El presupuesto bonaerense profundiza el endeudamiento que asfixia la provincia. El gobierno de Kicillof busca “fortalecer” la provincia de Buenos Aires cuidando las ganancias de los grandes empresarios y aumentando los fondos para las fuerzas represivas, relegando las necesidades básicas de los más vulnerables.
Sábado 16 de noviembre de 2024 12:42
Foto: Página web gobierno PBA
Llegó noviembre y es momento de hacer las cuentas. Tanto en el Congreso de la Nación como en la Provincia de Buenos Aires se empiezan a cerrar propuestas de los presupuestos para 2025. Momentos de balances económicos en las cuentas fiscales atraviesan ambas gestiones.
El ministro Pablo López presentó el lunes el proyecto de presupuesto y la ley impositiva en una reunión informal en la Legislatura. En los mismos se propone “La PBA como escudo” frente a las políticas nacionales, suponiendo que el proyecto bonaerense apuesta al fortalecimiento del "Estado presente".
Este “escudo” parece tener algunas fisuras, como un yelmo mal forjado. En principio por el propio movimiento de la PBA, donde el oficialismo viene de una interna feroz y relaciones diplomáticas inestables con sus pares camporistas. La negociación del presupuesto está atravesada por la interna entre Kicillof y los Kirchner. Para ordenar el bloque oficialista tendrá que negociar con aquellos diputados conducidos por Sergio Massa y Máximo K.
Ahora bien, la apuesta de escudar a la provincia de Buenos Aires por ahora no parece ser la regla. Para arrancar la defensa de la “escudería” del presupuesto, el proyecto de ley hace un extenso análisis donde el gobierno nacional se lleva la principal responsabilidad frente a los malos indicadores provinciales.
Los datos analizados por la PBA arrojan un 8,9% de desocupación para el segundo trimestre del 2024. Para las mujeres la cifra alcanzó el 10.3%, registrando la brecha de género más alta desde 2021. Entre los jóvenes de la PBA se agrava la situación registrando un 21% de desocupación. El mismo informe detalla 58,2% de pobres (un aumento de 13 puntos respecto al 2023) y un 21,7 % de indigentes. El escudo no pareciera estar funcionando para los más vulnerables.
Por como se presentan los datos podríamos decir que la prolijidad del presupuesto no es la virtud de esta gestión. Además, obtener los datos desglosados de la actual ejecución del presupuesto es una aventura, ya que con la llegada de Insaurralde a la Jefatura de Gabinete bonaerense los informes que se elaboraban con mayor periodicidad dejaron de aparecer. Su escandalosa salida no significó su reposición, ni mucho menos. Se hacen públicos con una gran demora, contando hoy sólo con los del primer semestre de 2024. De más está decir que todos ellos sólo tienen unos pocos números generales.
Por eso una vez seleccionados muy sutilmente estos datos, y deslindando responsabilidades sobre la verdadera situación de la provincia, se pasa a presentar el proyecto del año que viene. En ese marco, y partiendo de este estado de situación, para el momento de finalizar 2024 la Gobernación tendrá un déficit en el resultado de financiero de 0.7%. Hacia el 2025 no cambia el panorama, ya que lo estiman un déficit de 0.5%, casi 1,5 billones de pesos.
Estos déficit proyectados tienen que ver esencialmente con el pago de intereses de deuda. Según el informe del segundo trimestre del 2024 de la PBA sobre la ejecución del presupuesto, el resultado económico y el resultado primario son positivos. El problema surge cuando se abonan todos los intereses de deuda que llevan a las cuentas en rojo a la provincia. Se pagaron 336 mil millones de pesos en intereses.
En esta sintonía el Ministerio proyectó en el presupuesto, una deuda del 5.1% respecto del PBG (Producto Bruto Geográfico) para este 2024. Un aumento leve respecto del 2022 y 2023, pero una caída de 2 puntos respecto a 2019. Para cubrir el déficit financiero propone un nuevo endeudamiento de $2.452.973.522.000. El equivalente a USD 2.400 millones.
En materia de infraestructura se destaca ”Actualmente la provincia cuenta con 223 contratos de obras firmados que están siendo cofinanciados por organismos internacionales por un valor superior a USD 1300 millones. Entre los principales proyectos de obras de infraestructura que forman parte de la cartera con organismos internacionales, la cual en la actualidad contempla 25 préstamos por USD 2812 millones.”
Es decir que se redobla la política de endeudamiento ya comenzada a principios de este año. Lejos quedó aquella “propuesta” de fortalecer los ingresos del Estado.
Ahora bien, en materia impositiva Kicillof viene de aprobar el RIGI provincial que da extensos beneficios a aquellas empresas que realicen inversiones millonarias en la provincia, pero que más bien achica los ingresos del Estado. Ya establecido este negociado, el presupuesto y la ley impositiva se jactan de “no incrementar la presión tributaria”, pero tengamos en cuenta que a principio de año fue el mismo gobierno el que aumentó ingresos brutos (II.BB.), un impuesto regresivo que termina pagando cada trabajador. Parece establecerse una norma de exensión impositiva a los empresarios y aumento de los impuestos que terminan pagando los trabajadores. Sigamos el análisis.
El discurso oficial de la Gobernación se jacta de que producto de las medidas de Milei la provincia perdió $2,9 billones en materia tributaria, con una caída en la recaudación tributaria del 10%.
Si bien Ingresos Brutos no varía la alícuota y no se modifica la estructura del Impuesto de Sellos, sobre los impuestos patrimoniales se implementarán más beneficios para aquellos contribuyentes que “abonen” en tiempo y forma. Se trata de una bonificación de hasta el 35% del total, para el impuesto automotor e inmobiliario.
Por ahora el “escudo” que se proponen es el de pago serial de intereses de deuda y cubrir los déficit con más endeudamiento, además de sostener exenciones impositivas a los más ricos. Un circuito que no tiene mucho que envidiar a los economistas más ortodoxos. Ahora veamos si los gastos que propone son “blindajes” frente a la política nacional.
En la categoría de seguridad (sin incluir los salarios) el aumento presupuestario proyectado es del 116 % (en términos nominales en relación a 2024). Parece que una forma de blindar la provincia sería aumentar las armas represivas del Estado. Destacan preocupación por los salarios de los agentes que “habían perdido” en la gestión Vidal, y destacan los aumentos presupuestarios en patrulleros y armamentos incorporados.
El proyecto prevé un aumento en la formación y equipamiento de las fuerzas policiales. Se prevé expandir la presencia barrial en 40 nuevos municipios con la incorporación de 1.000 nuevos efectivos. Donde el gasto destinado a esto asciende a $23.575 millones. Se crearán nuevas unidades de investigación y se incorporarán 400 efectivos especializados, además de los ya 1700 incorporados en 2020.
En materia de Salud la propuesta tiene otro carácter. Según el proyecto de ley, la gobernación realizó una proyección del gasto que destina a Salud para este 2024. Con esta proyección se prevé que para el 2025 un aumento de sólo el 29%, cuando la inflación será de por lo menos un 31,4 % según el Relevamiento de Expectativas del Mercado (REM).
Si tomamos el presupuesto del 2023, lo destinado a salud representa el 6% del total del gasto. Para este 2025 representa la misma proporción. Es decir, no hubo ninguna variación en proporción.
En materia de educación el gobierno provincial realizó una proyección del gasto a realizar para este 2024. De esta manera el presupuesto que propone para el 2025 refleja un aumento del 160% del presupuesto no salarial total. Sin embargo, si tomamos el gasto del presupuesto 2023, lo destinado a educación representa el 26% del total de aquel momento. En 2025 representará el 25%, es decir un 1% menos.
Siguiendo la misma tonica. El Ministerio de la Mujer recibió fondos por el 0.06% del gasto total respecto al presupuesto 2023. Para el 2025 se estima que sea del 0,04% respecto al gasto proyectado. Hacia el Ministerio de Ambiente se da la misma situación, pasando del 0,17% al 0,10 %.
En materia de construcción, Kicillof propone la construcción de viviendas en la localidad de Guernica, pero en los detalles aparecen más bien obras destinadas a la construcción de cloacas y otros. ¿Kicillof va a seguir posponiendo un reclamo que las familias de Guernica vienen llevando desde la pandemia?
Cuando asumió en 2020 cuestionaba a Vidal porque el déficit habitacional de la PBA era de 2 millones de personas. Según Romina Barrios, titular del Organismo Provincial de Integración Social y Urbana en la PBA, “tenemos alrededor de 3 millones de bonaerenses en situación de déficit habitacional, cuantitativo y cualitativo”, es decir que la situación empeoró.
El presupuesto “escudo” prevé un gran gasto en materia de seguridad, posible emisión de deuda pública, el pago de intereses voluminosos y ciertas exenciones de impuestos, además de las ya otorgadas durante este año. Si quieren hacer un “escudo” para la provincia deberían aumentar las partidas de áreas sensibles como educación, ayuda alimentaria, vivienda o salud, de manera que se recupere lo perdido en los últimos años en vez de seguir aumentando año a año lo que va al pago de deuda.
Si la dirección fuera en otro sentido de la flecha y se aplicara un impuesto a las grandes fortunas, solo sobre la rentabilidad de las empresas radicadas en la PBA y que fueron beneficiadas por el gobierno de Milei, podría solucionarse el problema fiscal y comenzar a hacerse frente a la situación crítica que vive la mayoría de los bonaerenses.
