Este jueves 28 los estudiantes tenemos que ser protagonistas en la movilización para enfrentar el ajuste. Los estudiantes no queremos permitir que el ajuste recaiga sobre nosotros, queremos enfrentar la devaluación, los tarifazos en los servicios básicos y futuros aumentos en el boleto. Salgamos a las calles por una salida del pueblo trabajador a la crisis.
Martes 26 de julio de 2022 15:48
Estamos en un marco donde la crisis social, económica y política se acelera, con un dolar escalando y empresarios buscando devaluar cada vez más el salario de los y las trabajadoras. La inflación que va a ser récord el mes de julio llegando al casi 36% se nota en que cada vez más nos cuesta llegar a fin de mes. Está claro que el gobierno aplica un fuerte ajuste y la nueva ministra de economía, propuesta por Cristina, lejos de cambiar el rumbo busca profundizar el plan económico y pacto con el FMI que dejó Guzman al renunciar. Los estudiantes no queremos permitir que el ajuste recaiga en nosotros, jóvenes trabajadores y trabajadoras, con devaluación, tarifazos en los servicios básicos y futuros aumentos en el Boleto.
El ajuste en Universidad
Las consecuencias de querer seguir achicando el déficit fiscal para pagarle al FMI en la universidad se expresa en la subejecución del presupuesto como medida tomada por la ministra de economía. Pero además, la pobreza y la falta de recursos es una gran barrera para que millones de jóvenes, que a duras penas, cuando lo logran, llegan a terminar la secundaria, tengan la posibilidad de continuar sus estudios en las universidades.
A esto se le suma la precarización laboral y la falta de empleo que perjudican la continuidad pedagógica. Ante esto, en la UNLaM, no existen las suficientes becas para que todo aquel que quiera estudiar lo haga y las pocas becas que existen no son integrales. Por eso desde En Clave Roja UNLaM dentro del Frente de Izquierda peleamos por becas integrales para que todas y todos puedan estudiar. El centro de estudiantes la liga federal ligado a la Juventud Universitaria Peronista no convoca asambleas ni pone en discusión la actual situación política y económica y como nos perjudica a los estudiantes. Exijamos que convoquen a movilizar este jueves 28 para enfrentar el ajuste.
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El pasado 18 de julio cerca de 21.000 jóvenes entraron a las aulas de la Universidad Nacional de la Matanza para iniciar el curso de ingreso. En la UNLaM, a pesar de ser una universidad pública, no existe realmente ingreso irrestricto. El curso es arancelado y con cupos, lo que implica que miles de jóvenes del conurbano bonaerense queden por fuera de aspirar a un título de grado. El ingreso restricto no solo tiene que ver con el carácter de pago del curso sino también con la evaluación meritocrática con la que se mide a los ingresantes. El rector de la universidad, Daniel Martínez y el centro de estudiantes (LFU) insisten en su plan de exclusividad y mercantilización de la universidad. Multiplican los convenios con empresas (ya son más de 269 las empresas asociadas a la universidad), se devalúan los títulos de las carreras de grado mediante la generalización de los posgrados pagos. Que distinto sería que nuestros conocimientos no esten en función de las grandes empresas sino en resolver los problemas de las grandes mayorías populares. Donde, por ej, estudiantes de arquitectura e ingeniería investiguen y solucionen el gran problema habitacional que se vive en la matanza o el problema de la cuenca río matanza que estudiantes de medicina podrían tratar a los niños y niñas que sufren la contaminación y tantos otros ejemplos.
Los y las estudiantes tenemos que intervenir en esta crisis, no podemos permanecer ajenos a toda esta situación. Ya que, además de sufrir en carne propia el aumento del costo de vida, la informalidad laboral y los ataques a la educación pública de parte de los distintos gobiernos, también porque acá nadie se salva solo: no hay salida individual a ésta crisis. Solo de la unidad y la lucha común en las calles de trabajadores, junto con los estudiantes y sectores populares, puede venir una salida favorable a las grandes mayorías, que debería comenzar con 6 medidas que se imponga con una movilización popular: 1. Aumento de emergencia de salarios, jubilaciones y programas sociales. Actualización automática: suben los precios, suben los ingresos. 2 Nacionalizar el comercio exterior y las grandes empresas del agronegocio bajo administración de los trabajadores. 3. Trabajo genuino para todos y todas: reducción de la jornada laboral: 6 horas, 5 días a la semana, sin afectar el salario. Plan nacional de obras públicas al servicio de las necesidades populares. 4. Ningún tarifazo: nacionalizar los servicios públicos bajo control de sus trabajadores 5. Fuera el fmi. desconocimiento soberano de la deuda. basta de saquear el país. 6. Nacionalizar el sistema bancario.
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