La explicación es la protección de los "valores tradicionales" del país, atacando directamente los derechos de las personas transgénero, y por ende, derechos humanos mínimos. El gobierno de Putin lleva una década de ofensiva en contra de la diversidad y disidencia, ilegalizando la existencia de las personas LGBTIQ+.
Lunes 24 de julio de 2023
Este fin de semana, la justicia rusa anuló el primer matrimonio de personas del mismo sexo, tras la reciente aprobación de una ley que prohíbe el cambio de sexo tanto en el quirófano, a través de medicamentos, como en los documentos de identidad. El motivo fue que uno de los miembros de dicha pareja había presentado en su momento una solicitud para cambiar su sexo en los documentos personales. Esto en un claro ataque hacia las personas transgénero.
Un tribunal de la ciudad siberiana de Irkutsk tomó esa decisión tras la denuncia presentada por la Fiscalía a petición del registro civil. El Senado o cámara alta del Parlamento ruso dio el vamos a la prohibición, luego de haber sido aprobada por unanimidad la semana anterior por la Duma o cámara de diputados. De esta forma en Rusia queda prohibida cualquier intervención médica, tanto quirúrgica como mediante el uso de medicamentos, para el cambio de sexo. La razón es proteger “los valores tradicionales” del país.
Así, esta ley solo permitirá las intervenciones médicas relacionadas al tratamiento de anomalías congénitas, enfermedades genéticas y endocrinas asociadas con la formación alterada de los órganos genitales en las infancias, luego de la decisión de una comisión médica. Es decir, les niñez que sean intersexuales serán obligades a encajar en uno u otro sexo y, por ende, condicionando su identidad de género, sin poder decidir u opinar al respecto.
Además, la legislación establece la anulación del matrimonio si uno de los cónyuges se somete a una reasignación de sexo, bajo la premisa de que el «Matrimonio es exclusivamente entre un hombre y una mujer». Esto es algo que ha afirmado varias veces el presidente ruso, Vladimir Putin, asegurando que mientras dure su mandato no habrá matrimonio homosexual.
La nueva ley impide también la adopción de niños por parte de personas que ya hayan cambiado de sexo. Tampoco podrán ser sus tutores o fideicomisarios.
Esto refleja un claro retroceso en cuanto a materia de derechos LGBTIQ+, por ende, en derechos humanos básicos. A pesar de que el cambio de sexo en documentos oficiales estaba permitido por ley en este país desde 1997, sin obligación de someterse a cirugías para la modificación de los documentos de identidad, el gobierno de Putin ha impulsado una cruzada en contra de la diversidad y disidencia sexual desde hace una década.
En 2013 se aprobó la primera ley que restringía los derechos de las personas LGBTIQ+, conocida como la ley de "propaganda gay", que prohibía cualquier apoyo público a las "relaciones sexuales no tradicionales" entre menores. Luego el 2020 Putin impulsó una reforma constitucional que ilegalizaba el matrimonio entre personas del mismo sexo.
Aukan Galdames
Docente Transactivista - Militante de Pan y Rosas Chile
