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Red Internacional
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Coronavirus y Capitalismo. Portugal es el único que ha suspendido el derecho de huelga

Portugal es el único país que suspende el derecho de huelga en el estado de emergencia. Ni en la India del fascista Modi. ¡Ni en Italia, que se enfrenta a la peor de las situaciones, lo ha hecho!

Raquel Varela

Raquel Varela @RaquelVarelaHis

Sábado 21 de marzo de 2020 09:55

En Italia se han suspendido las huelgas sólo en sectores esenciales relacionados con la lucha contra el virus; en los Estados Unidos en ninguna parte; en España sólo se ha limitado el derecho de reunión, no el derecho de huelga. En Italia, además, fue la amenaza de una huelga general, de trabajadores fijos y precarios, lo que llevó al gobierno a aprobar la prohibición de los despidos durante la pandemia. En Francia se garantiza el derecho de huelga, a pesar de que se ha decretado el estado de emergencia, así como el toque de queda.

El decreto aprobado en Portugal es un error histórico sin precedentes, el mayor error que se ha cometido desde el 25 de abril de 1974. La historia no perdonará. En Portugal se aprobó el estado de excepción para permitir de facto los despidos sin resistencia... la tinta del decreto aún no se había secado y Groundforce aprovechó hoy y ya ha anunciado el despido de más de 500 trabajadores y la reducción de salarios de otros 500 -que ni siquiera pueden hacer huelga-. Quieren que sea obedecer y callar, ya lo decía el viejo Salazar: "Si supieras lo que cuesta ordenar preferirías obedecer toda la vida".

Los siguientes son TAP, restaurantes, hoteles, servicios, así es como "saldremos de la crisis", condenando a millones de personas al hambre para dejar intactas las ganancias y los bonos de dividendos de media docena de accionistas - sólo con estos, considerados desde 2008, se pagarían 6 meses de salario a todos los trabajadores en Groundforce-.

No se le ocurrió al Gobierno portugués limitar -con el Decreto de emergencia- el derecho a la remuneración de los accionistas, nacionalizando los beneficios de estas empresas, o al menos los recientes dividendos, para garantizar los salarios a millones de trabajadores y sus familias.

El derecho de huelga se ha terminado -con el entusiasmo de los medios de comunicación-, es decir, se suprime el derecho democrático de quien trabaja para luchar por su trabajo, que es el derecho a tu vida y a la de tus hijos. Sí, la democracia ha sido suspendida, y lo ha hecho el Partido Socialista. Con el apoyo entusiasta de la derecha, de la extrema derecha, y -quién lo hubiera pensado- el voto a favor del Bloque de la Izquierda [Bloco de Esquerda] y la abstención del PCP [Partido Comunista de Portugal], que se enfrentan así a una crisis moral y ética sin precedentes.

Hoy en la TAP [Línea Aérea de Portugal], mañana será para todos. Los que viven del trabajo no sólo están en cuarentena, luchando juntos por la vida hoy. A estos - a los más pobres, más frágiles, más precarios, no solo se les pidió que se quedaran en casa. Se les ha exigido, por decreto militar, que renuncien al futuro. Y aquí, al contrario que con la pandemia, no se puede decir que todos estamos en el mismo barco. Si el virus no elige las clases sociales, la crisis económica es clara en cuanto a quién se va a dejar atrás. Y el gobierno ya ha dicho de qué lado está.

Sólo quiero recordarles, como nota final, que estos trabajadores, en los puertos, aeropuertos y automotrices, han convocado espontáneamente huelgas, plenarias y paros, pidiendo que detengan la producción, y que utilicen equipos de protección en los casos en que sean sectores claves para el abastecimiento (puertos y aeropuerto). En otras palabras, las huelgas antes del estado de emergencia ayudaron a contener el contagio en lugar de propagarlo.

Fue ese temor, a que los trabajadores exigieran en Auto Europa (automotriz) quedarse en casa, lo que llevó al gobierno a aprobar este decreto con esta especificidad, antidemocrática, única en Europa.


Raquel Varela

Raquel Varela es hstoriadora. Investigadora del Instituto de Historia Contemporánea de la Universidade Nova de Lisboa, Portugal.

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