El estrecho vínculo que mantienen la firma INCISA y el municipio bajo la gestión del intendente Jure nuevamente despierta dudas.
Viernes 17 de octubre de 2014
El conflicto desatado hace semanas por las irregularidades en las empresas y en la construcción de las obras, lejos de solucionarse, se profundiza a medida que se van conociendo los detalles de la adjudicación a INCISA -la nueva empresa responsable, originaria de Río Cuarto- y su relación con el gobierno Municipal.
Otro adelanto y sin avances
Como informamos en este diario, Ivecor, la adjudicataria del famoso plan de “mil viviendas de clase media” -que recibió adelantos de dinero para 180 casas y solo entregó 63- subcontrató a INCISA para la segunda etapa del proyecto y las obras de mejora de las unidades habitacionales de los barrios Cispren y Guarnición Aérea. La empresa riocuartense se quedó así, en forma directa, con esta propuesta millonaria, a pesar de no tener ningún antecedente en construcción de casa.
Desde mayo de este año INCISA también trabaja en la obra de infraestructura de los loteos habitacionales "Castelli 2" y "Alberdi", en el marco del plan “Mi Hogar, Mi Sueño”, que consta de un presupuesto de $57.8 millones para trabajos viales, eléctricos y de agua potable en 1.800 lotes. Para esta obra, el Municipio le adelantó más de $13,8 millones a la empresa INCISA, pese a que el pliego de licitación está estrictamente estipulado de otro modo. El Ejecutivo depositó ese monto sobre finales del mes de junio, con el argumento de acopiar materiales para esquivar el constante aumento de precios derivado de la inflación.
El plazo de Ejecución era de 12 meses a partir de febrero y el municipio debía pagar los trabajos en 24 cuotas. Este jueves el municipio, a través de un medio local, en un intento de aclarar la situación, insistió en que el dinero está destinado al acopio de materiales para evitar mayores precios pero que no se trata de ningún adelanto no estipulado.
INCISA SA “la salvadora”
INCISA fue creada en 2008, a solo dos meses de que el intendente Juan Jure asumiera en su primer mandato. Creada con un reducido capital de 50 mil pesos, en solo 6 años la empresa multiplicó sustancialmente sus recursos y se posiciona como una referencia de la obra pública de la ciudad, hasta convertirse en “la salvadora” del plan de viviendas municipal, principal promesa de campaña electoral del radicalismo.
En el 2011, INCISA también había ganado una licitación para llevar el suministro eléctrico, de media y baja tensión, y el alumbrado público al barrio Residencial Castelli. El pasado jueves el oficialismo aprobó en el Concejo Deliberante una redeterminación de precios a la empresa por una obra que ya debería haber concluido. La obra se había cotizado inicialmente en $8 millones y ahora, después de las “redeterminaciones”, el costo total ascenderá a más de $12,5 millones, a pesar de que debía estar terminada para el 2013. El proyecto de la obra había sido firmado en el 2011 por el ingeniero Mario Leonardini, quien se desempeñaba como Sub Secretario de Obra Públicas y que actualmente trabaja para la “salvadora” INCISA.
A medida que crecen las sospechas e irregularidades, desde la oposición lejos de dar o proponer soluciones al déficit de vivienda, se limitan a hacer leña del árbol caído, mientras miles de familias trabajadoras de Río Cuarto continúan sin acceso a la vivienda digna. En una provincia, que al igual que el resto del país, las tomas de tierras suelen ser el único recurso posible de alcanzar la vivienda propia para los sectores populares.