Cada vez es más evidente el caso de corrupción de la petrolera Oldebrecht y los funcionarios priístas tanto en el financiamiento de la campaña de EPN, como en los contratos de que esta empresa buscaba obtener para lucrar con contratos en Pemex.
Viernes 18 de mayo de 2018
El periodista Raúl Olmos, integrante de Mexicanos Contra la Corrupción y la Impunidad (MCCI), dio a conocer una información importante de la carpeta de investigación abierta por la PGR sobre el caso Odebrecht, así como de los supuestos sobornos que esta empresa dio a funcionarios de Pemex para obtener contratos millonarios.
Es relevante aclarar que dicha carpeta fue reservada por los directivos de Pemex para que nadie pudiera verla en 21 años, alegando razones de seguridad para la investigación, lo cual resulta conveniente para Enrique Peña Nieto y para el principal imputado, Emilio Lozoya Austin.
La investigación periodística destacó que a partir del 2 de diciembre de 2013 la petrolera brasileña presentó su propuesta para obtener el contrato para obras y al día siguiente se dio la primera de una serie de transferencias que sirvieron para sobornar a los altos funcionarios de Petróleos Mexicanos. De esa manera Oldebrecht logró hacer transacciones millonarias para acceder a la refinería de Tula, cuando su oficina de sobornos realizó transferencias a otras cuentas en el Neuve Bank de Liechtenstein, a la empresa offshore Zecapan S. A., ligada a Lozoya Austin según narran los delatores en Brasil.
Así, la empresa brasileña tuvo en sus manos la adjudicación directa del acondicionamiento del lugar, movimiento de tierras, construcción de plataformas para el proyecto de aprovechamiento de residuales de la refinería de Tula. El Consejo de Administración de Pemex acordó un monto de pago de 165 millones de dólares, es decir de 2 mil 225 millones de pesos para la petrolera brasileña. Sin embargo el contrato final, se firmó con un costo total de 2 mil 315 millones de pesos, incluyendo gastos que se generaron en el transcurso de la obra.
Otros responsables
El Consejo de Administración de Pemex realizó el 27 de enero de 2014 una reunión en la que intentaron simular que existía una evaluación de empresas, para determinar a quién le asignarían el contrato, pero como se puede apreciar con la información antes dada, era una completa farsa ya que el proyecto ya estaba asignado a Oldebrecht de antemano, los asistentes a la reunión de ese consejo fueron:
Miguel Tame, director de Refinación; Carlos Murrieta Cummings, director de Operaciones; Mario Alberto Beauregard Álvarez, director de Finanzas; Marco Antonio de la Peña Sánchez, director jurídico; Leonardo Cornejo Serrano, coordinador de proyectos de modernización y Jesús Lozano Peña, subdirector de Proyectos, y quien firmó el contrato con Odebrecht. Además de gente de Emilio Lozoya como Froylán Gracia Galicia, su coordinador ejecutivo, y Carlos Roa Rodríguez, su coordinador de asesores, ya que el propio Lozoya ni el subsecretario de Hidrocarburos, y ahora expresidente del PRI, Enrique Ochoa Reza, acudieron.
El antecedente
A esto habría que agregarle que otro de los testigos protegidos del caso Odebrecht en Brasil, Carlos Fadigas, confesó su relación y cercanía a la campaña del PRI en 2012, para que Enrique Peña Nieto fuera presidente, mediante la empresa Braskem, filial de Oldebrecht. De acuerdo con los documentos de MCCI, Braskem inyectó dinero a la campaña del Revolucionario Institucional por medio de una transferencia de 1.5 millones de dólares a la empresa Latin America Asia Capital, localizada en los paraísos fiscales de las Islas Vírgenes, empresa que también se encontraba vinculada a Emilio Lozoya.
Pero la historia no terminó ahí, ya que en plena contienda electoral Oldebrecht transfirió 3 millones 140 mil dólares a empresas brasileñas ligadas a los delatores de Lozoya, utilizando Braskem, la petrolera brasileña que por aquel momento se encontraba construyendo la planta Etileno XXI, otra jugosa conseción en el estado de Veracruz asociadan con la empresa mexicana Idesa.
De hecho la relación entre Odebrecht y Peña Nieto comenzó a existir desde antes de que este último tomara posesión como presidente, ya que en la primera semana de abril de 2010, EPN cuando era gobernador del Estado de México, visitó a Marcelo Oldebrecht en Brasil y después en 2011 este último fue a Toluca para reunirse con el priista. De hecho Peña se encontró con él por tercera vez en la ciudad de Querétaro, el 12 de noviembre de 2012, posteriormente EPN ya como presidente se encontró con Fadigas.
El inconveniente de la justicia
Ahora, sería importante tener en cuenta unos de los más grandes problemas que existen para que los responsables sean procesados, y es que en México, a diferencia de otros países de América Latina, no existen comisiones independientes que investiguen estos casos. Por ejemplo aunque la PGR diga que está llevando el caso, la realidad es que este órgano se encuentra directamente bajo la tutela del presidente de la república. Al considerarse como parte del poder ejecutivo, por ello se ve difícil que EPN quiera juzgarse a sí mismo.
Hay que agregar que, además de que la Procuraduría General de la República es un organismo pútrido hasta lo más profundo, es el responsable de la “Verdad histórica” en el 2014 por la desaparición forzada de los 43 normalistas de Ayotzinapa y también de que el exgobernador de Chihuahua, presunto complice del desvío de millones de pesos para campañas priistas, permanezca cómodo en EE. UU. sin que la PGR tramite su extradición y sea juzgado.
Otro ejemplo se dio en octubre de 2017, cuando la propia PGR destituyó al titular de la Fiscalía Especializada en Atención de Delitos Electorales (Fepade), Santiago Nieto Castillo, después de que este declarara que dijo al diario Reforma que Emilio Lozoya, (ya para aquel entonces ex director de Pemex) lo había presionado para que declarara públicamente su inocencia por presuntos desvíos de Odebrecht al Partido Revolucionario Institucional (PRI). La PGR hipócritamente dijo que la salida de Nieto Castillo era porque este funcionario había transgredido el Código de Conducta de la Institución.
Santiago Nieto declaró en marzo de este año, que su destitución como titular de la Fepade fue porque trató de investigar el presunto caso de corrupción entre la petrolera Odebrecht y el posible financiamiento ilegal de la empresa petrolera a la campaña del PRI en el 2012. Además denunció que Jorge Márquez, quien fue Oficial mayor de la Secretaría de Gobernación cuando Miguel Ángel Osorio Chong era su titular, trató de sobornarlo para que guardara silencio ante el tema.