El financiamiento empresarial sobre la política no es nada nuevo ni algo que que sorprenda, pero que las cuantiosas cifras que se revelan tras cada campaña electoral exponen el control de los grandes empresarios sobre los partidos y bloques políticos que han proliferado este Chile de los 30 años, que ha engrosado las ganancias de unos pocos a costa de la precarización de la vida de las familias trabajadoras. Las elecciones primarias de este 18 de julio no son la excepción, en esta nota retratamos a los grandes financistas de los postulantes a la presidencia de este Chile que despertó.
Miércoles 14 de julio de 2021
El Servicio Electoral reveló los aportes públicos y reservados que los candidatos de estas primarias han recibido para los comicios de este 18 de julio donde los bloques políticos de derecha y de izquierda moderada definirán a sus abanderados para las elecciones de noviembre. Por su parte Chile Vamos lleva a concurso al pinochetista y “socialdemócrata” Joaquin Lavín, al ciudadano y ex paco Mario Desbordes, también al ex ministro de hacienda Ignacio Briones y al independiente pero “regalón” de los empresarios Sebastián Sichel.
Por su parte Apruebo Dignidad, el rejunte del Partido Comunista, los partidos del Frente Amplio, Partido Igualdad, Partido Humanista y La Federación Regionalista Verde Social, entre otros presentan al actual alcalde de Recoleta Daniel Jaudue y al diputado por Magallanes y firmante de leyes represivas Gabriel Boric.
Los datos entregados por la entidad estatal, si bien no son razón de sorpresa, dejan en exposición el lazo y los intereses que los grupos económicos tienen sobre los espacios de administración del Estado. En esta nota nos centramos en el financiamiento del bloque oficialista, pero los aportes millonarios no solo son terreno de este bloque, sino del conjunto de los postulantes.
En el global, el ex presidente de Banco Estado y ministro de Desarrollo Social, Se encuentra en el podio de los candidatos que más aportes reunió, se adjudica este puesto con $68.617.649, seguido por Ignacio Briones con $56.575.420, Joaquín Lavín con $40.275.000, Mario Desbordes sumando $23.800.001, Gabriel Boric con un total de $56.715.680 y Daniel Jadue con $29.263.804 recibidos en aportes.
En cuanto al desglose por candidato de Chile Vamos, revisaremos a continuación los datos entregados por Fundación SOL, donde se esclarecen los nombres y grupos económicos de donde cada candidato recibe apoyo y claramente espera respuestas sobre su posible nueva administración.
Sebastián Sichel:
El conglomerado Primus Capital a través de su presidente Raimuno Valenzuela y su cónyuge María Reymond aportaron aproximadamente $29 millones de pesos, seguidos por Jorge Claro ex presidente del club deportivo UC con 14 millones de pesos. Donde se completa la lista por 4 hijos Jorge Claro del grupo PRISMA y diversos exponentes del mundo académico, fundaciones y empresas inmobiliarias.
Ignacio Briones:
Por su parte el ex ministro recibió las mayores sumas las recibió Cristián Meniche y Jorge Larraín Matte director de Clbún y de la MPC. Dónde la lista la completan miembros y altos ejecutivos de la Falabella, Codelco, BCI y administradores públicos como Daniel Cavada de Codelco.
Joaquín Laavín:
El Opus Dei y Alcalde de Las Condes concentra en sus primeros lugares al abogado Lobysta Adrian Rodriguez, a Domingo Cruzat director de Enel y a los controladores del Grupo Falabella Piero y Sandro Solari.
Mario Desbordes:
Por su parte el ex ministro de defensa y colaborador pasivo Mario Desbordes centra sus apoyos en las arcas de su partido, Renovación Nacional, donde se concentra el 80% de los aportes, el resto se divide entre ex funcionarios públicos y directores de grupos económicos.
Ante este escenario, donde los partidos demuestran su dependencia y con esto su subordinación a mantener este régimen que ha hecho más ricos a unos pocos hasta en plena pandemia a costa del sudor y sangre de la clase que produce y sustenta al país, se hace más necesaria que nunca una alternativa política en independencia de los empresarios y sus partidos, donde la clase trabajadora, los sectores populares y su juventud a través de un programa en común den vuelta todo para acabar con toda herencia de la dictadura.