La candidata de La Libertad Avanza se ubicó desde el comienzo del debate de candidatos a vicepresidente del lado de la “familia militar”, reivindicando su pertenencia al Celtyv, un organismo claramente negacionista de los crímenes de lesa humanidad de la dictadura, retomando su respaldo a los milicos genocidas. Se escapó a la hora de responder a las preguntas de Nicolás del Caño sobre sus visitas a Rafael Videla en la cárcel y por qué figuraba en la agenda de Etchecolatz al momento de la desaparición de Jorge Julio López.
Diego Iung @IungDiego
Jueves 21 de septiembre de 2023 00:40
La compañera de fórmula de Javier Milei no dudó desde el comienzo del debate en dejar en claro su perfil derechista y vinculado a los milicos genocidas, festejando incluso a su padre como “héroe de Malvinas”, cuando fue el segundo del carapintada Aldo Rico. En esa senda negacionista dedicó buena parte de su tiempo a plantear que un eventual gobierno de su fuerza tendría como pilares la “seguridad” y el “orden” (afirmó tener 37 propuestas de seguridad) y buscar una base de apoyo en el conjunto de las fuerzas represivas, a quienes ubica como “víctimas”.
En ese camino se negó a responderle a Nicolás del Caño sobre sus visitas a Videla en la cárcel, así como por qué figuraba en la agenda del genocida Etchecolatz, al momento de la segunda desaparición de Jorge Julio López. Finalmente tuvo que reconocer las visitas a Videla: “me reuní con Videla y terroristas también”, dijo sin ponerse colorada, en un discurso que busca reconciliar a esa fuerza responsable de un genocidio con la sociedad que la repudia en las calles desde hace décadas. Planteó en ese camino que con Videla se juntó “para investigar para un libro” y no respondió a ninguna de las interpelaciones de Del Caño, sobre el paradero de los cientos de hijos apropiados, sobre la verdad de los crímenes de la dictadura, alrededor del contenido de sus conversaciones con este jerarca del genocidio. Sin condenar jamás la dictadura insistió con la provocación de la "memoria completa", al igual que en el acto de hace pocas semanas en la legislatura porteña.
En otra parte del debate, ante las preguntas del candidato a vicepresidente del Frente de Izquierda - Unidad, Villarruel evitó responder sobre si reprimiría a los jóvenes que se manifiesten por su derecho a una educación sexual integral, ya que ella se opone y plantea mano dura para cualquiera que se manfieste. Terminó planteando que ella está por una educación sexual biologicista, como parte de su enfoque contrario al derecho al aborto y los derechos de la comunidad LGTBI.
Ante las preguntas y los comentarios de varios de los participantes, nunca pudo aclarar de que trabajó todos estos años pero despotricó contra “la casta” y justificó sumar al “diálogo” (a su propia fuerza) al burócrata Luis Barrionuevo, que pasó por todos los gobiernos y siempre colaboró con el ajuste a los trabajadores. En ese sentido tampoco pudo responder porque la listas de La Libertad Avanza fueron en gran parte compuestas con ayuda de los partidos que denominan de “la casta”.
El paso de una negacionista que busca profundizar la impunidad de los mismos militares responsables de aniquilar a una generación a sangre y fuego para profundizar el atraso y la dependencia de nuestro país, consecuencias que seguimos pagando al día de hoy.