El remero argentino Brian Rosso pone mucho en juego en estos cuartos de final ante los oponentes más difíciles.
Martes 9 de agosto de 2016
Si alguna vez a algún remero le preguntaras con qué contrincantes jamás quisiera cruzarse en una regata, es muy probable que te dijeran los nombres de Ondrej Synek y Mahe Drysdale; el primero, último campeón mundial del single masculino libre y el segundo, último campeón olímpico y récord mundial en la misma categoría.
Brian -quien al momento de escribirse esta nota debe estar empezando a tener sus primeras pesadillas ante los contendientes con los que se enfrentará al otro día-, viene hasta el momento realizando una dignísima presentación. Brian, sabe por su hermano Cristian (4 puesto en el doble par de remos cortos de los Juegos Olímpicos de Londres) que se puede estar muy cerca de esa medalla que él como tantos otros deportistas anhelan y por la cual tan duramente han trabajado y es por esta razón que en el día de hoy el remero marplatense saldrá en búsqueda de ese tercer puesto que le posibilite el paso a la semifinal.