Selva Almada, Martín Kohan, Emilio García Wehbi, Federico Falco y Pablo Katchadjian son los finalistas de este galardón que entregará 500 mil pesos al ganador.
Martes 7 de diciembre de 2021 18:39
El Premio de Novela Fundación Medifé-Filba tendrá un ganador o ganadora que se anunciará el miércoles durante una ceremonia en la librería de Palermo Eterna Cadencia.
Los jurados responsables de la elección del ganador son Sergio Bizzio, Vera Giaconi y Claudia Piñeiro.
Selva Almada, una de las finalistas, fue elegida por su novela "No es un río" (Random House Mondadori) la autora entrerriana concluye la “trilogía masculina” iniciada por El viento que arrasa y Ladrilleros con un texto que explora los pactos y alianzas entre varones a partir de la memoria de un amigo muerto y los conflictos entre locales y foráneos en un paraje de rural, donde las relaciones son tan ásperas como el paisaje que las aloja.
Martín Kohan fue elegido por su novela "Confesión" una novela de tres historias autónomas que se conectan entre sí con un trasfondo algo perturbador capaz de cruzar el deseo sexual que siente una preadolescente por un joven apellidado Videla al que sólo ve pasar de lejos, un atentado al avión donde viaja un dictador de facto y una conversación durante una partida de cartas entre una abuela con cierto deterioro cognitivo y su nieto.
En tanto Emilio García Wehbi logró estar entre los cinco elegidos por su novela "Maratonista ciego" (Ediciones DocumentA/Escénicas) se trata de una historia que funde autobiografía y ficción para narrar las vacilaciones un personaje que busca su destino y reflexiona sobre el paso del tiempo y los que ya no están, mientras las figuras ausentes de su madre y su padre irrumpen en persistentes evocaciones.
"Los llanos" (Anagrama) escrita por Federico Falco está centrada en un narrador que se exilia en la soledad de un campo a cultivar una huerta tras la ruptura con su novio y ese proceso de separación comienza a recordar distintas situaciones de su vida.
Finalmente Pablo Katchadjian con "Amado Señor" el escritor entreteje preguntas existenciales con episodios de su vida desde una prosa lúdica y mordaz que parodia la indagación espiritual que instituyó San Agustín en sus Confesiones a través de constantes paradojas y juegos de palabras.
Fuente: Télam