La noticia no es nueva, ni tan siquiera todo lo que la envuelve; favores, comisiones y tratos comerciales con regímenes que vulneran los derechos humanos y que, en el caso del saudí, cuenta con cientos de miles de muertos yemeníes a sus espaldas.
Ivan Vela @Ivan_Borvba
Miércoles 20 de abril de 2022
LAS ROZAS (C.A. DE MADRID), 20/04/2022.- Luis Rubiales , presidente de la Real Federación Española de Fútbol, comparece ante los medios de comunicación para abordar la polémica generada por los contratos suscritos con Arabia Saudí para la celebración de la Supercopa de España, este miércoles en la Ciudad del Fútbol de Las Rozas. EFE/Rodrigo Jiménez
Esta semana el diario El Confidencial sacó a la luz unos audios entre el presidente de la Real Federación Española de Fútbol (RFEF), Luís Rubiales, y el central del FC Barcelona, Gerard Piqué. En estos audios se escucha, principalmente, los “consejos” que el defensa azulgrana da a Rubiales para la creación de un nuevo formato de la Supercopa de España que sería llevada, desde el 2020, a Arabia Saudí.
Según esta información, Rubiales y la RFEF negociaron con Arabia Saudí para que Kosmos Holding, la empresa de Gerard Piqué, se llevara una comisión de 24 millones de euros; 4 millones a raíz de las seis ediciones pactadas.
De hecho, según dicha información, el propio Rubiales paralizó un acuerdo que tenía con las autoridades de Doha para llevarse la “nueva” Supercopa a Arabia Saudí en lugar de a Qatar y así favorecer el cobro de la comisión para la empresa de Gerard Piqué.
En la noche del domingo, tras la derrota del FC Barcelona contra el Cádiz que disipó cualquier mínima opción de pelearle La Liga al Real Madrid, Piqué (que no disputó el partido por lesión), compareció ante los medios de comunicación en su canal de Twitch. El defensa internacional por España se defendió argumentando que “todo era legal” y que se había dedicado a formar parte como consultor de un negocio comercial entre la RFEF y Arabia Saudí.
Pero lo cierto es que los audios son una muestra más de las entrañas del fútbol moderno. En estos audios Piqué hace cábalas de los beneficios que pueden conseguir, de cómo repartir el “caché” del resto de equipos participantes para conseguir más parte del pastel. Incluso recomienda a Rubiales contactar con “el emérito” para que les facilitara el negocio con los saudíes, conocer de las buenas relaciones de Juan Carlos con el Régimen suní.
"A ver, Rubi, si es un tema de dinero, si ellos (el Real Madrid) por 8 irían, hostia tío, se paga ocho al Madrid y ocho al Barça... a los otros se les paga 2 y 1... son 19, y os quedáis la Federación seis kilos, tío. Antes de no quedaros nada, os quedáis seis kilos. Y apretamos a Arabia Saudí y a lo mejor le sacamos... le decimos que si no, el Madrid no va... y le sacamos un palo más o dos palos más..."
Todo este negocio, además, reportó a la RFEF unos ingresos de 40 millones de euros por edición. Un negocio redondo que se empezó a gestar en 2018 y que finalmente llevó a Arabia Saudí la Supercopa de España.
“Todo es legal” repiten ambas partes, tanto Piqué en su canal de Twitch como Rubiales en su comparecencia de este miércoles en la sede de la RFEF. Y lo triste para los amantes del fútbol, es que es así, probablemente sea legal, porque la legalidad capitalista permite todo con el único objetivo de enriquecer a aquellos que ostenten lugares de poder en su ámbito, en este caso, el futbolístico.
No importa que se hagan negocios con un régimen que bombardea diariamente población civil y que busca a través del deporte blanquearse hacia la comunidad internacional. Y no importa porque el mismo Gobierno del Estado español hace negocio con el envío de armas a Riad para que estas sean usadas contra civiles. Y no importa porque el rey, “el emérito”, hizo fortuna con el tráfico de armas. Bajo el capitalismo y la mercantilización de todas las facetas de la vida, todo “es legal” para enriquecerse.
A esta historia le quedan muchos capítulos, no olvidemos que Gerard Piqué también es propietario de un equipo, el Andorra FC, actualmente en la Primera RFEF o Primera Federación, es el tercer nivel del sistema de ligas de fútbol de España. “Si podéis evitar ponernos en el grupo con los catalanes mejor. Siempre son los de más nivel los 4 del grupo han llegado a los dos partidos finales” fue la petición del defensa catalán cuando compraron la plaza que dejaba libre en dicha categoría por problemas económicos el Reus.
Cualquier atisbo de valores deportivos queda enterrado cuando interesados con poder y recursos realizan sus negocios.
Los “tejemanejes” entre bambalinas y las adulteraciones de la competición, son todo menos fútbol, son negocios manejados por empresarios que nada tienen que ver con los clubes y sus aficiones. Es la expresión más alejada de aquel deporte popular que dió el salto a convertirse en competición en las calles de Birmingham a finales del siglo XIX.