Sucedió este miércoles, cuando representantes de la empresa daban una conferencia de prensa junto al intendente Mauricio Gómez, a partir de los reiterados cortes del suministro. Terminaron a oscuras.
Nacho Agustín Estudiante de Ciencias Políticas - UNLa . Juventud del PTS
Jueves 26 de julio de 2018 18:05
Foto: Sintonía Sur
En el distrito de San Vicente son frecuentes los cortes de luz, problema que lleva años y cada vez se agrava más.
Este fin de semana la gota rebalsó el vaso, y vecinos cansados atacaron las oficinas locales de Edesur. La empresa de forma cínica anunció en un comunicado que iba a tomar acciones legales, mientras que no se hace responsable del mal servicio que brinda y de las pérdidas sufridas por los vecinos a raíz de los cortes de energía.
A raíz de esta situación, el intendente Mauricio Gómez de Cambiemos (que opera casi como un vocero de la empresa) junto a representantes de Edesur llamó a una conferencia de prensa este miércoles para justificar la desidia empresarial. Mientras ésta se desarrollaba, se cortó la luz y tuvieron que terminarla en la oscuridad.
Está situación recuerda a la diputada Lilita Carrió, que justo cuando daba una entrevista justificando el robo de Edesur con los tarifazos vivió una situación similar.
El problema de los cortes de luz no es nuevo, hace años que se producen. Los distintos gobiernos pasan, la empresa es la misma y se enriquece igual a costa de perjudicar la vida de millones. Edesur, al igual que el resto de las empresas que operan los servicios públicos privatizados, se enriqueció con altos subsidios durante los gobiernos kirchneristas; éstos no controlaron que ese dinero se invirtiera en infraestructura y mantenimiento para dar un servicio eficiente. Hoy bajo el gobierno de Macri y Cambiemos Edesur recibe millones con los tarifazos y las boletas impagables; en lo que va de su mandato eso no se vio expresado en mejoras del servicio, si no que por el contrario contrario, éste empeoró.
En los 90, con el pretexto de que los servicios públicos no eran eficientes, Menem privatizó las empresas estatales como las de energía y les dio este negocio millonario a especuladores concentrados en sacar la mayor ganancia al menor costo posible, llevando cada vez a tener un peor servici. Cabe preguntarse: si la empresa operadora no cumple con el servicio que tiene que dar a la gente e incumple su contrato ¿la solución más lógica no sería expropiarla, volver a hacerla pública y que la controlen trabajadores y usuarios? Éstos son los únicos interesados en tener un servicio eficiente. En lo inmediato debería exigirse a Edesur que demuestre en qué invirtió el dinero recibido en años de subsidios y ahora con los enormes aumentos de tarifas que obligan a los vecinos a sacar préstamos para poder pagar las boletas o privarse de otras cosas necesarias para seguir contando con el servicio. Servicio que, siendo esencial, no debería significar ganancias para ningún empresario sino garantizarse desde el Estado.