Sectores de derecha en la Confech llaman a avalar la injerencia imperialista en Venezuela. Ante una derecha que se organiza en latinoamérica, se hace urgente levantar una juventud antiimperialista que enfrente a la derecha en las calles.

Ιωαχειν Santiago de Chile

Karla Peralta Díaz Médica en Antofagasta, Pan y Rosas
Miércoles 3 de abril de 2019
La derecha se articula en América Latina y Piñera declara la guerra a la juventud
Hace unos días la derecha ha salido a tensionar al CONFECH con el objetivo de cuestionar el apoyo al gobierno de Maduro que sostienen las organizaciones que actualmente poseen la conducción del mismo. Todo con un objetivo pirotécnico de cara a las próximas elecciones de federación, pero también por que buscan debilitar la organización estudiantil en medio de los ataques reiterados del gobierno de Piñera a la juventud.
El año pasado las organizaciones de la derecha ganaron cerca de 6 elecciones de federaciones, en medio de la pasividad del CONFECH frente a los principales hechos de la situación política como el mayo feminista, el asesinato de Catrillanca y el paro portuario, hechos que marcaron el 2018 con miles de jóvenes y mujeres movilizándose, sin embargo la principal organización estudiantil no hizo nada para utilizar sus medios y recursos para fortalecer la movilización y así haber golpeado más fuerte al gobierno. En medio de esa indecisión, la derecha volvió a ganar fortalezas en el movimiento estudiantil.
La derecha latinoamericana viene intentando articularse en el continente desde sus figuras presidenciales para alinearse bajo el alero imperialista de Donald Trump. Así lo vimos con la cumbre del PROSUR, donde Piñera, Macri, Bolsonaro se dieron cita en nuestro país para articular sus planes contra el pueblo trabajador, las mujeres y la juventud.
Piñera por su parte le declara la guerra a la juventud, uno de los sectores que históricamente han sido más explosivos contra el régimen. Así hoy prepara nuevos ataques para la juventud, no contento con la ya ley Aula Segura, impulsa la disminución de la edad mínima para realizar el control preventivo de identidad, que es una medida que busca criminalizar y entregar más herramientas represivas a la fuerza policial en contra de la juventud que se moviliza en las calles. También pretende a través de su plan vivir sin drogas, que sólo buscan criminalizar y estigmatizar a los jóvenes.
La derecha busca debilitar por todos los medios posibles al movimiento estudiantil, buscando apaciguar una fuerza que si se articula con las mujeres y la clase trabajadora puede hacer tambalear aún más su gobierno. En ese contexto no sólo buscan impulsar medidas desde la presidencia, sino que, Chile Vamos recurre a la contraloría para inmiscuirse en FECH y que el estado intervenga a raíz de la agenda fech que contiene un instructivo de aborto.
Al contrario de la derecha en el Confech, les estudiantes debemos rechazar el avance de la derecha en América Latina en las calles
Ante todo este contexto de una derecha que pretende pasar por sobre la organización y derechos de la juventud, se vuelve aún más nefasto que un sector de federaciones dirigidas por la derecha en el CONFECH, pretendan que el organismo estudiantil avale la intervención imperialista en Venezuela, llamando a reconocer como legítimo el gobierno golpista de Guaidó.
A diferencia de las JJCC y sectores del Frente Amplio en la CONFECH que respaldan el gobierno autoritario y de precariedad para el pueblo trabajador de Maduro como una alternativa, desde Vencer y Pan y Rosas no avalamos el gobierno de Maduro, pero de ninguna manera respaldamos al títere de Trump en Venezuela que es Guaidó. Debatimos con la concepción de que estar en contra del imperialismo significa apoyar de manera instantánea el gobierno de Maduro, más bien, lo que podrá dar respuesta en Venezuela es una alternativa que se levante desde las y los trabajadores con independencia de la injerencia yankee y de ruptura con el capitalismo y los empresarios nacionales o extranjeros.
El envalentonamiento de la derecha tanto a nivel latinoamericano como su expresión en el movimiento estudiantil, no es al azar. La oposición encarnada en las Juventudes Comunistas y el Frente Amplio ha mantenido una tregua conciliadora con el gobierno de Piñera, siendo totalmente tibia y centrando sus esfuerzos en los acuerdos con el gobierno, la ex Nueva Mayoría e incluso la Democracia Cristiana. Todo esto apostando en la negociación parlamentaria que se ha probado en innumerables veces como una estrategia estéril para dar respuesta a los jóvenes, mujeres y trabajadores.
Una muestra de esto son las declaraciones de Javiera Toro, presidenta de Comunes, quién el pasado 31 de marzo ante una reunión citada por Piñera declaró a Radio Bio Bio: “Esperamos que la invitación a conversar sea más que un gesto y no sólo una formalidad, que realmente signifique un giro a la disposición que ha mostrado el Gobierno", A juicio de Toro, la idea del encuentro es "producir acuerdos sustantivos que permitan efectuar reformas que respondan a las necesidades del país".
Es decir, una de las voceras del Frente Amplio, apuesta a generar acuerdos con el gobierno de la derecha, para responder a la necesidades del país. Sin embargo, desdibuja por completo que las necesidades a las que apunta Piñera distan de las que se reclaman en las calles y más bien están orientadas a fortalecer el negocio para los privados.
Por otra parte, Javiera Molina, militante de las JJ.CC, secretaria general de la federación de estudiantes de la Universidad de Valparaíso y vocera nacional de la Confech, declara para emol: "la intencionalidad de estas federaciones sólo busca instalar a la Confech como un órgano que valide a Juan Guaidó como Presidente, sin tener en cuenta la búsqueda de la paz y el fortalecimiento de la democracia en la sociedad venezolana". Sin embargo, la “democracia” no va a fortalecerse de la mano de Maduro y su régimen militar. Esto devela que para dar respuesta al pueblo Venezolano no basta con oponerse a Guaidó y Trump, es necesario plantear una nueva alternativa que se levante con la fuerza del pueblo trabajador venezolano.
Ante la ofensiva de la derecha, levantemos una juventud antiimperialista y combativa
Ahora, ¿Qué significa apoyar la política de la derecha imperialista de Donald Trump? ¿Cuál es el programa que las federaciones de derecha del confech llaman a respaldar?
Sin dudas, lo aberrante de la derecha de Trump se puede ver con la política antiinmigrante que establece en sus fronteras, donde los derechos humanos que tengo le preocupan en Venezuela son brutalmente pisoteados. Pero no sólo este aspecto, se encuentra dentro de la ideología derechista. Con Piñera podemos ver como sistemáticamente pretende reprimir y criminalizar con más fuerza a la juventud con el control preventivo de identidad, aula segura, y su plan antidrogas, incluso manchando sus manos con la sangre de Camilo Catrillanca, un asesinato cobarde que desató una respuesta en las calles contra la represión hacia el pueblo mapuche.
Es la misma derecha retrógrada que junto a la moral conservadora de las Iglesias, nos niega el derecho al aborto legal, seguro y gratuito, arrojando a miles de mujeres pobres a la clandestinidad y además, sostienen la violencia hacia la diversidad sexual, donde en nuestro país han subido los crímenes de odio. Que reivindica la dictadura militar con figuras como Bolsonaro y que en Chile, con la complicidad de los gobiernos de la ex Nueva Mayoría, mantiene intactos los pilares de la dictadura que nos niegan el derecho a una educación gratuita, nos entregan pensiones de hambre y hacen negocios con nuestra salud.
Además de ser anti derechos de las mujeres, juventud y la diversidad sexual, son profundamente anti trabajadores. Pretenden fortalecer el régimen capitalista que genera que un puñado de empresarios se vuelva cada vez más rico a costa del trabajo de la inmensa mayoría de la población, donde las mujeres cargan con los trabajos más inestables y con una doble jornada laboral impuesta por los roles de género que se le asignan. Pedir el reconocimiento de la injerencia yankee en Venezuela, es dar pie para el avance de esta derecha en américa latina y las y los estudiantes no podemos permitirlo. Al contrario de la “oposición responsable” del Frente Amplio, debemos organizarnos desde las bases para articular un plan de lucha que se proponga enfrentar a la derecha en las calles y frenar los ataques hacia la juventud.
Por eso desde Pan y Rosas y Vencer decimos que es urgente levantar una juventud antiimperialsita y contra la derecha: ¡fuera la injerencia yankees de América Latina!”; No a la criminalización y represión contra la juventud, no al control de identidad preventivo; Vamos por la legalización de la marihuana y contra el plan Anti drogas del gobierno; Por el derecho al aborto legal, libre, seguro y gratuito; Contra todo tipo de violencia hacia la diversidad sexual levantada por la moral de la Iglesia y la Derecha. Por esto, te invitamos a organizarte con nosotres y ser parte de esa juventud que quiere cambiarlo todo, para que con la fuerza del pasado 8M ¡Enfrentemos a la derecha y sus reformas precarizadoras con una gran fuerza en las calles!

Ιωαχειν
Editor y columnista de la Izquierda Diario