Fotografía EFE-EDDY LEMAISTRE
El próximo número del semanario "Charlie Hebdo", que llegará este miércoles a los quioscos, reivindica el tono provocador de sus páginas mostrando una caricatura del profeta Mahoma en su portada, una decisión que sus autores defendieron como la más coherente con la memoria de los asesinados en el atentado.
Miércoles 14 de enero de 2015
Fotografía: REUTERS-Charles Platiau
Aunque la esperada "primera" circulaba desde la noche del lunes en internet, ha sido este martes cuando, acompañado por el redactor jefe de la revista Gérard Biard y el articulista Patrick Pelloux, el dibujante Renald Luzier, "Luz", presentó un número especial cuya tirada, frente a los 60.000 habituales, rondará los tres millones de ejemplares.
La portada de la edición del 14 de enero muestra a Mahoma, con una lágrima en su mejilla, sosteniendo un cartel que dice "JE SUIS CHARLIE" ("Yo soy Charlie"), bajo el titular "TOUT EST PARDONNE" ("Todo está perdonado").
La nueva edición de Charlie Hebdo, incluirá otras viñetas satíricas sobre políticos y otros cultos, aseguró el lunes su abogado, Richard Malka, a la emisora France Info radio.
"Un dibujo para mirar el mundo con distancia" porque "Charlie", "consiste precisamente en eso, en tomar distancia", precisó emocionado el dibujante Luz ante cerca de medio centenar de cámaras que atestaban la sede del diario "Libération", cuya redacción acoge desde el jueves al equipo del semanario.
Con voz entrecortada y en un discurso trufado de lucidez, consternación y, también, humor, el autor de la portada del "Charlie Hebdo de los supervivientes" avisó que los dibujos, las caricaturas, no son más que una forma de "relatar un mundo complicado, absurdo".
"Pensamos que dibujar nos protegería de la ineptitud, pero no fue así", prosiguió en un silencio apenas roto por el disparador de los fotógrafos.
Junto a Luz, armado de una sonrisa, el redactor jefe Gérard Biard certificó "el futuro de Charlie Hebdo".
El domingo, al menos 3,7 millones de personas participaron en marchas por toda Francia en apoyo a Charlie Hebdo y a la libertad de expresión. En París, varios líderes europeos y mundiales lideraron la movilización, lo que valió múltiples críticas por encontrarse entre ellos los principales responsables de las ofensivas guerreristas en África y Medio Oriente.
El viernes concluyeron tres días en los que los atentados contra la sede de Charlie Hebdo y el asalto a un local de comida judía en París, dejaron un trágico saldo de 17 muertos.
Tras los atentados, el ministro de Defensa francés, Jean-Yves Le Drian, anunció el despliegue de 10.000 soldados en lugares sensibles, como mezquitas, sinagogas y aeropuertos, con los que Francia se ha visto militarizada.
El consejo islámico francés pidió al Gobierno que aumente la protección de las mezquitas, asegurando que se han cometido 50 actos antiislámicos desde el ataque al Charlie Hebdo.
Agencias: Reuters/EFE