienes se dedican a la restitución de derechos en el marco de la Ley N° 26061 de Protección Integral de los derechos de las niñas, niños y adolescentes. Lucila Colaneri, socióloga y trabajadora del Consejo de Derechos de Niñas, niños y adolescentes de CABA nos plantea:
“Esta medida adoptada por el Gobierno, es contraria a lo determinado en esta Ley, que en su artículo 5 establece que ’los Organismos del Estado tienen la responsabilidad indelegable de establecer, controlar y garantizar el cumplimiento de las políticas públicas con carácter federal.
En la formulación y ejecución de políticas públicas y su prestación, es prioritario para los Organismos del Estado mantener siempre presente el interés superior de las personas sujetos de esta ley y la asignación privilegiada de los recursos públicos que las garanticen.
Toda acción u omisión que se oponga a este principio constituye un acto contrario a los derechos fundamentales de las niñas, niños y adolescentes. Además, en el artículo mencionado se especifica que es responsabilidad del Estado la asignación privilegiada e intangibilidad de los recursos públicos que las garantice, en lo que respecta a las políticas públicas. En este sentido, el Estado incumple su deber de asistir prioritariamente a los niños, niñas y adolescentes, en el pleno goce efectivo del derecho a la salud y al derecho humano fundamental, a la alimentación. Esto es muy importante, ya que este acceso implica que las personas tengan derecho continúo al acceso a los recursos suficientes y a la satisfacción adecuada a las necesidades dietéticas. Esta decisión de quitarle la leche a miles familias, es otra muestra más de que el Gobierno de Alberto Fernández, deja reducido el interés superior de miles de niñas y niños a una bonita formulación, pero alejada de toda realidad.”
En el mismo sentido, hablamos con Carmen, trabajadora social en un comedor barrial del conurbano profundo en el Partido de Tres de Febrero, allí “la leche resulta esencial por la nutrición, pero también y sobre todo por la relación que establece el Estado con los sectores que no tienen ni galletitas para el mate cocido, que no cenan. Son miles las situaciones donde la alimentación está en manos del Estado ya que no se logra poner un plato de comida en la mesa de les pibes. Tanto los centros de atención primaria en salud como los dispositivos territoriales son claves para detectar todo tipo de situaciones y abordarlas con personal especializado.”
Voces del mundo de la salud en las infancias
En comunicación con Lucia Rotelle, Licenciada en Psicología e integrante del Servicio de Área Programática y Redes en Salud (SAPS) de José Ingenieros, nos planteaba: “En los centros de atención primaria de cada barrio vemos y atendemos las múltiples demandas de una población que se encuentra inmersa en condiciones habitacionales y sanitarias muy complejas. La falta de agua potable, de cloacas, de gas natural son el día a día de miles de familias que se ven obligados a vivir en condiciones insalubres. A eso se le suma que la mayoría tiene trabajos precarios, o ni siquiera cuenta con ello, apenas subiste con algún plan nacional o provincial. Para esas familias la leche que entregábamos en la salita es de una enorme ayuda para paliar el alimento de les niñes en una edad fundamental hasta los 5 años. No todas esas familias cuentan con la asignación universal, porque las condiciones de vida y los derechos elementales no llegan a los sectores más vulnerados. Algunas familias recién están pudiendo tramitar sus documentos de identidad, pero no todas han tenido acceso al mismo, por lo que se han visto imposibilitada del cobro de dicha asignación, y ahora tampoco tendrán accesos a la leche".
Para tener la voz de una especialista en nutrición infantil, le preguntamos a Pamela Galina, Jefa de Residente de Pediatría del Hospital Noel Sbarra de La Plata y Miembro del Consejo Directivo Provincial de CICOP. Ella nos refiere de manera cruda y directa: "Sacarle la leche a las y los pibes no genera más que indignación para las y los trabajadores de la salud. Hay que aclarar que la situación ya era crítica: para las y los niños menores de un año la leche de vaca está contraindicada, sin embargo frente a la falta de leche de fórmula en los casos en los que no se puede garantizar la lactancia materna, no tenemos otra opción que indicar leche de vaca diluida. Una situación triste y que llena de bronca. Hoy con esta nueva modificación ni siquiera eso se puede brindar. Es un verdadero atropello. Este viernes llevaremos la propuesta al congreso de CICOP, nuestro sindicato, para que las y los profesionales de la salud demos pelea para dar marcha atrás con el recorte en la leche de nuestros pibes, y por una verdadera soberanía alimentaria"
El traspaso de Salud a Anses, desde las trabajadoras
En el caso de las trabajadoras de ANSES Jesica, trabajadora social de Atención al público de Regional Sur, nos cuenta: “nosotres vemos como cotidianamente el gobierno cambia el nombre de los planes o subsidios, intentando hacernos creer que cada vez hay más dinero en el bolsillo de las familias cuando en realidad es todo lo contrario, la UVHI (asignación universal) es de $6375 por hije y la tarjeta alimentar es para menores de 14 años y hasta $13500 sin importar si tenes 3 o 4 niñes. Y hay que tener en cuenta que este monto se va a cobrar recién a partir de mayo. Y no es cierto que todes accedan a este derecho, diariamente atendemos madres/padres que consultan porque no lo cobran y la única respuesta del organismo es “hay que esperar”.
Todo se ve agravado por que muchas familias sacaron los famosos préstamos ARGENTA con el único fin de poder comprar comida y ahora lo tienen que pagar por más de 3 años y vienen a consultar cuando terminan de pagarlo por que no les alcanza para comer. Somos nosotres los que escuchamos cotidianamente a estas familias preguntando la fecha de pago porque hace más de un día que sus hijes no comen. Muchxs no tienen DNI, tramitarlo tiene un costo y no pueden solventarlo por lo cual no acceden a ningún subsidio monetario. Y ahora con esta resolución de suplantar los dos kilos de leche que se daban mensualmente por el depósito de $800 en la tarjeta alimentar es un escalón más a la extrema vulnerabilidad.”
La unidad para enfrentar esta situación es clave para quebrar la política de ajuste que quieren descargar sobre las mujeres gestantes y las infancias. Las y les trabajadores de la niñez, que nos organizamos por nuestras propias condiciones laborales, también apostamos, para ello, a poner todo nuestro conocimiento al servicio de denunciar y visibilizar esta realidad, que impone el mismo Estado que nos precariza a millones de familias y niñes. Somos los únicos, además, que podemos hacerlo desde nuestros propios lugares de trabajo. Te proponemos que te sumes vos también.