ENAH. Realizan manifestación por derechos laborales y condiciones de estudio dignas

El viernes 01 de marzo de 2024, un grupo significativo de estudiantes pertenecientes a la Escuela Nacional de Antropología e Historia (ENAH) se congregó frente a la Coordinación Nacional de Arqueología, específicamente en las instalaciones donde se encuentra la oficina del director del Instituto Nacional de Antropología e Historia (INAH), Diego Prieto, ubicada en la calle Córdoba número 45, en la conocida colonia Roma de la Ciudad de México.

Esta manifestación,fue un acuerdo tomado en la Asamblea General de la ENAH, la cual, se llevo a cabo días antes con el objetivo de exigir mejoras en las condiciones laborales para los trabajadores y el personal académico, así como condiciones dignas para los estudiantes.

La concentración no estuvo limitada únicamente a miembros de la ENAH, también contó con la presencia solidaria de estudiantes, profesores y trabajadores de otras instituciones educativas y sindicatos, tales como la Universidad Autónoma Metropolitana (UAM), el Sindicato Independiente de Trabajadores de la Universidad Autónoma Metropolitana (SITUAM) y la Escuela Nacional de Conservación, Restauración y Museografía (ENCRyM).

Después de la protesta inicial, los manifestantes procedieron a cerrar la vialidad en Avenida Insurgentes, como había sido previamente acordado. Sin embargo, la respuesta de las autoridades gubernamentales fue desproporcionada: el Gobierno de la Ciudad de México desplegó fuerzas de granaderos para dispersar y encapsular la manifestación, ignorando completamente el acuerdo establecido sobre la duración y naturaleza pacífica de la protesta.

Este incidente pone de relieve las tensiones existentes entre los derechos de los manifestantes a expresar sus demandas legítimas y el uso excesivo de la fuerza por parte de las autoridades gubernamentales.

Además, evidencia la importancia de mantener la organización para construir un diálogo abierto y constructivo entre la comunidad estudiantil, académica y laboral, para encontrar soluciones justas y equitativas a los problemas que afectan a la comunidad educativa y laboral en México.

Esta movilización, se suma a una larga lista de acciones tomadas por la comunidad universitaria, que desde hace años viene exigiendo mayor presupuesto para su institución, condiciones dignas de trabajo para sus docentes y administratixs, así como mejoras en la infraestructura. Los recortes a una de la universidad más importante del país en estudio y conservación del patrimonio nacional, se enmarcan en una serie de ataques a la educación pública y gratuita a nivel nacional.

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