El 3 de mayo el Alcalde de Recoleta y militante del Partido Comunista, Daniel Jadue, propuso en una columna de opinión publicada en Cooperativa la eliminación del Senado para la reducción de costos y hacer menos engorroso el “trámite legislativo”. ¿Es una medida necesaria para el momento?
Sábado 5 de mayo de 2018
La propuesta de Jadue
Después de que la derecha ingresara un proyecto para disminuir la cantidad de parlamentarios en ambas cámaras con la excusa de reducir los gastos fiscales y mejorar los trámites legislativos, el Alcalde de Recoleta, Daniel Jadue (PC) respondió a través de una columna de opinión en la que propone la eliminación del Senado.
Afirmando que: “Si se quiere disminuir la inversión en nuestra democracia mejorando su calidad, lo que podríamos probar es eliminar la Segunda Cámara, de tal manera que el proceso legislativo no contemple ni asimetrías tan grandes en la representatividad de los escaños, ni cocinas, ni vueltas innecesarias. Esto le significaría al estado un ahorro de más de 379 millones anuales por cada senador, es decir, $ 18.950.000.000. Los tiempos legislativos se acortarían significativamente y la representatividad del parlamento sería mucho mayor y más pareja.”
Añadiendo que: “Adicionalmente, se podría estudiar una rebaja de la dieta Parlamentaria, como la que han propuesto algunos sectores políticos, de manera tal que no pudiera ser más de 20 veces el salario mínimo, lo que significaría un ahorro también significativo.”
Por un lado la crítica de Jaude es correcta: la eliminación del Senado reduciría enormemente el gasto fiscal (18 mil 950 millones de pesos), dinero que se podría destinar al financiamiento de la educación gratuita, el pago de la deuda histórica de las y los profesores, a un sistema estatal y gratuito de salud a nivel nacional, entre otros tantos derechos imprescindibles que hoy se encuentran mercatilizados.
Sin embargo, Jadue afirma vacilantemente que “se podría estudiar” ajustar la dieta millonaria de los parlamentarios, el cual es de más de 30 veces el sueldo mínimo.
Una propuesta para fortalecer la democracia de las y los trabajadores y el pueblo
Podríamos afirmar que no es casual que Jadue proponga eliminar el Senado y no la cámara de Diputados, en donde justamente el PC concentra sus bancas parlamentarias; sin embargo, debemos ir más allá.
Si lo que queremos es profundizar la democracia debemos transformar todo el sistema “democrático” que se sustenta en la ilegítima Constitución de 1980, que sólo favorece el gobierno de los ricos, con sus leyes y sus parlamentarios, los que también ostentan sueldos estratosféricos frente al sueldo mínimo que recibe la mayoría de la población.
Y esto justamente no pasa sólo por la eliminación del Senado, como propone Jadue, sino que también por eliminar el Tribunal Constitucional, que ha servido históricamente como una tercera cámara a favor de la derecha y el empresariado, como lo ha demostrado el fallo que profundiza el lucro en las universidades o cuando declararon inconstitucional la titularidad sindical de la cuestionada reforma laboral de Bachelet. Además de eliminar la cámara de diputados y la figura del Presidente, el cual tiene la facultad de gobernar mediante decretos que no son votados por nadie y arremete contra el pueblo trabajador mediante éstos, como el caso de la regulación migratoria que no hace más que discriminar a los migrantes.
Debemos sustituir el Poder Ejecutivo y Legislativo por una cámara única, en la cual todo parlamentario reciba el mismo sueldo que el de un trabajador calificado, además de que todos los cargos sean revocables, tal y como se hizo y demostraron que era posible los comuneros parisenses en 1871 y como propusieron las y los candidatos anticapitalistas del Partido de Trabajadores Revolucionarios en las elecciones a Consejeros Regionales y Diputados en el 2017.
Sólo de esta forma podremos fortalecer verdaderamente la democracia de las y los trabajadores y el pueblo, frente a la democracia de los ricos y los empresarios.