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Red Internacional
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Violencia policial. Bronca en EE. UU. por el asesinato de un niño de 13 años a manos de la Policía

El hecho ocurrió el 29 de marzo y este jueves se conoció un video donde se ve a Adam Toledo desarmado y con las manos en alto.

Jueves 15 de abril de 2021 21:00

Imagen WTTW News

El pasado 29 de marzo un policía de la ciudad de Chicago le disparó a un jóven que estaba desarmado, con sus manos en alto. Adam Toledo tenía 13 años y vivía en Little Village, un barrio mayoritariamente latino de la ciudad. El destino de Adam es el de miles de jóvenes afroamericanos y latinos que son brutalmente asesinados por la policía racista de EE.UU.

Este jueves se publicó el video de la cámara que portaba uno de los policías que persiguieron a Adam, entre otros materiales que estaban en poder de la Oficina Civil de Responsabilidad Policial (COPA por sus siglas en inglés). Hasta este jueves el fiscal de distrito decía tener pruebas de que Adam estaba armado.

La COPA entiende el dolor de la familia y publica estos materiales de acuerdo con la política de publicación de vídeos de la ciudad", dijo el portavoz de la COPA, Ephraim Eaddy, en un comunicado el miércoles. "Los valores fundamentales de la COPA, la integridad y la transparencia, son esenciales para construir la confianza del público, en particular en los incidentes relacionados con tiroteos de agentes, y somos inquebrantables en nuestro compromiso de mantener estos valores."

El video sale a la luz mientras continuan las protestas en la ciudad de Minneapolis, a unas 7 horas de viaje de Chicago, por el asesinato de Daunte Wright también a manos de la policía.

La policía de MInneapolis también es la responsable del asesinato de George Floyd el año pasado, que desato una nueva oleadad del movimiento Black Lives Matter, que fue catalogado como el movimiento de protesta más grande del país desde el movimiento por los Derechos Civiles.

La alcaldesa de la ciudad, la demócrata Lori Lightfoot dijo en una conferencia de prensa previa a la liberación del material que había visto el "insoportable" video de la policía matando a Adam, pero no hablaría de lo que vio porque podría comprometer las investigaciones en curso de la COPA. Anteriormente se comprometió a encontrar a los responsables de "poner un arma en las manos" de Adam, desviando la culpa del agente que le disparó.

El mismo jueves Lightfoot dijo que los detalles de la muerte de Adam dados a conocer en el tribunal eran correctos, pero que no le correspondía a ella confirmar si la información provista por el fiscal era correcta.

El asesinato de Adam desató jornadas de protesta donde los participantes recordaban a los cientos de víctimas de la policía y denunciaban el constante acoso que sufren las comunidades negras y latinas tanto en Chicago como en el resto del país.

Incluso con las protestas pacíficas, la tensión en la ciudad antes de la publicación de los informes y las imágenes de vídeo era palpable. La policía suspendiólos días libres de los agentes y se ampliaron los turnos a 12 horas en previsión de posibles disturbios.

El Departamento de Transporte de Chicago anunció que un puente sobre el río Chicago será levantado el jueves por la noche para "pruebas y mantenimiento" y dice que no está relacionado con la publicación del vídeo. El verano pasado, Lightfoot y la ciudad se enfrentaron a intensas reacciones por haber levantado los puentes que conectan el centro con los barrios de la ciudad durante las protestas contra el racismo y la brutalidad policial en el marco del resurgimiento del Black Lives Matter.

La ciudad de Minneapolis y la de Chicago, ambas gobernadas por demócratas, reprimieron con ferocidad las protestas del año y todo parece indicar que seguirán la misma receta. Nada muy diferente de lo actuado por los Republicanos, con Trump a la cabeza, que respondió al movimiento por justicia racial con la Guardia Nacional.

Las elecciones presidenciales lograron canalizar la gran bronca en la calle y las demandas de abolir y desfinanciar la policía hacia las urnas, sobre todo por la presencia de Kamala Harris, la primera vicepresidenta afrodescendiente del país. Pero el racismo sistémico del país está lejos de desaparecer y la presidencia de Biden podría estará signada por muchos de estos estallidos.