Alan Cambra Sarife está imputado por homicidio simple con dolo eventual por el incendio ocurrido en febrero, donde murieron cuatro jóvenes que se encontraban internados. Se negó a declarar.
Martes 15 de marzo de 2022 16:46
La detención fue solicitada por el fiscal Germán Camafreita Steffich a fin de evitar el entorpecimiento del procedimiento judicial considerando que aún restan recabarse testimonios de los sobrevivientes.
El hecho por el que se acusa al director de la comunidad terapéutica San Fernando de Lonjas es la muerte de cuatro jóvenes usuarios de drogas- todos menores de 25 años- que se encontraban allí internados, ocurrida el pasado 24 de febrero.
El fiscal consideró que “el imputado no cumplió con los mínimos recaudos de seguridad e higiene previstos para una organización de tal envergadura, tales como: matafuegos, colchones ignífugos, plan de contingencia, personal terapéutico idóneo, médicos y enfermeros encargados para suministrar la medicación a los pacientes, accesos y salidas de emergencias del establecimiento, iluminación de emergencia, como así tampoco cumplió con lo recaudos administrativos al no contar con la debida autorización legal emitida por la autoridad competente, en rigor, el Ministerio de Salud de la Provincia de Buenos Aires, llevando con su accionar al resultado fatal".
Tras la muerte de los jóvenes, la Comisión Provincial por la Memoria (CPM) interviene en la causa como particular damnificado institucional. En su carácter de Mecanismo Local de prevención de la Tortura de Buenos Aires inspeccionó el lugar junto con el del Consejo municipal contra la violencia estatal de Ramallo, entrevistando a personas que se encuentran alojadas en la institución.
Constataron sobre medicación, condiciones de reclusión extrema sin ninguna asistencia, nula atención psicológica incluso frente a intentos de suicidios, carencia de actividades educativas o recreativas, golpes, palazos, secuestros, violencia y condiciones inhumanas de detención en la comunidad terapéutica San Fernando y San José, que además no contaban con habilitación ni control estatal alguno. Así lo denunciaron en el habeas colectivo que se presentó en ese momento.
En noviembre del año pasado, otro joven murió en la otra sede del Centro Terapéutico del cual Emmanuel Cambra Safire también es el director. Para el fiscal, el acusado "las consecuencias que pudo evitar con tan sólo haber cumplido los mínimos recaudos establecidos para un Centro de ese tipo, sin embargo, y aún sabiendo el posible resultado fatal que en esta ocasión culmino con la vida de cuatro jóvenes, no adopto medida alguna tendiente a evitar el mismos".
