El 16 de agosto del año en curso, el vicepresidente Álvaro García Linera se presentó en el acto de conmemoración de los 25 años de la carrera de sociología de la Universidad Autónoma Gabriel René Moreno, lo cual causó mucha molestia en los estudiantes, ya que éste se realizaba al calor de la aprobación de la ley que quita la intangibilidad del TIPNIS.
Viernes 18 de agosto de 2017
Foto: vicepresidencia
El 16 de agosto del año en curso, el vicepresidente Álvaro García Linera se presentó en el acto de conmemoración de los 25 años de la carrera de sociología de la Universidad Autónoma Gabriel René Moreno, lo cual causó mucha molestia en los estudiantes, ya que éste se realizaba al calor de la aprobación de la ley que quita la intangibilidad del TIPNIS.
A continuación reproducimos un comunicado de estudiantes de base frente a ésta situación.
Asumiendo las posturas que nos corresponden y siendo coherentes con la línea discursiva critica que asumimos como sociólogos, nos corresponde hacer el balance de la visita de Álvaro García Linera.
Empecemos por el papel de nuestros representantes estudiantiles, como ya estamos acostumbrados y no podía ser de otra manera las instancias oficiales de nuestra universidad hacen gala de la postura ecléctica que los caracteriza de acuerdo a los intereses pactados con instancias superiores de gobierno. (Y su accionar será indistinto ante cualquier otra autoridad, gobernador, alcalde, etc.)
Pero es curiosa la actitud que ha tomado nuestra dirigencia estudiantil, no es desconocido para todos los estudiantes la falta de experiencia en el manejo de este y otro tipo de situaciones, la falta de tuición que tuvo nuestro representante al tener un discurso bastante superfluo, vacío de contenido y lambiscón, denota una vez más el bajo nivel de preparación académica.
No podemos dejar de lado la participación activa que tuvieron compañeros de sociología y algunos dirigentes estudiantiles a los cuales se los pudo ver en primera línea durante la marcha que protestaba en contra del proyecto que pretende construir una carretera en medio del Territorio indígena y parque nacional Isiboro-Secure (T.I.P.N.I.S), ¿entonces, cuál sería la intención de este tipo de acciones? Por un lado, vemos una posición condescendiente hacia el gobierno y, por otro, un activismo en contraposición en lo que este último propone.
En todo caso no se está en contra de tener la presencia de autoridades de gobierno, porque este tipo de actos de una u otra manera ayudan a generar un criterio más amplio, teniendo en cuenta y no dejando de lado las atenciones que todo invitado merece sin caer en la sumisión ni en actitudes condescendientes.
En relación a las protestas realizadas por grupos de activistas ajenos y parte de la carrera de sociología, que se manifestaron dentro del auditorio, no se puede deslindar responsabilidades ante una situación que era predecible y aprobada implícitamente por la participación de C.E.S. quienes junto a los manifestantes formaron parte de las actividades de apoyo y protesta en defensa a la intangibilidad del T.I.P.N.I.S, en anteriores jornadas.
Por lo general la intervención de García Linera se enmarco en el desarrollo de la consejería en temas de metodología de la investigación, dejando de lado temas coyunturales con los cuales bien se podría haber contrastado el rol del sociólogo, y su implicancia en la problemática social.
La posibilidad de apertura a las preguntas finales dio relevancia a dos temas fundamentales: el primero, la problemática estudiantil frente a la corrupción y persecución por parte de las instancias de poder, cuya respuesta propuso al estudiante como actor del cambio, creando un ambiente paradójico al tener a lado a las personas que apertura procesos legales a estudiantes que participaron en las luchas exigiendo reivindicaciones de este tipo. El segundo, enmarcado en referencia a la problemática del T.I.P.N.I.S, trajo respuestas vacías y poco trabajadas cayendo en el chauvinismo nacionalista y saliendo por la tangente de manera poco inteligente al dar a entender que solo aquellos que conocían el T.I.P.N.I.S podían discutir con él sobre el tema. ¿Entonces, el gobierno tendría que desarrollar programas turísticos para todos los bolivianos para conocer el T.I.P.N.I.S, y así hablar de la problemática bajo las mismas condiciones? ¿O es que solamente él y los "gringos" a los que hizo referencia como conocedores del T.I.P.N.I.S tienen autoridad hablar de este tema? Lo cierto es que las respuestas a este tema dejaron mucho que desear. Por último, denunciamos la actitud paranoica, inquisidora y abusiva con que actuaron funcionarios de la universidad con algunos de nuestros compañeros estudiantes.
