Pino llegó al Senado en un frente antikirchnerista, pero quiere reelegirse en un frente antimacrista con los trumperonistas Massa y Pichetto, Lavagna y Cristina. Las volteretas de la (ex) centroizquierda.
Lucho Aguilar @Lucho_Aguilar2
Jueves 24 de enero de 2019 13:00
En las últimas semanas, el senador Pino Solanas ha comenzado una fuerte campaña política que revela su estrategia electoral.
El punto de largada fue una entrevista veraniega con Página 12, donde dijo que “no puede pasar de febrero construir un frente amplísimo y patriótico”. Un frente “sin exclusiones” aclaró. Allí dijo que “nadie podrá frenar la polarización”, por lo que llamó a “Sergio Massa, Miguel Pichetto y Juan Schiaretti que no terminen siendo funcionales al neomacrismo”. Pino les propone discutir con ellos y el kirchnerismo “un gran proyecto estratégico nacional”.
La campaña continuó con una serie de tuits. El nuevo argumento de Pino es que “una tercera fuerza es funcional a la posibilidad de que gane Cambiemos”. Luego le dio la bienvenida a la candidatura de Lavagna lanzada por Clarín y precisó su idea: "ya llegará la hora de un gran argentinazo, deseamos que sea en octubre con los votos, y que todos esos candidatos, Pichetto, Solá, Massa, Cristina, Lavagna participen en una gran interna de un Frente Único, estableciendo los puntos básicos que tendría ese gobierno de transición".
Ya llegará la hora de un gran argentinazo, deseamos que sea en octubre con los votos, y que todos esos candidatos, Pichetto, Solá, Massa, Cristina, Lavagna participen en una gran interna de un Frente Único, estableciendo los puntos básicos que tendría ese gobierno de transición.
— Pino Solanas (@fernandosolanas) 23 de enero de 2019
Esta voltereta político-ideológica no es ninguna excepción. De hecho, como recordamos hace poco tiempo, su cargo como senador lo obtuvo como candidato de la Alianza UNEN, cuya arquitecta fue Elisa Carrió e incluía a la UCR y el Partido Socialista de Binner. Con el mismo argumento de “un frente amplísimo”, la idea era enfrentar al gobierno kirchnerista. Como se sabe, lilitos y radicales se subieron después al barco de Cambiemos y Pino quedó plantado.
Pero cada día que pasa su argentinazo con un frente patriótico y un gran proyecto estratégico se choca con la dura realidad. Ante el brutal caso de la chica violada en Jujuy a la que se le negó la aplicación de la ILE, Pino se molestó por “el desprecio humano que legisladores, gobernadores, funcionarios, que vienen de supuestas fuerzas populares y democráticas”. Parece que todavía no registró que el peronismo, aunque en el NOA se inclinó por negarle a las mujeres el derecho al aborto legal, en el mejor de los casos plantea la “unidad de verdes y celestes”.
Es una expresión de desprecio humano que legisladores, gobernadores, funcionarios, que vienen de supuestas fuerzas populares y democráticas se crean que pueden imponerle a las mujeres argentinas su voluntad. #AbortoLegalEsVida
— Pino Solanas (@fernandosolanas) 23 de enero de 2019
La otra “desilusión” fue en las últimas horas. Pino consideró “terrible que el gobierno argentino renuncie a la histórica posición Argentina de no intervención y de respeto a la autodeterminación de los pueblos en el caso Venezuela”. Sin embargo, miró para otro lado ante la actitud de sus “socios” del Frente Único y Patriótico. Massa y Pichetto se definieron claramente por la intervención norteamericana en Venezuela. La “única” “patria” para sus nuevos amigos es el amo del Norte.
Sin embargo, mientras el trumperonismo se mostraba cerca de Macri y Trump, el bloque de senadores kirchneristas hacía una defensa cerrada del gobierno de Maduro. Parece que algunos “puntos básicos” para “un gran proyecto estratégico” no estarían funcionando.
A pesar de ese golpe (de la realidad), Pino insistió en que “la suerte de América Latina se juega en gran medida en las elecciones de octubre, y la dirigencia opositora tiene que estar a la altura de las circunstancias. La dirigencia política opositora no puede perder más tiempo, tenemos que realizar la unidad del campo nacional y discutir las bases del programa del Frente Único”.
No se trata de ninguna confusión. Sucede que la estrategia de Pino es tributaria de la propuesta del kirchnerismo de unir al peronismo en todas sus expresiones. Trumperonistas, celestes papales, barones del conurbano, gobernadores feudales y burócratas sindicales. Daniel Filmus reconoció este jueves en Infobae que vienen discutiendo con Solanas esta campaña.
Una campaña que muestra la total bancarrota de la centroizquierda. La única pelea contra la polarización que quieren instalar las variantes patronales del macrismo y el peronismo, mientras ambas acuerdan en seguir pagando la deuda, garantizar las ganancias empresarias y negar a las mujeres el derecho a decidir, ya la está dando el Frente de Izquierda.
Lucho Aguilar
Nacido en Entre Ríos en 1975. Es periodista. Miembro del Partido de los Trabajadores Socialistas desde 2001. Editor general de la sección Mundo Obrero de La Izquierda Diario.