La Cueva de Manos en Santa Cruz está bajo la mira del proyecto minero de uno de los 50 empresarios más ricos del país, amparado por la gobernadora Alicia Kirchner. Este último mes, la Cámara Federal de Comodoro Rivadavia falló a favor del sitio, exigiendo el freno a la actividad minera en el área. ¿Cómo sigue este conflicto? Acá te lo contamos.
Sábado 12 de junio de 2021 12:21
Empecemos por el principio: ¿Qué es la Cueva de Manos?
La Cueva de Manos, se encuentra en la Provincia de Santa Cruz y es el único sitio arqueológico del país que está reconocido a nivel internacional como Patrimonio Cultural de la Humanidad. Tiene dentro de sí registros de arte rupestre de las primeras bandas de cazadores-recolectores que habitaron la Patagonia de aproximadamente 9.300 años de antigüedad.
Estas pinturas son rastros de actividad de los primeros humanos que poblaron la región. Podemos encontrar representaciones de animales, objetos, escenas de la vida cotidiana y también algunas figuras geométricas. Se cree que en la Cueva de Manos la pintura se preparaba con pigmentos de minerales, mezclados con algún material orgánico como podría ser el agua, la grasa, orina y/o sangre.
Estas expresiones son previas al desarrollo de la escritura y nos permiten acercarnos un poco más a gran parte de las vivencias, pensamientos, actividades y creencias de estas sociedades. Muestran la relación que tenían estas bandas con el ambiente, las distintas estrategias de caza que utilizaban y los animales que habitaban la zona como lagartos y choiques.
La arqueóloga Maria Onetto, trabaja en el sitio y contó más de 2.000 huellas de manos de distintos tamaños, por lo que se cree que están presentes en la actividad todos los grupos de edad. Esto es importante, porque podría indicar que el arte rupestre no era restringido sólo a algunos integrantes de la banda.
Por todo esto y al ser de los pocos lugares con pinturas en buen estado de conservación, arqueólogos junto a la comunidad científica de la zona, afirman que la Cueva de Manos es un verdadero vehículo de conocimiento y comunicación entre pasado y presente, que nos permite entender cómo vivían nada más y nada menos, que los primeros pobladores de la región sur de nuestro continente (¡que no llegaron en los barcos europeos!).
Pero donde nosotros vemos cultura, las mineras y el gobierno ven ganancias
La cueva de las manos, se encuentra en el área del Cañadon Rio Pinturas, donde hubo ocupación humana continua durante más de 8.000 años. En ese territorio, existen otras cuevas con representaciones como la Cueva Grande y diversos sitios arqueológicos donde se encontraron residuos vegetales, restos faunísticos, artefactos líticos y restos de cuero. Para los arqueólogos, estas son claras evidencias de que los cazadores-recolectores ocuparon integralmente el área y que aún falta mucho por descubrir.
Fotografía del Cañadón Pinturas, atravesado por el Río Pinturas
Territorios como este necesitan nuevos proyectos de investigación y políticas de preservación llevadas a cabo de manera conjunta por investigadores, pobladores y comunidades originarias, sin embargo, lejos de esto, las mineras ven un negocio.
La región fue considerada de “especial interés minero” por la Legislatura de la Provincia de Santa Cruz en 2009. Este proyecto de ley fue apoyado por el gobernador de aquel momento, Daniel Peralta, integrante del Frente Para la Victoria y alineado con la presidencia de la nación de Cristina Fernandez de Kirchner.
En la zona, ya existen proyectos de exploración minera como Cerro Negro, San Jose y Lomada de Leiva.
Sin embargo, no son los únicos planes para el área. La empresa Patagonia Gold S.A. quiere iniciar un proyecto de exploración de minerales aún más cerca de la Cueva de Manos.
Su dueño es Carlos Miguens Bemberg, uno de los 50 empresarios más ricos del país. Llegó a Santa Cruz en 2007 después de adquirir los derechos exploratorios de la Barrick Gold en varias propiedades patagónicas, como la mencionada anteriormente “Lomada de Leiva”. Además de asistir a actos en la campaña electoral de Mauricio Macri y tener acciones en Central Puerto, la mayor generadora privada de energía eléctrica del país de Nicolas Caputo, Bemberg tiene a Patagonia Gold S.A. asociada en un 10% de sus acciones a Fomicruz, la minera del estado santacruceño.
Una vez más, en cuestiones de extractivismo, no hay grieta entre peronistas y macristas.
La comunidad científica, agrupaciones ambientales, pobladores de la región y pueblos originarios, se niegan a la exploración y explotación minera en la zona reconociendo el impacto que generaría sobre las aguas superficiales como el Río Pinturas y las subterráneas como napas; sobre la flora y la fauna autóctona de la región. Y también sobre el registro arqueológico, tanto el reconocido actualmente, como de los sitios no identificados y descubiertos hasta el presente, pero que no descartan que puedan existir de desarrollarse más investigaciones.
Si estos son los efectos del proyecto minero en la etapa de exploración, de resultar exitosa esta fase y pasar a la explotación, los impactos ambientales, culturales e históricos serían gravísimos.
El mes pasado, La jueza federal de Caleta Olivia dió lugar a una acción de amparo en la que condena a Patagonia Gold S.A. y a la Provincia de Santa Cruz a “abstenerse de autorizar, iniciar o continuar actividades de prospección o explotación minera en las áreas incluidas en el Decreto 817/2019”. Pero siempre hay que leer entre líneas, el fallo es “hasta tanto se obtenga la intervención y aprobación ¨previa y vinculante ̈ de la Comisión Nacional de Monumentos, de Lugares y de Bienes Históricos”. Es decir, la pelea sigue abierta.
Durante toda la causa, es sorprendente la defensa a favor de Patagonia Gold S.A. que hacen los abogados representantes del gobierno de Alicia Kirchner.
Los recursos del subsuelo de la provincia, según la ley, son propiedad legal del Gobierno de Santa Cruz. Es por eso que la Secretaría de Minería autorizó que Patagonia Gold S.A. realice el cateo de perforaciones, aun sabiendo de los efectos negativos que generaría en el ambiente y que se encuentran próximas a sitios arqueológicos. Es sobre esto que se apoyan los abogados representantes del Estado Provincial para exigir que “se declare incompetente al juzgado federal de tratar estos temas” y que “es la autoridad provincial la única autorizada a resolver este asunto”, mostrando nuevamente que el peronismo va a defender los intereses de las mineras por sobre las demandas que levantan las comunidades originarias de la región, los trabajadores y jóvenes santacruceños, los investigadores, arqueólogos y organizaciones ambientales.
Es así que aún con el fallo a favor, nadie descansa tranquilo en la Provincia de Santa Cruz. Se sabe que hay intereses fuertes y enemigos poderosos queriendo avanzar no solo en la Patagonia, sino en el resto del país con la megaminería. Estamos hasta las manos de extractivismo, pero cada vez más organizados.
La zona del Cañadón de Pinturas y la historia de nuestra región está en la mira y hay que defenderla.
