Los trabajadores del estado saben de qué se habla, ya que sufren la precarización laboral en persona. Por eso cayó muy bien el proyecto de ley por el Pase a Planta Permanente presentado por los diputados nacionales, Nicolás del Caño y Myriam Bregman, actual formula presidencial del Frente de Izquierda.
Patricio Abalos Testoni Redacción CABA - @ElPatoAT
Viernes 23 de octubre de 2015 13:03
Desde la Agrupación Marrón Clasista se recorrió en las últimas semanas distintas dependencias estatales presentando el proyecto, entregándoselo a los trabajadores para que lo revisen, se lo apropien y lo discutan en sus lugares de trabajo y abrimos conversaciones con juntas internas y otras agrupaciones para impulsar una campaña nacional.
Como el proyecto abarca a todas las dependencias del estado, y del todo el país, las recorridas incluyeron a ámbitos de distinto tipo para que los trabajadores puedan dar su opinión y organizarse. Algunas de estas dependencias fueron los Ministerios de Trabajo, de Economía, de Planificación, de Desarrollo Social; el Indec, al Anses, al Conicet, el Instituto Nacional de Tecnología Industria (INTI), el Servicio de Sanidad y Calidad Agrolimentaria (SENASA), la Secretaría Nacional de Niñez, Adolescencia y Familia (SENAF), Dirección Gral. de Música (DGMus-GCABA), los Hospitales Garrahan, Alende, Posadas, entre otras dependencias.
El proyecto tiene como fin acabar la precariedad que sufren miles de trabajadores en el estado, y con sueldos muy por debajo de la canasta básica. Abundan formas de contratación en el estado, desde empresas tercerizadas o cooperativas; hasta contrataciones a través de ONG inexistentes. Miles son los que trabajan hace años como monotributistas o con plantas transitorias que se convierten en eternas, y otras formas de precarización. Al leer el proyecto, Oscar Mazu, del área de Polos Audiovisuales del Ministerio de Planificación, mencionaba sobre el proyecto que “una de las virtudes que tiene, es el hecho de que tiene en cuenta a los trabajadores tercerizados, si bien hay un porcentaje alto de precarización directa en los ministerios, en el ámbito publico, hay una forma solapada también de trabajo precarizado, en el casos de la cantidad de tercerizaciones de trabajo, que pueden ir desde trabajos de ordenanza, limpieza, seguridad, que con la figura de empresas que se tercerizan o de cooperativas esos trabajadores terminan de algún modo siendo también trabajadores en negro del estado. Me parece muy bueno que el proyecto contemple ese tipo de figuras.”
Hay que tener en cuenta que existen actualmente muchas luchas por estos reclamo, ya que estas condiciones laborales dejan a los trabajadores sin sus derechos básicos como obra social, vacaciones, ART, aguinaldos, etc. Sumado a que cuando se organizan los trabajadores son perseguidos por reclamar estos derechos. Al leer el proyecto, Roxana Casino, trabajadora tercerizada del Hospital Garrahan, expresaba: “la verdad que el proyecto está muy bueno, es algo que siempre estamos pidiendo tanto los tercerizados, como contratados o becarios, porque queremos que se termine el negociado de las tercerizadas. Desde mi experiencia, en el Hospital Garrahan, como trabajadora de limpieza tercerizada, empezamos a organizarnos frente a los acosos, el maltrato, los salarios miseria, dijimos basta. Nos enfrentamos a la burocracia del SOM que intento en dos ocasiones hacer fraude, y a la empresa Floor Clean, que a través de traslados persecutorios y despidos busca amedrentarnos. Mientras las autoridades del Hospital se lavan las manos, porque dicen que no somos trabajadores del Hospital; una verdadera canallada. Nosotras, con mi hermana fuimos trasladadas, y cuando pudimos ganar la cautelar fuimos despedidas sin justificativo. Ahora nos salio el fallo con la orden del juez de que tenemos que volver al Garrahan” .
Hace años que el estado se convirtió en el primer empleador de trabajo precario (tanto a nivel nacional, provincial o municipal), manteniendo un porcentaje muy bajo de trabajadores de planta permanente. En este sentido una trabajadora del Ministerio de Trabajo, marcaba la contradicción de estar precarizada en el propio organismo que tendría que controlar que no sucediera esto en todo el ámbito laboral: “Creo que el proyecto de ley es fundamental ya que el estado esta cumpliendo un rol esquizofrénico de cara a sus empleados y a la sociedad. El Ministerio de Trabajo es el organismo encargado de garantizar el trabajo registrado y de calidad, pero a su vez precariza y terceriza a sus trabajadores con contratos que no garantiza la estabilidad o con monotributistas que le facturan a entes o a universidades pero trabajan en la función pública. Sólo algunos se sometieron a un sistema de concursos para acceder a la planta permanente en la cual una persona tiene que concursar por el propio puesto de trabajo que ocupa hace 20 años (años de tercerización laboral). En este sistema de irregularidad laboral se encuentran todos los trabajadores del ministerio.”
Por esto en el proyecto está contemplado que todos los trabajadores estatales pasen directamente a planta permanente, independiente de su manera contractual, con todos los derechos y el correspondiente encuadramiento escalafonario. A su vez exige que a igual tarea, iguales salarios, con iguales derechos. Asimismo el pase contemplará en el salario la antigüedad real, y se exigirá el reconocimiento de todos los derechos laborales y sindicales con carácter retroactivo al día de la fecha real de ingreso. Muchas veces se ofrece la estabilidad, por menores sueldos. Una compañera de la SENAF manifestaba este problema: “con 20 años de planta transitoria, actualmente pasar a planta permanente me significa perder toda la antigüedad y tres mil pesos menos de mi sueldo”.
Juan, del INTI, resume con precisión como viven los trabajadores esta precariedad en sus trabajos: “Un trabajador precarizado, sea cual fuere la forma contractual y el grado de precarización, es un trabajador con temores, angustiado por su situación y con las defensas disminuidas. Incluso, víctima del ocultamiento que de él hace el Estado. Está bajo la alfombra, no existe en las estructuras. Con ello no sólo se dibujan los presupuestos, sino que se le niegan derechos: limitadas apelaciones administrativas, calificaciones crediticias diferentes, dificultades para obtener cargos dentro del marco del Estado Nacional, de ocupar otros puestos vacantes- pese a tener los conocimientos -en distintos organismos pero dentro del propio empleador, es decir , desiguales condiciones para desarrollar su carrera.” Y afirma a continuación que “hoy en día esta es la condición en la que se encuentran miles de trabajadores (en el INTI, de alrededor de 2900 trabajadores, el 80% no pertenece a planta permanente), porque es el resultado de una política que se inicia en la década de 1970, que tiene su auge doctrinario durante el neo-liberalismo de los 90, pero que luego, por mezquinas conveniencias propias, se la ha continuado aplicando por los sucesivos gobiernos hasta la fecha.”
De los distintos intercambios surgía que la precarización atravesaba todas las dependencias. Una trabajadora del Ministerio de Economía expresaba que “Laburo hace 20 años acá. Soy ley marco (una forma de planta transitoria) pero al paso que vamos me parece que así me voy a jubilar. ¡Ojala salga este proyecto! Una situación similar refería una contratada del INDEC: “Hace 28 años que trabajo en el INDEC y no soy de planta permanente. Me parece muy importante que se pueda impulsar esta ley para que pasemos a planta”.
El proyecto es una forma de potenciar la lucha de los trabajadores que se están dando en todo el país contra este fraude. Por esto fue elaborado por trabajadores que mantienen estos reclamos hace años. Justamente porque solo se puede confiar en el control de los propios trabajadores, el proyecto contempla que los procesos de pase a planta, sea fiscalizado por las organizaciones de base, con representación directa, para evitar las arbitrariedades de los funcionarios que existen actualmente. Trabajadoras del Alende, como Laura Magnanim expresana “nos estamos organizando en el hospital, y por eso apoyamos el proyecto de ley para que los trabajadores pasemos a planta, ya que es una pelea que todos debemos que dar. Tenemos trabajadores que cobran en mano $2900 o contratados con 10 años de antigüedad. El pase a planta significa mejores condiciones para los compañeros y estabilidad laboral, pero también queremos denunciar que el estado es el mayor empleador de trabajo en negro”.
Es por esto que el proyecto de ley no pretende saltear estas luchas, sino al contrario, fortalecerlas. Es por esto que se convoca a que sea revisado, discutido, y apropiado por todos los trabajadores, delegados, juntas internas, agrupaciones sindicales y políticas, y que sea impulsado con una gran movilización en las calles para que sea finalmente aprobado y poner en el centro del debate nacional la precarización laboral en el estado.