El derretimiento de los hielos eternos sobre el océano glacial, que cubren gran parte de Groenlandia, provocó que emergiera una base secreta norteamericana construida durante la guerra fría en ese país.
Martes 20 de septiembre de 2016 12:18
La base, llamada “Camp Century” fue construida cerca de la base aérea que tiene los Estados Unidos en Thule, Groenlandia, en el año 1959, durante los años de la Guerra Fría. El proyecto, llamado "Iceworm" (Gusano de hielo) era una red de túneles para guardar más de 600 misiles balísticos. Pese a que ya se habían iniciado las obras, los ingenieros se dieron cuenta de que el hielo estaba "vivo" y en movimiento, lo que amenazaba la seguridad de los túneles. Entonces en 1967 el proyecto fue abortado.
La base, que fue pensada para quedar sepultada para la eternidad, ahora emerge y especialistas afirman que trae aparejados nuevos problemas ambientales, ya que con la base también emergerían desechos nucleares (ya que la base era alimentada por un reactor nuclear) y diversos desechos tóxicos tanto químicos como radioactivos como por ejemplo los policlorobifenilos, que se diseminarían por todo el océano Glacial Ártico y el Atlántico.
A partir de una posible nueva crisis ambiental se empezaron a escuchar críticas de distintos sectores para que se realice una profunda limpieza, pero todavía resta ver quién se haría cargo de tamaña empresa con costos que se cuentan por millones de dólares.
A partir de un estudio realizado por el experto en glaciares, William Colgan, el Pentágono aseguró por su parte que “reconoce la realidad del cambio climático y los riesgos que supone”, “Estados Unidos seguirá trabajando con el gobierno danés y con las autoridades de Groenlandia para arreglar las cuestiones de seguridad común”, agregó el departamento de Defensa. A su vez el ministro de Relaciones Exteriores de Groenlandia, Vittus Qujaukitsoq, se declaró “preocupado” y dijo estar determinado a esclarecer las responsabilidades correspondientes.
Conflictos políticos
Durante la construcción de la base bajo hielo, Groenlandia era parte de la Rigsfaellesskabet (Mancomunidad de la Corona) que respondía a la corona danesa, por lo que los asuntos tanto económicos y políticos como los de defensa, respondían a Dinamarca. Pero desde el año 1979 Dinamarca le otorga más autonomía a Groenlandia y en el año 2008 le transfiere las responsabilidades al gobierno local groenlandés y para el año 2009 se declara la independencia final con Dinamarca (aunque en los hechos, la corona danesa sigue manteniendo un control sobre el país glacial, ya que la jefa de estado es la reina Margarita II de Dinamarca). Por lo que ahora parlamentarios groenlandeses, en la boca de su representante en el parlamente danés, Sara Olsvig (miembro del partido Comunidad Inuit, mayoritario en el parlamento groenlandés, reformista de retórica independentista) criticó que el acuerdo entre Dinamarca y Estados Unidos es impreciso en relación a las instalaciones construidas, además de que los territorios en cuestión no fueron consultados, por lo que los gobiernos daneses y norteamericanos se tendrían que hacer cargo. A su vez, Kristian Jensen, líder de la diplomacia danesa y miembro de la OTAN, declaró escuetamente que va a “examinar” el caso, aunque afirmó que va colaborar “estrechamente con el gobierno (groenlandés)”. Por su parte el ministro de Relaciones Exteriores de Groenlandia, Vittus Qujaukitsoq, se declaró “preocupado” y dijo estar determinado a esclarecer las responsabilidades correspondientes.