Docentes, trabajadores y estudiantes, necesitamos un espacio para discutir la situación actual del sector educativo, así como un plan de lucha unificado para enfrentar los ataques a la educación pública y gratuita.
Joss Espinosa @Joss_font
Martes 27 de abril de 2021
Desde la Asamblea interuniversitaria, generada a raíz del conflicto de las y los docentes de la UNAM, se acordó convocar al Encuentro Nacional en Defensa de la Educación Pública. Un espacio que pretende aglutinar a diversos sectores que componen el gremio educativo (estudiantes, trabajadores, académicos) para discutir la situación actual de la educación, tras la imposición de las clases en línea por parte de la SEP y la Asociación Nacional de Universidades e Instituciones de Educación Superior (ANUIES) y su impacto en las condiciones laborales de millones de docentes en todo el país.
Desde el inicio del sexenio vimos una serie de ataques al sector educativo, desde la continuidad en los hechos de la reforma educativa, hasta el no rescate de las once universidades en quiebra por la “estafa maestra”, dónde cerca de 60 mil trabajadores universitarios no percibieron de manera regular su salario y dónde el gobierno federal condicionó su supuesto rescate mediante un estricto programa de “disciplina financiera” que contempla el despido de académicos y trabajadores administrativos, la suspensión de nuevas contrataciones y el congelamiento de plazas vacantes, la reducción de personal de honorarios y la reestructuración del sistema de pensiones y jubilaciones.
Bajo la pandemia y la crisis económica, el gobierno federal redobló la austeridad republicana con recortes a todas las dependencias estatales y decretos de extinción de programas educativos como los programas de educación especial y a distancia, dejando a cientos de trabajadores de la educación en la incertidumbre y el recorte a los presupuestos de distintas universidades como la UPN, la UAM y al conjunto de las normales.
Por otro lado, las clases en línea han significado un aumento de la carga laboral para el conjunto de las y los docentes, así como adaptarse a la vida virtual sin ningún tipo de capacitación, ni la garantía de recursos materiales para garantizarlo; esto también impacto a estudiantes de todos los niveles, generando una enorme deserción escolar. Ahora el gobierno federal y los gobiernos locales presionan para el retorno a clases presenciales, pero sin que este sea seguro, ya que han vacunando únicamente al personal docentes, pero no al conjunto de la población; sin medidas ni protocolos que velen por la salud de las familias trabajadoras.
Hemos visto decenas de luchas en defensa de las condiciones laborales, desde los académicos de la UACM despedidos por exigir basificación, la lucha de los docentes del Telebachillerato Comunitario a nivel nacional que exigen su reconocimiento como parte del sector educativo, los docentes del Conalep por mejores condiciones laborales, Los estudiantes de la Escuela de Derecho Ponciano Arriaga contra los despidos y la precarización laboral, las trabajadoras de intendencia del IEMS tras decenas de despidos, los maestros de la CNTE contra el fallo de la Suprema Corte de Justicia de la Nación para que las jubilaciones sean calculadas en UMA y no en salarios mínimos, los estudiantes Colima, Coahuila, TESco, UACJ y UNITEC entre otras escuelas que enfrentan el alza de cuotas.
En conferencia de prensa los sindicatos educativos ligados a la Secretaria de Agricultura y Desarrollo Rural (SADER) como el SIIINIFAP, SINTCOP, STUACh, STINCA, SIACOP y STAUACh anunciaron una serie de movilizaciones y emplazamientos a huelga para demandar el fortalecimiento de sus instituciones, aumento salarial, respeto s sus contractos colectivos de trabajo y el derecho a huelga.
Bajo este panorama consideramos fundamental que el Encuentro Nacional en Defensa de la Educación Pública sea un espacio de coordinación de todos los sectores educativos para enfrentar en común estas políticas que apuntan al desmantelamiento de los derechos laborales más elementales, la exclusión de miles de estudiantes que bajo la pandemia tuvieron que desertar en todos los niveles educativos y la profundización de la precariedad laboral.
El encuentro tendría que ser un espacio mediante el cual trabajadores, docentes y estudiantes de diversas escuelas a nivel nacional, podamos discutir, organizar e implementar un plan de lucha unificado a nivel nacional. Invitamos a todos estos sectores y a las organizaciones sociales, sindicales y de izquierda a nutrir y difundir el Encuentro Nacional en Defensa de la Educación que se realizará el próximo 8 de mayo.