La primera ministra británica busca acordar con los líderes de la oposición una salida a la crisis por el rechazo del Parlamento a sus propuestas.
Miércoles 3 de abril de 2019 16:50
La primera ministra británica, Theresa May, se reunió este miércoles con el líder laborista, Jeremy Corbyn, y con la primera ministra de Escocia Nicola Sturgeon para romper el bloqueo del Brexit ante la falta de consenso parlamentario y los tres rechazos al acuerdo de retirada logrado entre la mandataria y la Unión Europea.
Corbyn, afirmó que la reunión que mantuvo con la primera ministra, la conservadora Theresa May, para abordar un plan del "brexit" conjunto fue "útil", pero "no concluyente". El Reino Unido tiene fijada ahora la fecha de salida del bloque europeo para el próximo 12 de abril.
¿Qué ha ofrecido la primera ministra?
La primera ministra conservadora ha ofrecido mantener conversaciones con el líder de la oposición para acordar un plan que tenga el consenso necesario a fin de que sea aprobado por la Cámara de los Comunes.
Si May y Corbyn se muestran a favor de un compromiso, todo indica que optarían por una desconexión de Bruselas "suave". Uno de los puntos en debate es la posibilidad de acordar mantener la unión aduanera con el bloque europeo. Hasta ahora May ha rechazado la unión aduanera por la presión de los euroescépticos de su partido, ya que ello le impediría al Reino Unido negociar acuerdos comerciales con países fuera de la UE.
¿Un Brexit sin acuerdo está aún sobre la mesa?
Sí. El Reino Unido puede salir sin un pacto si no presenta antes de la cumbre europea del próximo día 10 un plan alternativo del Brexit. En caso de que dé a conocer un "plan B", entonces May deberá solicitar una prórroga, que deberá ser aprobada por los 27 países que componen la UE.
El parlamento británico aprobó este miércoles que el gobierno está obligado a lograr un Brexit acordado, buscando limitar la posibilidad de una salida no pactada. Sin embargo la mandataria intentó sin éxito en tres ocasiones aprobar el acuerdo de retirada que negoció con la UE durante casi dos años.
El tratado de salida, que es vinculante, hace referencia a la factura que debe pagar el Reino Unido por su "divorcio", la situación de los ciudadanos comunitarios y la salvaguarda irlandesa, pensada para evitar una frontera dura entre las dos Irlandas.
La declaración política que acompaña ese acuerdo, que no es vinculante, se refiere a las ambiciones sobre la futura relación comercial entre Londres y Bruselas y que excluye la unión aduanera.
¿Habrá más votos indicativos?
Este esfuerzo multipartidario está presidido por el conservador Oliver Letwin y la laborista Yvette Cooper. Cooper presentó en la moción de este miércoles una enmienda que propone que se debata una ley que evite un Brexit sin acuerdo, y ganó por un voto: 312 a favor y 311 en contra. Los diputados habían votado en contra de un Brexit sin salida pero no era vinculante, con la moción de hoy, se puede convertir en ley por lo que es vinculante.
¿Está muerto el acuerdo del Brexit de la primera ministra?
No exactamente. May ha indicado que una nueva propuesta para romper el bloqueo tiene que incluir la aceptación parlamentaria del tratado de salida, pero la declaración política puede ser modificada. Si prosperan las conversaciones entre May y Corbyn, entonces será más probable que el laborismo apoye el tratado.
¿Puede convocarse un nuevo referéndum?
La petición de un nuevo plebiscito tras el celebrado en junio de 2016- fue rechazada por los Cámara de los Comunes el lunes pero por tan solo 12 votos, de modo que se espera que continúe esta petición por parte de los diputados proeuropeos de distintos partidos. Lo que no está claro es si se trataría de un nuevo plebiscito (a favor o en contra de seguir en la Unión Europea), o de someter al voto público el acuerdo que se logre en el parlamento.
Es muy difícil hacer predicciones. El giro político de May es una muestra de debilidad, ya que no le dan las aritméticas, pero un acuerdo con el laborismo puede terminar por fraccionar a la formación de la primera ministra. Por otra parte, la de Corbyn es también una jugada riesgosa, ya que puede aparecer como el facilitador del Brexit que puede salvarle la vida a May.
Por otra parte si el laborista permite que el Brexit pase va a enfrentar a la base de su partido que mayoritariamente se oponen al Brexit. Hasta ahora Corbyn logró mantener al partido unido porque su postura fue la de criticar las propuestas de May, pero si es el “partero” de la salida del Reino Unido de la Unión Europea se arriesga a una desafiliación en masa en su formación.