Un serio problema viven las y los vecinos de la población Baltazar Castro de Rancagua. Se trata de la demolición de los actuales blocks departamentos donde viven. Esto, producto del “Programa de Regeneración Habitacional” impulsado por la municipalidad de Rancagua, que junto con la demolición de las viviendas otorgará un subsidio de salida a quienes sean propietarios de los departamentos.
Viernes 26 de marzo de 2021
Un serio problema viven las y los vecinos de la población Baltazar Castro de Rancagua. Se trata de la demolición de los actuales blocks departamentos donde viven. Esto, producto del “Programa de Regeneración Habitacional” impulsado por la Municipalidad de Rancagua.
El problema es que más de un 60% de las familias que viven actualmente ahí no son propietarios, sino que arriendan hace años, algunas incluso más de 20 años en esa situación. (Diario "El Rancaguino" 17/03/2021)
Frente a esto se han acercado a conversar con las familias diferentes personalidades del mundo político, entre ellas Raimundo Agliati, el candidato de RN respaldado por el cuestionado alcalde Eduardo Soto. En una entrevista al diario El Rancagüino, el candidato asegura que con su experiencia como ex director de SERVIU puede "ayudar a liderar la ayuda a los vecinos y vecinas".
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Agliati solicitó a las actuales autoridades regionales de vivienda “ponerse la mano en el corazón” y dar una solución real a las más de mil familias que hoy quedarían sin subsidios de salida. Pero más allá de estos dichos, lo que se necesita es echar la mano al bolsillo y garantizar el derecho a una vivienda digna y de calidad, asegurado por un impuesto a las grandes fortunas y nacionalización de los recursos naturales; una posición totalmente contraria a la visión de políticos de la derecha que durante años han mantenido intacto el grotesco negocio de las inmobiliarias.
Y es que la problemática de la vivienda se ha agudizado con fuerza desde que comenzó la pandemia del COVID-19. Hemos sido testigos de cómo las autoridades han actuado frente a las tomas de terreno con desalojos y haciendo un uso injustificado de la fuerza policial, como en la toma del cerro Renca hace un par de semanas; o la destrucción de las viviendas al costado de la línea férrea en el sector de Gultro Viejo, hace unos meses.
Según el último Censo del 2017, un 60,4% de las familias en Chile decía contar con vivienda propia, un 20 % arrienda y los precios subieron un 53 % entre 2007 y 2017. Hoy en día con la pandemia, los despidos, la cesantía y el hacinamiento y las familias que tienen que vivir de allegada o que derechamente no tienen dónde dormir y viven en la calle, ha incrementado. Vivimos en la más grande incertidumbre por no contar con un lugar propio para vivir.
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Por otro lado, las utilidades que generó la minería el 2020 fue de US$ 36.337, lo que es 8,3% más que el año 2019.
En el caso de Rancagua la mina El Teniente es la que más utilidades genera a CODELCO. ¿Cuánto de esa producción va a las y los pobladores? Hoy el cobre está en niveles históricos de venta, con el precio de la libra del metal rojo por sobre los 4 dólares las últimas semanas, lo que algunos economistas llaman el nuevo "Súper ciclo del cobre". ¿Dónde van a parar los recursos producidos por el pueblo trabajador? ¿Y quiénes los administran? Con estas preguntas se pretende poner sobre la mesa el destino de lo que antiguamente se conocía como el “sueldo de Chile”.
Son miles de millones los que los grandes empresarios se forran, mientras la inmensa mayoría, el pueblo trabajador, vivimos en la cruda precariedad. Es necesario que nosotros como trabajadores y comunidad demos respuesta a estas problemáticas, y nos organicemos en pos de impulsar programas para vivienda y trabajo, basado en asambleas de obreras y obreros de la construcción y de la minería, con pobladores. Pensar en puntos como la construcción de más viviendas y obras públicas, el reparto de las horas de trabajo con la reducción de la jornada laboral para que todas y todos puedan trabajar, así como la nacionalización de los recursos naturales bajo control y gestión de las comunidades y trabajadores.