Germán Ulises Arribas es el nuevo interventor de Yacimientos Carboníferos Río Turbio. Durante la intervención de Aníbal Fernández, tenía el cargo de gerente general de Administración y Finanzas en dicha empresa. Para las y los trabajadores es otro interventor más y la incertidumbre que genera el futuro incierto de la empresa, es cada vez más preocupante.
Jueves 30 de septiembre de 2021 12:58
Por el decreto 658/21 fue designado, el martes 28 de septiembre pasado y antes, tenía el cargo de gerente general de Administración y Finanzas en YCRT. Llegó a la empresa con la intervención de Aníbal Fernández. Es licenciado en economía, graduado en La Plata. En 1998 comenzó a trabajar en la Jefatura de Gabinete de la Nación, como analista de proyectos financiados por el Banco Interamericano de Desarrollo. Trabajó en ENHOSA (Ente Nacional de Obras Hídricas de Saneamiento). Fue director administrativo en el Ministerio del Interior. También tuvo cargos en el INTI y el CONICET.
Germán Ulises Arribas
Los trabajadores que fueron consultados por La Izquierda Diario, afirmaron que Arribas es el brazo derecho de Aníbal Fernández (quién sólo vino dos veces a la cuenca carbonífera y siempre tuvo actitudes evasivas ante los reclamos laborales). Agregaron que, existe mucha incertidumbre por el futuro de la empresa minera y el destino que correría la cuenca carbonífera. Suponían que todo cambiaría con Aníbal Fernández, luego de atravesar cuatro duros años de intervención macrista, con Omar Zeidán y los más de mil despidos y retiros voluntarios que hubo durante el 2018. Pero hubo 417 despidos más a fines de febrero del 2020. Luego surgieron más reclamos y promesas incumplidas por la enorme desocupación que padecen en Río Turbio. Varios delegados sumaron otros reclamos por falta del incumplimiento de los protocolos de seguridad durante la pandemia a mediados del año pasado. Durante el 2021, hubo cortes de ruta por pedidos de reincorporación de las y los despedidos, y que se tenga en cuenta para los nuevos puestos laborales a la juventud nacida y criada en la localidad.
Aníbal Fernández
Arribas deberá asumir el desafió de concretar las promesas incumplidas por Aníbal Fernández y todos los cuestionamientos que llevaron a un conflicto de más de dos meses que, derivó en una conciliación obligatoria. Gran parte de los motivos que generaron el descontento de las y los trabajadores, se debieron al devaluado poder adquisitivo que perciben (desde hace cinco años, no tienen paritarias), la falta de inversión en sectores como, Interior de Mina, Talleres centrales, Planta Depuradora, la violación del convenio colectivo de trabajo, la persecución a trabajadores que se sumaron a las medidas de fuerza y la figura jurídica de la empresa.
El conflicto más importante comenzó el 23 de julio pasado, con una medida de fuerza que paralizó a gran parte de YCRT, durante dos meses. Hubo una conciliación obligatoria por dos semanas, para destrabar el conflicto. Un sector de los delegados del interior de mina, publicaron un documento exigiendo la renuncia de Aníbal Fernández hace un mes atrás y la conducción de ATE Río Turbio planteó al nuevo interventor, que ningún trabajador cobre menos de 100 mil pesos.
Muchos trabajadores consideran que, solamente se está invirtiendo en la Mega Usina de 240 MW, pero no de la misma manera en el resto de YCRT. Es una cuestión contradictoria porque la Mega Usina necesitará de la alimentación de carbón mineral, pero no habrá posibilidad de cumplir con la demanda que necesita para generar energía.
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La situación está muy lejos de resolverse en Río Turbio. Los delegados están atentos a las decisiones que tome el nuevo interventor. También a cual será el nuevo presupuesto para YCRT y en qué sectores se concentrará. También exigen una pronta recuperación del poder adquisitivo y el pleno respeto del convenio colectivo de trabajo. Por último, que se solucione la enorme desocupación y que la empresa pueda cumplir la función de generar energía para gran parte de la Patagonia, como las y los trabajadores que están y no están los anhelaron. Su principal consigna es que sea una Carboeléctrica Estatal.
