Crimen. Segunda jornada del juicio: declararon los amigos de Fernando

Este lunes comenzó el juicio por el crimen de Fernando Báez Sosa. Hace tres años, a la salida de un boliche de Villa Gesell, un grupo de jóvenes -conocidos como los rugbiers- atacó al joven hasta matarlo. Algunos de los amigos de Fernando fueron golpeados por este mismo grupo, con el solo objetivo de que no intercedieran en la golpiza.

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En la segunda jornada del juicio a ocho jóvenes acusados de matar a golpes a Fernando, se escucharon los testimonios de los amigos que estaban junto a él en la noche del crimen.

Uno de los testimonios será el de Tomas D’ Alessandro, quien intentó defender a Fernando cuando lo atacaron a la salida del boliche. “Le pegaron trompadas, lo empujaron y lo tiraron al piso. Traté de defenderlo pegándole a algunos de ellos pero en un momento me empujaron, me tiraron al piso y me pegaban patadas en el cuerpo, sobre todo en la cabeza”, declaró el chico en la etapa de Instrucción. Cuando D’ Alessandro pudo incorporarse, vio a Fernando ensangrentado e inconsciente y llamó al 911.

Los ocho imputados están acusados, también por el delito de “lesiones leves” por la agresiones que sufrieron al menos cinco amigos de Báez Sosa: además de D’Alessandro, Ignacio Vaudagna, Juan Manuel Pereyra Rozas, Juan Bautista Besuzzo y Lucas Begide.

Este martes Lucas Filardi, uno de los amigos que se encontraba con Fernando la madrugada del crimen en Villa Gesell, declaró que los rugbiers acusados de asesinarlo le dieron "primeramente piñas" y luego de que cayó al piso lo siguieron golpeando con "patadas en el pecho y en la cabeza". "Había cuatro o cinco personas pegándole. Fue un instante que vino gente gritando y le pegaron, y se cae el piso. No hubo acto de defensa, fueron piñas. Eran seis, siete. Había tres o cuatro pegándole a Ferni, y un par evitando que nos acerquemos nosotros".

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Entre los testigos prontos a declarar se encontraba Julieta Ross, quien era la pareja de Báez Sosa en el momento del asesinato, pero finalmente no pudo hacerlo. Según informó este lunes el abogado Fernando Burlando, quien encabeza junto a Fabián Améndola la representación de la familia del joven asesinado, la joven por ahora no estaría en condiciones de declarar. Quién si declaró fue el papá de la joven quien aseguró que su hija "no está preparada" para enfrentar el debate. Aseguró este martes que no le desea a ningún padre "ver a Fernando acostado y esperando que lo ingresen a un cajón".

Fuentes cercanas a la defensa señalaron que los ocho imputados -Máximo Thomsen (23), Enzo Comelli (22), Matías Benicelli (23), Blas Cinalli (21), Ayrton Viollaz (23), y Luciano (21), Ciro (22) y Lucas Pertossi (23)- volverán a estar presentes, al igual que en la apertura del debate oral.

Están acusados de “homicidio agravado por alevosía y por el concurso premeditado de dos o más personas”- que prevé condena a prisión perpetua. Los imputados tienen entre 20 y 23 años. Cuando cometieron el delito eran apenas mayores que Fernando.

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Los padres de Fernando, Graciela Sosa Osorio y Silvino Báez, se encuentran en la sala de audiencias de los tribunales de Dolores, luego de que el lunes declararan como testigos.

La primera jornada del debate

El lunes, en la primera jornada del debate oral y luego de que las partes de proceso expusieron sus lineamientos, la mamá de Fernando fue la primera testigo en declarar.

"Soy una mujer acabada", expresó, tras lo cual se pre preguntó: "¿con qué derecho (los imputados) le arrebataron la vida" a Fernando.