En medio de clases virtuales por la crisis sanitaria, que han arrojado datos importantes sobre la precariedad en los alumnos y profesores, las autoridades de la UNAM y la Asociación Autónoma del Personal Académico de la UNAM (AAPAUNAM) se encuentran en mesas de trabajo por la revisión salarial y contractual 2021-2023.
Lunes 1ro de febrero de 2021
Lo que puede considerarse como un momento histórico para la educación en todo el mundo, con la entrada en escena del SARS-CoV-2 obligó al sector a ajustarse a una enseñanza virtual en poco tiempo, esta situación abre un panorama de nuevas reflexiones, se reabren viejos debates en torno a qué tipo de educación es la que se necesita y los desafíos en una era cada vez más tecnológica. Los principales afectados además de los alumnos son los profesores.
En México la pandemia vino a profundizar una crisis en el sector educativo, hoy se encuentran grandes sectores de trabajadores entre docentes y administrativos sin recibir sus salarios principalmente de las Universidades que se encuentran en quiebra.
En el caso particular de la UNAM, cuenta con alrededor de 53 mil docentes. De éstos, alrededor del 70% de los nombramientos académicos son profesores de asignatura quienes, mantienen salarios bajísimos y sin ningún tipo de estabilidad en el empleo. Para agravar la situación, en el último período se les suma a estas condiciones una forzosa adaptación a dar clases en línea sin las herramientas suficientes, sobrecupo en los grupos y largas jornadas de trabajo y académicas.
En este contexto es que se da la revisión salarial y contractual de la plantilla docente representada por la AAPAUNAM, que mantiene el Contrato Colectivo de Trabajo, desde su origen ha sido denunciada por solo administrar el contrato y mantener una fachada de simulación de la defensa de los derechos, además de una estructura profundamente antidemocrática. Ha aceptado en cada revisión salarial sin ningún tipo de lucha.
Ahora, la cínica propuesta de las autoridades universitarias, quienes por años también han hecho caso omiso de manera indolente a los reclamos de los que sostienen la vida académica de la universidad, argumentando como siempre la falta de presupuesto. Para este periodo ofrecen 3.4% al salario y 1.8% en prestaciones que comparado con la inflación de este año 3.5% representa un nulo aumento.
Algunas de las denuncias que se expresan por parte de los profesores es el incumplimiento en dependencias al acuerdo del rector, de recontratar a todo el personal académico vigente durante el periodo escolar 2021, COA (Concurso Oposición Abierto) que fueron interrumpidos o no fueron abiertos, Cobertura ineficiente de las plataformas virtuales de la UNAM a los domicilios de la comunidad universitaria, situación que limita el trabajo a distancia y restricción de acceso a niveles superiores o disminución a inferiores del PRIDE.
Para avanzar es necesario organizarse
El estado de indefensión en el que se encuentran la mayoría de los profesores en la UNAM al no contar con una real representación de sus intereses y el poco desarrollo de una vida sindical, política y organizativa hace que la situación se agrave con la crisis pandémica y económica del país.
La situación ha sido denunciada por años en su mayoría por profesores con trayectoria en luchas sociales y han surgido diversos intentos organizativos, en el marco de este periodo de revisión salarial la Asamblea de Profesores de la UNAM dirigieron una carta abierta al Rector de la universidad Enrique Graue, en la que piden se atiendan las necesidades que tienen para desempeñar su labor docente en el contexto de la pandemia que se ha visto modificada de manera radical, por ello demandan que la incrementación salarial sea del 15% y que se cancelen las clases en línea.
Nosotros como agrupación de trabajadoras y trabajadores, académicos y administrativos, hemos sido partícipes de estos procesos organizativos, estamos convencidos de la necesidad de la dignificación de la labor docente, la defensa de la educación pública y gratuita y por la lucha por un aumento al presupuesto educativo.
Consideramos que para poder ganar las justas demandas es necesario conquistar una corriente sindical que se apueste por la independencia de los gobiernos y con la fuerza suficiente para llevar adelante una política contra la burocracia que hoy por hoy dirige el sindicato, que en los 80s representó la fusión entre trabajadores administrativos y académicos el STUNAM. Nuestros esfuerzos van encaminados a la recuperación de este sindicato para las bases, para defender las conquistas laborales y avanzar hacia la mejora de la clase trabajadora en su conjunto.