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Red Internacional
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NOCHIXTLÁN. Repudio a las agresiones y tortura contra presidente del Comité de Víctimas de Nochixtlán

El pasado 26 de marzo el presidente municipal, Rubén Alcides Miguel Miguel, ordenó retirar la evidencia del fallido desalojo del 19 de junio de 2016 y pretende golpear con castigos ejemplares como la tortura a los integrantes del Comité de Víctimas por Justicia y Verdad 19 de Junio (COVIC).

Lunes 2 de abril de 2018

Este domingo por la madrugada se encontró en su habitación con signos de tortura, severos golpes y cortadas con arma blanca a Santiago Ambrosio Hernández, presidente del Comité de Victimas por Justicia y verdad 19 de Junio (Covic) de Nochixtlán.

La exigencia de la sección 22 del magisterio y del Comité es el castigo a los responsables de esta agresión y tortura, además de una investigación clara de lo que están viviendo los integrantes del Covic.

Una vez que llegó la maquinaria para retirar los vehículos calcinados (que forman parte de la evidencia de la brutal represión orquestada por el gobierno federal y local el 19 de junio del 2016), la inmediata respuesta del Comité de Víctimas había sido convocar, ante tal amenaza, para no permitir que avanzaran las fuerzas represivas en remover lo que representa la dura resistencia que dio el pueblo de Nochixtlán contra la masacre orquestada por el gobierno estatal y federal.

Nuevamente el actuar de la policía municipal fue disparar contra todos aquellos que se oponían. Resultando lesionados con arma de fuego los integrantes de la COVIC, Juan Acevedo Martínez, de 24 años de edad; y Martín Silva de 37 años. La dirección de la sección 22 del SNTE perteneciente a la Coordinadora Nacional de Trabajadores de la Educación (CNTE) repudió lo sucedido, llamando al día siguiente a iniciar una caravana magisterial para realizar bloqueos carreteros y tomas de casetas como medidas de repudio ante esta nueva agresión.

Recordemos que el comité surgió a raíz de lo sucedido el 19 de junio, en el que el fallido desalojo producto de la resistencia contra la represión y uso de armas de fuego contra maestros, pobladores y jóvenes dejo un saldo de más de 11 muertos, decenas de heridos y presos. Estos actos, hasta la fecha, permanecen en total impunidad.

El crimen de Estado continúa impune en Nochixtlán y ahora buscan borrar la masacre

A casi dos años la impunidad prevalece y el Estado Mexicano busca dar carpetazo sin responsabilizarse de los asesinatos, lesiones y violaciones de los derechos humanos de los que alzan la voz cuestionando sus planes, mismos que sólo pretenden cercenar aún más nuestras condiciones de vida, como lo es la Reforma Educativa y el resto de las estructurales.

Los recientes hechos en Nochixtlán pretenden aniquilar lo que representa un símbolo de la resistencia contra el Estado.

Y es que Nochixtlán fue el motor de la enorme lucha magisterial del 2016 junto a pobladores, padres y madres de familia, que el régimen pretende borrar de la memoria histórica, cuestión que no podrá hacer sino silencia la voz de los integrantes del COVIC que se mantienen de pie contra el olvido y la impunidad. El objetivo del gobierno es continuar con sus planes a sangre y fuego al amparo de la reciente aprobación de la Ley de Seguridad Interior.

Los maestros que conformamos la Agrupación Nuestra Clase repudiamos este nuevo ataque a la comunidad de Nochixtlán y repudiamos los métodos de tortura contra Santiago Ambrosio Hernández.

Exigimos juicio y castigo a los responsables y llamamos a la más amplia solidaridad en las calles y a articular la lucha contra la impunidad con la pelea que hoy se abre contra el avance de la represión, militarización y desapariciones forzadas. A la par de sumarse a las acciones unitarias a las que convoque la CNTE para enfrentar juntos esta escalada represiva.

Consideramos que ante el avance del régimen debemos prepararnos forjando una unidad sólida de los trabajadores y la juventud que luche en las calles con independencia política. Ya no podemos confiar en que nuestras demandas se resolverán por la vía institucional, ni por medio de las elecciones, es necesario confiar en nuestras propias fuerzas y en la organización de maestros, trabajadores, mujeres y jóvenes.