En el contexto de paro nacional indefinido, exigido por miles de profesores a nivel nacional y convocado por el Colegio de Profesores, este miércoles los docentes volvieron a recorrer las calles del país, rechazando el actual proyecto de Carrera Profesional Docente y protagonizando una nueva masiva movilización que remece a todo el país.
Miércoles 3 de junio de 2015
Los profesores no dan tregua. La fuerza y potencia de sus movilizaciones quedó ya demostrada tras la “rebelión de las bases”, durante los últimos meses del año pasado, y continúa en el ojo del debate nacional, producto del actual paro indefinido que mantiene movilizados a miles de profesores a lo largo del país.
Fueron 70 mil personas marchando esta mañana en Santiago y a nivel nacional la cifra alcanzó los 150 mil asistentes. Tanto en la capital como en Antofagasta, Calama, Valparaíso, Coquimbo, Los Ángeles, Concepción, Puerto Montt, entre otras ciudades, se desarrollaron manifestaciones de profesores y estudiantes.
En Santiago la marcha comenzó pasada las 11 horas en Parque Bustamante, donde tomó una ruta distinta, debido a que la Intendencia Metropolitana no autorizó movilizarse por la Alameda. Pese a esta negativa, miles y miles de profes y estudiantes comenzaron a congregarse en dicho sector, alcanzando una convocatoria de 70 mil personas y dejando claro que la movilización nacional de los profesores es en serio.
De esta manera, comenzaron a llegar diversos colegios y comunales de profesores, de distintas zonas de Santiago, todos con el objetivo de hacerse escuchar, de exigirle al Gobierno que la propuesta que está presentando no representa las demandas más sentidas de un gremio que lleva décadas luchando por sus justas demandas. Comunales de La Pintana, Conchalí, Puente Alto, La Granja, Peñalolén, Chacabuco-Colina, Maipú; colegios y liceos como el Instituto Nacional, Internado Nacional Barros Arana, Alessandri, Liceo 7 de Providencia, Lastarria, Liceo 1 de Santiago, entre otros, se hicieron presentes en la manifestación. Sumado a esto, la ACES y CONES también solidarizaron con los docentes.
Además, los estudiantes universitarios también mostraron su total apoyo al paro docente, por lo que instituciones de educación superior como la Universidad de Santiago, Universidad de Chile, Universidad Central, Universidad Academia de Humanismo Cristiano, entre otras, marcharon codo a codo con los profesores. Por otra parte, hubo organizaciones de profesores marchando como el SUTE y la agrupación de docentes Nuestra Clase.
LID Chile conversó con Álvaro Pérez, integrante de Nuestra Clase y profesor del colegio Mariana Egaña, institución municipal de la comuna de Peñalolén, quien comentó que su colegio se mantiene en paro desde el viernes pasado, en apoyo a la movilización nacional de profesores, agregando que “dentro de las demandas más sentidas en mi colegio está el tema del agobio laboral por lo que la demanda de 50 horas lectivas y 50 horas no lectivas cobra una relevancia importantísima, puesto que el trabajo que nos llevamos para la casa es demasiado, es mucha la carga laboral”.
Álvaro también comentó sobre los sucesivos descuentos en el sueldo que hace la Corporación de Peñalolén a todos los profesores que se movilizan, lo que afecta en el apoyo total de los docentes por un tema material, pero que sin embargo, “los profesores igual han decidido movilizarse porque el abuso ya es demasiado y los sueldos están lejos de ser los mejores”, añadiendo que “también existen problemas con la jubilación de los profesores, ya que la Corporación en más de una ocasión no ha cumplido con el pago de estas”.
La combatividad y lucha de los profesores en regiones
La potente masividad del paro de profesores- que tiene más de un 90% de adhesión a nivel país- también se palpa en diversas regiones de Chile. Los profesores de Calama marcharon y recorrieron las calles del centro de la ciudad, en Ovalle un grupo de docentes se encadenó a la Gobernación de la Provincia de Limarí, expresando el enorme descontento que sienten al no ser escuchados por ninguna autoridad y el rechazo hacia la propuesta de Gobierno que sólo aumentaría la competencia entre docentes.
En Valparaíso continúan las movilizaciones de profesores con un 64% de adhesión al paro y además el Colegio de Profesores de dicha región llama a movilizarse para mañana jueves a las 11 horas desde Plaza Sotomayor hasta el Parque Italia. Más al sur del país, en Concepción cerca de 4 mil docentes participaron de la marcha, donde incluso se sumaron más colegios que hace poco votaron paralización, como es el caso del colegio Teresiano, establecimiento particular subvencionado de Los Ángeles.
La provincia de Ñuble también se vio remecida por la movilización docente, ya que a las 11 horas se dio inicio a una caravana de autos de profesores, los que con banderas y lienzos se manifestaron contra el proyecto de ley. Además, convocaron a una cicletada para mañana jueves. Una situación similar se replicó en Osorno, donde los profesores marcharon por el centro de la ciudad, acompañados por estudiantes, los que juntos impulsaron un carnaval callejero que recorrió diversas calles y plazas del sector.
Por su parte, el Gobierno sigue haciendo oídos sordos a las demandas históricas del gremio docente, incluso Marcelo Díaz, Vocero de Gobierno manifestó que “serán los parlamentarios los llamados a discutir las leyes que hemos presentado y queremos hacer un llamado a los profesores a que lleven la discusión ahí”, demostrando así que para las autoridades los profesores de base no tienen ningún peso en las decisiones que se toman. ¿Acaso son los profesores movilizados los que tienen acceso a las decisiones que se toman en el Parlamento o son las mismas autoridades cuestionadas por todo el país, las que terminan votando leyes que afectan a miles?
Lo cierto es que los docentes están lejos de permitir que las decisiones sigan siendo tomadas en las alturas del Parlamento. Ahora son miles y miles a nivel nacional los que exigen sus demandas y que su voz sea realmente tomada en cuenta. Las movilizaciones por la educación, ya sea de profesores y de estudiantes, vienen en ascenso, mientras el Gobierno desarmado no da respuesta alguna.