El miércoles 21 el Consejo Superior tratará el presupuesto para el año 2017. El rectorado quiere aumentar la bandeja del comedor y otorgar millones para las empresas de seguridad.
Lunes 19 de diciembre de 2016 14:33
Hace algunas semanas Cambiemos, el Frente Renovador y el PJ dieron los votos para el presupuesto nacional 2017, un presupuesto que destina millones al endeudamiento, al capital financiero y los empresarios, pero migajas para los sectores populares.
Uno de sus puntos controversiales es el gran recorte (3100 millones menos), para el área de ciencia y tecnología, presionando hacia el financiamiento privado del sector y una reducción del 60% de los ingresantes al CONICET con respecto al año anterior.
Este miércoles 21 de diciembre el Consejo Superior de la Universidad, compuesto por el rector radical Daniel Pizzi, el vicerector Jorge Barón, los decanos de todas las facultades, consejeros estudiantiles, docentes, graduados y el personal de apoyo académico, votará el presupuesto de la UNCuyo para el año entrante.
¿Aumenta el presupuesto?
En primer lugar hay que establecer que el monto del presupuesto 2017 para la UNCuyo, de $2.935.758.312, representa un aumento neto con respecto al año pasado del 42%. Pero si hacemos una comparación interanual midiendo la inflación para este año según el Índice de Precios de Consumo del Congreso de la Nación, lo que superficialmente parece un gran aumento no es sino una equiparación (inclusive más de un punto porcentual por debajo), con la inflación establecida por este organismo en la cifra de 43,4%. Por lo que en términos reales no hay un aumento del presupuesto.
Esto es resultado del esquema más global del Presupuesto Nacional, votado en común por los diputados de Cambiemos y el peronismo. Ambas fuerzas son las garantes de los recortes presupuestarios.
La seguridad, más importante que las condiciones de estudio
Por otro lado, se observa un incremento en las partidas para Seguridad en un 70%, mientras para becas se sigue destinando menos del 2% del total del presupuesto. Una situación indignante.
A las autoridades y los consejeros les preocupa más que el campus universitario esté cubierto de empresas privadas de seguridad que de estudiantes con dificultades económicas que tengan garantizadas las condiciones para continuar con sus estudios.
Las Becas para el Ingreso y Permanencia Universitaria (BIPU) recibirán un 0% de aumento con respecto al año pasado y, para los estudiantes que utilizan todos los días el comedor, ya está previsto un nuevo aumento que se suma al realizado a principios de este año. En dos años, la bandeja pasaría de $3 a $14.
Mientras que a Seguridad se le destinan más de 40 millones, a las becas para jardines infantiles no se les aumenta el presupuesto y se le destina solo 165 mil pesos, dificultando el ingreso y permanencia de todas/os aquellas/os estudiantes que tienen hijos.
Otro aspecto a tener en cuenta es el monto destinado a la previsión de los aumentos del servicio público, que aumenta con respecto al año pasado un 95%. Los tarifazos de Macri llegaron a la Universidad y complican la distribución presupuestaria.
En defensa de la universidad pública para frenar el ajuste
El debate que se viene dando en la UNCuyo por la gratuidad de la carrera de Higiene y Seguridad fue respondida por las autoridades con un presupuesto de 5 millones que se destinan a un grupo de licenciaturas, sin estipular cuánto de ese monto va para cada carrera en particular ni cómo se ejecutará ese presupuesto. La continuidad de Higiene y Seguridad sigue siendo, para estas autoridades, una cuestión de segundo orden.
Al igual que el año pasado, y a pesar de algunos cruces pero sin mayores consecuencias, tanto los consejeros como decanos que responden a la UCR y al PJ acordarán el presupuesto propuesto por el oficialismo, como vienen haciendo a nivel nacional y provincial, continuando con los planes de ajuste que viene llevando adelante el gobierno de Macri contra la educación y los sectores populares.
Es necesario que todos los estudiantes y las familias de trabajadores que quieren acceder a la educación universitaria, se pongan de pie y se plante la resistencia contra el ajuste en el país, las provincias y las universidades. En la Universidad Nacional de Córdoba, los estudiantes lograron frenar la avanzada del radicalismo para que los empresarios decidan sobre la educación pública. Esta lucha testigo, sumada a la experiencia de auto organización asamblearia que llevaron a cabo miles de estudiantes a nivel a nacional y centenares de estudiantes en la UNCuyo este año, demuestra que hay fuerzas para enfrentar esta avanzada neoliberal.