Hasta los empresarios lo reconocen: podrían aumentar el sueldo en $100.000, sin embargo el gobierno prefiere seguir custodiando sus ganancias y ofrece miserias.
Sábado 22 de mayo de 2021
A raíz de la última propuesta presentada por el gobierno respecto al incremento del sueldo mínimo en $10.500, es que se generaron diversas interpelaciones de parte del pueblo trabajador, la oposición e incluso desde el mismo empresariado.
Las críticas al incremento miserable del sueldo mínimo, sumado a los resultados de en las últimas elecciones constituyentes que golpeó a los partidos tradicionales, especialmente a los de centro y derecha, reforzó el hecho de que el gobierno se ve profundamente debilitado, cuestionado desde distintas aristas. Esto lo llevó a salir con una nueva propuesta de salario mínimo, aún con cifra desconocida.
Sin embargo, según lo expresado por el Ministro del Trabajo, Patricio Melero, es que en conjunto con el Ministerio de Hacienda están pensando un incremento del sueldo que implique un “ingreso mínimo garantizado” que se fijaría en unos (miserables) $39.000 mensuales
La propuesta inicial, fijaba un aumento del 3,2% nominal, aumentando desde $326.500 a $337.0000
Críticas desde la oposición amiga
Mientras tanto, partidos tradicionales de oposición discutían elevar la cifra a un máximo de $468.000, que fuese a través del aumento del salario básico más un subsidio por parte del Estado. Propuesta que, si la ponemos en un ojo crítico, da cuenta de que el mismo empresariado que hoy ven aumentadas sus ganancias, no tendría que cargar con el incremento de los salarios, y es el Estado el que debe desembolsar en lugar del empresario.
Mientras tanto, el empresario Richard Von Appen, presidente de ultramar, hace un llamado a las grandes empresas a de incrementarle el sueldo a quienes ganan $500.000 a $600.000, lo que da cuenta que efectivamente que existen las condiciones de incrementar los salarios y que ese aumento ni siquiera toca las lucrativas ganancias de las que se apoderan, puesto que señala que esto no implicaría “mover la aguja” de sus balances.
Mundo laboral, organizaciones sociales y económicas
Desde distintas organizaciones sociales y políticas, también centros de investigación como Fundación Sol, detallan que el ingreso mínimo no puede ser inferior a la canasta familiar básica.
Según el estudio de Fundación Sol, el gasto mediano de una familia de 3 personas ronda los $952.000, incluyendo pago de dividendos
La CUT, por su lado, ha hecho referencia a que este debiese ser de $500.000, a la vez que llama a confiar en las negociaciones (que , llamando a tener confianza en el Parlamento, el mismo que dijo que no al impuesto a los super ricos.
El sueldo mínimo, entonces, debiese cubrir los gastos de la canasta familiar, incluyendo dividendos y el pago de los servicios como agua, luz y gas. Se vuelve urgente la conquista de un salario de $600.000, sobre todo en un contexto de crisis económica en donde el desempleo es alto, y no queda otra salida que conquistarlo a través de la movilización
