El Gobierno británico comunicó este jueves la detección de 33.470 nuevos casos de covid-19 en veinticuatro horas, por encima de los 22.950 de ayer y la mayor cifra diaria registrada hasta ahora durante la pandemia.
Jueves 12 de noviembre de 2020 15:41
Nápoles
Con 33.470 nuevos casos de covid-19 detectados en las últimas veinticuatro horas, el Reino Unido registra un récord de contagios desde que comenzó la pandemia.
El Gobierno anunció un plan de vacunar a un millón de personas por semana en los principales estadios de futbol. Según el diario The Guardian la campaña buscará inmunizar a todos los adultos de Inglaterra suministran dos dosis de la vacuna para 22 millones de los 56 millones de habitantes del país en una primera etapa. Entre las categorías consideradas prioritarias se encuentran el personal médico, los residentes en hogares para mayores y las personas mayores de 50 años.
Sin embargo, con el récord de contagios el Reino Unido se convirtió en el más castigado por la segunda ola de coronavirus de toda Europa, y la vacuna, aunque algunas de ella en tercera fase y con más de 90% de efectividad, es aún algo lejano para el nivel de desborde que registra el reino.
En total, desde que comenzó a extenderse el coronavirus se han registrado 1.290.000 de infecciones en el país, que esta semana ha procesado más de 377.000 test al día.
El avance de las infecciones se produce una jornada después de que se anunciaran 595 muertes en un solo día, el máximo número desde el pasado 12 de mayo, y se superara la barrera de 50.000 decesos en el recuento oficial del Reino Unido.
En todo el reino permanecen ingresadas 14.196 personas con covid-19, según informó el ministro británico de Empresas, Energía y Estrategia Industrial, Alok Sharma, en una rueda de prensa en Downing Street, despacho oficial del primer ministro, Boris Johnson.
Se trata de una cantidad de hospitalizados similar a la que se registraba el pasado 3 de abril, durante la primera hora de la pandemia.
Sharma no actualizó la cifra de fallecidos registrados en las últimas 24 horas, si bien apuntó que la media de decesos diaria en siete días ha aumentado a 378, comparado con 295 hace una semana.
El ministro sostuvo que los resultados preliminares que apuntan a que la vacuna desarrollada por la firma estadounidense Pfizer es efectiva en un 90 % contra el coronavirus son una "muy buena noticia", si bien "todavía quedan muchos obstáculos por superar antes de que podamos estar seguros de que es segura y eficaz".
"Debemos asegurarnos de que continuamos siguiendo las normas, porque el virus sigue ahí y todavía supone un peligro", recalcó Sharma.
El director médico del sistema sanitario público de Inglaterra (NHS England), Stephen Powis, advirtió de que el número de hospitalizados "desafortunadamente va a continuar aumentando si se siguen incrementando las tasas de infección".
"Tristemente, a pesar de que los tratamientos y las terapias han mejorado, más infecciones significarán también más muertes y más personas que sufrirán los efectos debilitantes de la covid a largo plazo", agregó.
Al igual que Boris Johnson, que superó su primer momento de negacionismo cuando él mismo se contagió de covid-19, ninguno de los gobiernos europeos utilizó estos meses para fortalecer el sistema de salud, garantizar elementos de protección personal para todos los esenciales o garantizar un sistema de testeo masivo que permita reducir al mínimo los confinamientos, pudiendo hacer un seguimiento científico de los casos. Es por este motivo que, aunque el Reino Unido se encuentra en la peor situación, toda Europa vive un rebrote que tiene a los principales países en situación crítica.
En toda Europa
Los contagios de coronavirus y el número de fallecidos siguen aumentando en la mayoría de países europeos, especialmente en Italia, donde la situación es cada vez más preocupante, al registrar más de 600 muertos en un día y superar el millón de casos.
En una Europa que suma 13,5 millones de positivos de los 50,8 millones contabilizados a nivel global (con 1,26 millones de fallecidos), la Organización Mundial de la Salud (OMS) considera que parece estar frenándose el ascenso en la curva de contagios en el continente, frente al ascenso en América (21,8 millones de infecciones).
Hay que retrotraerse a principios de abril, en los momentos más álgidos de la pandemia, para encontrar un peor dato en Italia en cuanto a número de defunciones en un día que el comunicado hoy, 623.
Italia, que registra casi 33.000 positivos en una jornada hasta superar el millón, rebasa ampliamente el umbral "crítico" de pacientes hospitalizados con coronavirus (52 % frente al 40 % de límite), así como el de ocupación de unidades de cuidados intensivos con estos enfermos.
Por su parte, el Estado español alcanza los 40.105 muertos (349 en la última jornada) y los 1.417.709 casos (19.096 nuevos con Madrid a la cabeza).
La presión hospitalaria se sitúa en el 16,79 %, mientras un 31,78 % de las camas UCI está ocupada por enfermos de coronavirus, el mismo porcentaje de los dos últimos días.
También Rusia vive una jornada difícil al registrar 432 fallecimientos, nuevo máximo diario desde el comienzo de la pandemia, hasta cerca de 31.600 muertes y 1,8 millones de casos.
Rumanía supera por primera vez los 200 decesos con covid en un día y, con cifras muy alejadas, también Portugal bate hoy el récord de defunciones en un día (83), al igual que Bosnia (69), Grecia (43) y Serbia (21).
Confinamientos forzados y una política represiva
Ante esta situación los países europeos endurecen las medidas frente a la covid-19. El hecho de que los gobiernos no hayan tomado medidas radicales en estos meses especulando con la aparición de una vacuna y destinando miles de millones de euros para salvar a las principales empresas y los mercados financieros, hace que las medidas radicales hoy sean en contra de la población. En algunos casos se llegaron a tomar medidas de confinamiento selectivo sobre las poblaciones más pobres, como en Madrid (aunque durante el día eran obligados a ir a trabajar) y en otros como Francia se aplicaron fuertes restricciones, incluido un toque de queda que también recae sobre los trabajadores.
Grecia aumenta la restricción de movimientos e implanta desde el viernes el toque de queda nocturno a nivel nacional y Ucrania, que bate las cifras de contagios, decreta cuarentenas los fines de semana.
En Francia, aumentarán los controles al confinamiento en vigor desde el 30 de octubre y no se prevé una relajación de las restricciones, mientras en Suecia se prohibirá la venta de alcohol a partir de las 22.00 horas y Eslovaquia prolonga el estado de emergencia hasta después de Navidad.
La falta de políticas sanitarias hace que hoy se tomen estas medidas punitivas, que no apuntan a proteger la salud de la población sino a garantizar a la fuerza que la economía siga abierta en las ramas clave, haciendo que millones de personas arriesguen su vida en transporte abarrotado o sin protocolo o elementos suficientes de protección. La único plan de los gobiernos es mantener estas medidas represivas hasta que finalmente se anuncie una vacuna efectiva. No obstante, la propia OMS calcula que para garantizar el fin de la pandemia debería inmunizarse un 70 % de la población mundial.