Con la consigna ¡alerta, alerta están matando médicos!, el pasado lunes 25 de junio se movilizó un contingente conformado por médicos, pasantes y estudiantes de medicina de la Universidad Autónoma de Zacatecas UAZ (UAZ), así como de la Universidad Autónoma de Durango (UAD) campus Zacatecas, luego del asesinato en Durante de uno de sus compañeros, Éric David Andrade. Rechazan realizar servicios sociales en las comunidades hasta que las autoridades gubernamentales den certeza de mayores condiciones de seguridad y laborales.
Lunes 1ro de agosto de 2022
No es ya desconocida la situación de inseguridad y violencia que se vive en el estado de Zacatecas. Situación que ha afectado ya diferentes ámbitos y campos de la entidad; tal es el caso de los sistemas de salud y el personal que labora o realiza su servicio social en ellos.
La movilización se desarrolló mediante una marcha pacífica conformada por contingentes de la Universidad Autónoma de Zacatecas UAZ (UAZ), así como de la Universidad Autónoma de Durango (UAD) campus Zacatecas, mismas que ofertan la carrera universitaria de medicina humana. Los manifestantes rechazan alrededor de 200 plazas para realizar servicio social en diferentes comunidades rurales del interior del estado, la razón la inseguridad que se vive en dichos poblados en los que el personal de salud ya ha sido víctima de la violencia de los narcotraficantes.
Cabe destacar que estas movilizaciones se están desarrollando, ya que, en semanas pasadas se sucinto el lamentable asesinato de Erick un pasante de medicina que al ofrecer su servicio social en una comunidad rural del vecino estado de Durango, situación que no es aislada además del clima de violencia e inseguridad que es bien conocido persiste en las comunidades rurales de Zacatecas.
Por estas razones los manifestantes expresaron que las plazas serán aceptadas, hasta que las autoridades gubernamentales den certeza de mayores condiciones de seguridad y laborales. La movilización salió desde el edificio municipal capitalino, ubicado en el bulevar Héroes de Chapultepec, hasta las instalaciones de la Secretaría de Salud de Zacatecas, ubicado en Ciudad Gobierno, para entregar el pliego petitorio a las autoridades de este sector.
En el recorrido de la marcha, emitían diferentes consignas como: “A Erick lo mataron en su centro de salud, acabaron con sus sueños, esperanza y juventud”, “El sistema no nos cuida y tampoco da la cara”, “Sí salvamos vidas, pero quien salva nuestra” y “Que venga el gobernador”. De acuerdo a declaraciones, cerca de 650 pasantes de medicina forman el actual colectivo que se está movilizando para exigir mejores condiciones de seguridad y laborales.
Los inconformes también expresaron que, es lamentable que en medio de esta situación de violencia, la autoridad haya optado por impartir cursos de seguridad, donde les hablan cómo actuar en posibles escenarios de violencia sobre el secuestro, extorsiones y otro tipo de violencias registradas, pero como autoridades no garantizan de cómo brindar protección a todos los pasantes y más en zonas de riesgo.
La peligrosa situación que se vive actualmente en el estado de Zacatecas es producto de los diferentes grupos del crimen organizado que se disputan el estado por su ubicación geográfica. Situación en la que las autoridades parecen rebasadas o en complicidad con los delincuentes pues no se ofrece ninguna solución o respuesta ante el terrible clima de violencia que se vive en el estado.
Hay que decir también que la situación de Zacatecas y la mayor parte del país, es producto de la militarización y de la Guardia Nacional que mantiene el gobierno de López Obrador ya que no sólo no ha ofrecido el derecho a la seguridad que merece la población mexicana, por el contrario parece que la violencia no se ha mitigado y ha crecido aún más, como lo muestra el aumento de pues las cifras de desaparecidos, asesinatos y feminicidios en el país.
Mientras la secretaria de Seguridad federal, Rosa Icela Rodríguez, señala que no se tiene por qué cambiar la estrategia de seguridad, el gobernador David Monreal en Zacatecas, en línea con el AMLO, presenta como logro más elementos en el Ejército y la Guardia Nacional. Asimismo, tampoco dio respuesta a las demandas del personal médico.
Cabe decir que las pésimas condiciones laborales en las que se explota y precariza a la clase trabajadora del país, es otro importante elemento para el desborde de la violencia, pues millones de jóvenes y adultos se ven obligados a sumarse a las filas del crimen organizado ante la nulidad de oportunidades laborales, la explotación y precarización así como los miserables sueldos que se ofrecen en los pocos empleos que hay, pues cabe recalcar también que los índices de desempleo son bastante altos.
Otra cuestión que no ayuda a mitigar la violencia, es la nula voluntad del gobierno mexicano y la clase política en legalizar el consumo responsable de sustancias psicoactivas, pero ante tal negativa solo se exhibe la complicidad del gobierno mexicano y la élite política con los diferentes grupos del crimen organizado y el rol económico que tiene el país.
Ante tal situación, desde el diario la izquierda nos solidarizamos con las movilizaciones de los médicos, estudiantes y pasantes que exigen condiciones de seguridad y laborales y con la población en general en su justa exigencia por el derecho a la seguridad. Así como en exigir derechos laborales que permitan desarrollar a la clase trabajadora mejores condiciones de vida.