El movimiento estudiantil y sindical en Chile no puede quedarse de brazos cruzados, no puede adaptarse a un ánimo de “vacaciones y fiestas” mientras el genocidio continúa. Esto no se trata de una "sensibilidad" solamente, es la realidad internacional. Boric no va a parar todo, eso es una ilusión, incluso, seguirá haciendo negocios millonarios con Israel, en materia militar y de mercancías, también mantendrá sus relaciones políticas, por que Apruebo Dignidad y Socialismo Democrático han demostrado ser un perrito faldero del Sionista Biden, dándose abrazos en EEUU y callando frente al financiamiento del genocidio.
Domingo 17 de diciembre de 2023
La famosa autora marxista, feminista y antirracista Angela Davis, cuenta con la frase “en una sociedad racista no basta con no ser racista, hay que ser antirracista” haciendo referencia al racismo que se ha extendido y enraizado en la sociedad desde el desarrollo del modo de producción capitalista.
Frente a este escenario e identificando que el racismo tiene historia y es sostenido por intereses económicos y políticos, en su célebre frase la militante de Panteras Negras y el Partido Comunista Estadounidense llamaba a conocer sus causas, a no contentarse con convencer de ser antirracistas a las personas que ya tienen simpatía con el término sino buscar explicar y unir en las filas del comunismo y en consecuencia, a derribar las barreras del racismo dentro de la clase trabajadora, a esas obreras y obreros que están permeados por la ideología supremacista blanca de los sectores conservadores de la burguesía Norteamericana.
Hoy, el gobierno de EEUU es cómplice del genocidio más violento del siglo XXI, el cuál se sustenta en argumentos racistas, de “limpieza étnica”, religiosos, económicos y políticos. Desde Trump, Biden, hasta Bernie Sanders, han apoyado y se han mostrado en una posición pasiva respectivamente, frente al asesinato.
A estas alturas, todos en Gaza tienen amigos o familiares que han sido asesinados o heridos por el ejército israelí. En sólo dos meses, las Fuerzas de Defensa de Israel (FDI) han matado a no menos de 18.000 personas y herido a cerca de 50.000 más. En total, esto significa que uno de cada 30 habitantes de Gaza ha sido asesinado o herido por Israel.
Cabe destacar que a un mes del comienzo del genocidio, Biden estaba más preocupado de desmentir las cifras de asesinatos de los hospitales en Gaza que de detener el desabastecimiento y los bombardeos financiados por su gobierno, tremendo "demócrata".
Mientras millones son asediados por las bombas y las ofensivas terrestres de Israel, las votaciones de organismos de derecho internacional han permitido solo 4 días de “pausa humanitaria” que no fué respetada íntegramente por el invasor, eso es la exigencia en el Senado de falsos demócratas como Bernie Sanders, mientras pasada la fecha, el genocidio continúa.
La situación es insoportable, con infraestructura básica destruida como los principales hospitales, desabastecimiento de recursos médicos, de agua y comida, el genocidio continúa, con desplazamiento forzado a punta de bombardeos al interior de Gaza, con desplazamiento forzado a punta de disparos al interior se Cisjordania el genocidio continúa, con masivas movilizaciones internacionales en apoyo a Palestina como en éstos momentos en Yemen, el genocidio continúa.
Sindicatos en todo el mundo han declarado su apoyo a la población en Palestina incluso impidiendo el envío de armamentos a Israel como el 5 de noviembre, cuando centrales sindicales belgas bloquearon el transporte y descarga de aviones estadounidenses con armas para Israel. El genocidio continúa.
¿Cómo es posible que esto siga adelante? Las principales potencias mundiales avalan al Sionismo, con potencias nos referimos a industria y dinero y con mundiales a quienes tienen sus ejércitos como narices metidos en cada rincón del mundo del que pueden sacar un provecho en primera instancia económico y en segunda instancia político, es la forma de gobierno capitalista en su etapa imperialista de pudrición.
En este escenario, las personas que estamos lejanas geográficamente, nos encontramos a dos enemigos principales, nuestros gobiernos cómplices de la masacre y la adaptación a sus políticas criminales. Mientras el genocidio continúa nada puede continuar normal, como dice el cantante Residente en un reciente video: “¿Por qué no paramos todo como en la pandemia?”
La adaptación a los intereses del opresor es una de las principales armas ideológicas de las que se sirve el Sionismo para justificar su masacre, desde una tierra elegida hasta la “destrucción del terrorismo”, justifican la puesta en marcha de un aparato militar millonario que tiene por principal objetivo, matar mujeres y niños.
Es en este contexto que, el movimiento estudiantil y sindical en Chile no puede quedarse de brazos cruzados, no puede adaptarse a un ánimo de “vacaciones y fiestas” mientras el genocidio continúa. Boric no va a parar todo, eso es una ilusión, incluso, seguirá haciendo negocios millonarios con Israel, en materia militar y de mercancías varias también mantendrá sus relaciones políticas, por que Apruebo Dignidad y Socialismo Democrático han demostrado ser un perrito faldero del Sionista Biden, dandose abrazos en EEUU y callando frente al financiamiento del genocidio.
Por lo mencionado más arriba es criminal no pensar en estar a la altura del ejemplo internacional, tomar las banderas antiimperialistas que han alzado en países del Medio Oriente, o en el mismo corazón de EEUU, con estudiantes como en Harvard o los trabajadores de distintos puertos que se manifiestan uniéndose al movimiento judío antisionista “not in our name” o “jewish for peace”.
Millones de personas en todo el mundo dejan sus pies en la calle dando muestras de solidaridad, como el paro estudiantil en Octubre en España por Palestina. Todas estas personas, o gran parte de ellas tienen algo claro, sin sensibilizar respecto al tema, la política hegemónica es desentenderse de una masacre que tiene un gran cerco mediático y es justificada cada día en las votaciones de las asambleas y cortes internacionales.
Es por esto que aunque no lo parezca, se vuelve urgente que las principales federaciones estudiantiles continuen convocando a iniciativas en apoyo a las personas Palestinas, llamando a unirse y conformar coordinadoras por Palestina en todas las universidades públicas y privadas, organizando manifestaciones callejeras en solidaridad que convoque a estudiantes de todos los niveles educativos y hacia Marzo, preparar grandes asambleas para discutir, concientizar y seguir organizando iniciativas políticas, mientras el genocidio siga en curso.
La Fech y Confech son organismos cuyas mesas directivas están conformadas por juventudes del gobierno, como la presidenta de la Federación de estudiantes de la Universidad de Chile Catalina Lufin es militante de las Juventudes Comunistas. Pero esto no quiere decir que se tengan que sumar a la política cómplice de Apruebo Dignidad y Socialismo Democrático. Quienes ni siquiera han despedido al embajador de Israel quien transmite imágenes del 7 de Octubre justificando abiertamente el genocidio de Israel.
Esta perspectiva, antiimperialista y pro Palestina, es la única que puede educar a las generaciones jóvenes que los intereses económicos y geopolíticos de un puñado de capitalistas no puede estar por encima de las vidas de millones de personas.
Por lo expuesto anteriormente, es que la frase de la militante Angela Davis puede ser interpretada hoy en este sentido: En cualquier parte del mundo donde se guarde silencio y no se movilice a la sociedad ante el genocidio sionista, no basta con repudiar, hay que ser antisionista y moverse por el alto al fuego en Palestina.
