A pesar de la campaña intimidatoria y represiva del gobernador, nuevas escuelas se suman a la ola de ocupaciones enfrentando los ataques a la educación. El movimiento estudiantil sale a escena.
Jueves 5 de mayo de 2016
Enfrentando el intento de intimidación y represivo del gobernador del estado, Geraldo Alckmin (PSDB), este martes (3) nuevas escuelas fueron ocupadas por los estudiantes secundarios en lucha contra el robo de las meriendas escolares y los ataques a la educación. El número de escuelas ocupadas va en aumento.
Luego de que la tropa de choque de la policía estuviera todo el día en las escuelas ocupadas, como la del Centro Paula Souza, en una clara medida intimidatoria y represiva, el gobernador se encontró con la resistencia de los estudiantes que mantuvieron la ocupación a pesar de la amenaza de represión policial. Los estudiantes secundarios una vez más demostraron que están dispuestos a continuar con su lucha: el lunes (2) ocupando nuevas escuelas, como la técnica ETEC Paulistana y la ETESP (Escuela Técnica Estadual de San Pablo); el martes (3) con una ola de ocupaciones de las escuelas técnicas, como las del ETEC de Santa Ifigênia y Jaraguá que fueron totalmente ocupadas y las ETEC de Pirituba y Basilides de Godoy ocupadas parcialmente, además de la ocupación de la escuela E.E. Emygdio de Barros.
Desde que los estudiantes se rebelaron contra la reorganización escolar en 2015 y le impusieron la primera derrota al gobernador Geraldo Alckmin en años de gobierno del PSDB, los estudiantes secundarios de San Pablo vienen dando muestras de que esta nueva generación de jóvenes no tiene miedo a la lucha. Y durante este año no solo los estudiantes de las escuelas sino también de las universidades del Estado, que se encuentran movilizados deliberando la posibilidad de salir a la huelga y cuyas demandas centrales enfrentan los recortes educativos y el golpe. Estas luchas se suman a las ocupaciones de escuelas que se desarrollan en el Estado de Rio de Janeiro, que vienen resistiendo los intentos de aislamiento y enfrentan las amenazas de vacaciones adelantadas hechas por el gobernador del Estado, del PMDB.
Durante la noche del pasado martes (3) la Asamblea Legislativa de San Pablo (ALESP) fue ocupada por estudiantes denunciando la corrupción en el sistema de meriendas escolares, estando presentes organizaciones estudiantiles secundarias y la UJS que actualmente es la corriente que dirige la Unión Nacional de Estudiantes (UNE). Estas organizaciones pasaron años manteniendo al movimiento estudiantil en total pasividad y actuando como un obstáculo para la organización de las luchas. Los estudiantes secundarios vencieron el año pasado justamente por haber superado el burocratismo de estas organizaciones como la Unión Brasilera de Estudiantes Secundarios (UBES) y la Unión Paulista de Estudiantes Secundarios (UPES) que deberían estar al servicio de la lucha. Hoy se ven presionadas por la base del movimiento estudiantil que quiere luchar contra el golpe y los ajustes. Es necesario exigir desde las ocupaciones y la huelga que la UNE y las organizaciones de los estudiantes rompan su subordinación al PT y pongan todas sus fuerzas en las luchas, convocando a actos y asambleas, en el camino de organizar una fuerte paralización el próximo 10 de mayo, ante el inicio de la votación del impeachment en el Senado.
Esta lucha no es solo por la merienda escolar, sino por el derecho al futuro de toda una generación a la que vienen quitándoles derechos y sueños. Esta lucha, con las mujeres al frente, los negros, el movimiento LGBT muestra cómo la juventud quiere más que el derecho a la educación, esta juventud quiere el derecho a su cuerpo, a su libertad sexual, quiere luchar contra cualquier forma de opresión y todas las cadenas impuestas por esta sociedad capitalista. Y si hoy los gobiernos responden con bombas, balas de goma y la tropas de choque policial en las escuelas ocupadas es porque ya tomaron nota de que estos jóvenes pueden ser la chispa que junto a la clase trabajadora incendie y transforme el país.