En la octava audiencia local del Tribunal Internacional de los Derechos de la Naturaleza los jueces sentenciaron que el Tren Maya avanza sin respetar las leyes ambientales, violando los derechos de la naturaleza, los derechos humanos y los derechos bioculturales del pueblo maya abriendo la puerta al ecocido y el etnocidio.
Axomalli Villanueva @1quiahuitl
Jueves 16 de marzo de 2023
En la octava audiencia local del Tribunal Internacional de los Derechos de la Naturaleza, espacio creado por la sociedad civil desde el 2014 y que ha servido internacionalmente para visibilizar las luchas ambientales y las violaciones a los derechos de la naturaleza a lo largo del planeta.
Los jueces son Fray Raúl Verá, defensor de derechos humanos en México, la investigadora y socióloga argentina Maristella Svampa; el político y abogado ecuatoriano Yaku Pérez; el activista italiano Francesco Martone y el defensor de los derechos de los pueblos indígenas, Alberto Saldamando.
El evento se llevó a acabo en el estado de Quintana Roo del 9 al 12 de marzo de este año, donde cinco jueces, todos activistas y científicos con larga trayectoria de activismo ambiental en Latinoamérica registraron los testimonios de habitantes de por lo menos 20 comunidades de cuatro de los cinco estados por donde pasará el tren: Chiapas, Campeche, Yucatán y Quintana Roo. Además de recopilar evidencias del ecocidio en el paso del tramo 5 del Tren Maya.
Algunas de sus conclusiones fueron: señalar que el mal llamado mado Tren Maya avanza sin respetar las leyes ambientales, violando los derechos de la naturaleza, los derechos humanos y los derechos bioculturales del pueblo maya.
A su vez, alertaron sobre el latente riesgo de que se incremente la violencia sobre los defensores y defensoras ya que México es uno de los países que más asesinatos de defensores ambientales y del territorio registra a nivel mundial.
Además este megaproyecto abre la puerta al ecocido y el etnocidio y se acompaña de una fuerte presencia militar que impone una “política de miedo” que se usa para intimidar a quienes se oponen a su contrucción.
los jueces responsabilizaron al Estado mexicano por la violación de los derechos de la naturaleza, los derechos humanos individuales y colectivos y los derechos bioculturales del pueblo maya.
Por ello, el tribunal conminó a las autoridades del Estado mexicano a suspender en forma inmediata la construcción del megaproyecto con todos sus componentes. El gobierno mexicano planea inaugurar el llamado Tren Maya en diciembre de 2023.
Si buen, este tribunal no es vinculante, su veredicto es una importante herramienta para hacer públicas las violaciones a los derechos humanos y a los derechos de la naturaleza y visibilizarlos a nivel internacional, señalaron los jueces.
En las próximas semanas, los integrantes del jurado escribirán una sentencia más amplia. El documento final se traducirá al idioma maya y se difundirá entre las comunidades, con el fin de que se informen ante la falta de comunicación de parte del gobierno de las consecuencias negativas de la imposición del megaproyecto en la zona.
Informaron que el documento de la sentencia final también se distribuirá entre organizaciones no gubernamentales, activistas e investigadores de otras latitudes para que se sumen a las demandas y a su vez se enviará a los relatores especiales de la Organización de las Naciones Unidas, para que las tomen en cuenta y puedan dar seguimiento a las recomendaciones que realizó el jurado, entre ellas que se realice una “auditoría independiente, inter y transdisciplinaria y de carácter intercultural con la participación plena y efectiva de las poblaciones afectadas” para que el Estado mexicano haga caso de las sentencias, pues ha guardado completo silencio ante los reclamos de las comunidades y de los científicos.
