Martes 25 de agosto de 2015
La empresa angloholandesa, de ganancias millonarias y con denuncias internacionales, suma a su prontuario una nueva y gravísima resolución. En ella puede leerse que “(…) por un lado SHELL realiza una arbitraria y peligrosa manipulación de la información que con carácter de declaración jurada presenta a este Organismo de contralor, lo cual redunda en perjuicio directo de los trabajadores”(…). La resolución agrega “Que por otra parte, el fallecimiento de DOS (2) trabajadores por exposición al asbesto contribuye a agravar la situación descripta.” (resaltado nuestro).
Esto son solo algunos de los fundamentos de la Resolución 37/2010 de la Superintendencia de Riesgo de Trabajo (SRT), que es el máximo organismo legal en seguridad e higiene. En dicha resolución se le notifica a la empresa “SHELL COMPAÑIA ARGENTINA DE PETROLEO SA, DEHEZA SA, COMPAÑIA LUREZA SA, COMPAÑIA RIMIDAN SA y Obra Social del Personal de SHELL CAPSA, en adelante SHELL” y organismos correspondientes que se le revocará el auto seguro (la ART) debido a las reiterados incumplimientos. La empresa angloholandesa, de ganancias millonarias y con denuncias internacionales, suma a su prontuario esta nueva y gravísima resolución.
¿Qué significa esto?
En los últimos años los trabajadores venimos denunciando cómo van empeorando las condiciones de trabajo. Es el caso por ejemplo de los exámenes médicos que son cada día más dudosos. En 2013 dieron mal (o tuvieron un resultado dudoso) más de 80, de 250 exámenes anuales que debieron rehacerse. Esta denuncia tomó conocimiento público luego de los despidos del 2014. Dos de los nueve despedidos se encontraban con baja médica, estos despidos habían sido producto de una persecución por parte de la empresa por denunciar estas condiciones. Hoy en los juicios de reinstalación, la empresa acusa a los despedidos de adulterar las mediciones ambientales, mediciones que fueron denunciadas por los propios trabajadores. Vimos la lamentable muerte de varios compañeros en los últimos años, con detalles dudosos de su salud, aparte de los mencionados en la resolución.
Hoy el ente de mayor incumbencia certifica lo que se venía denunciando, que Shell no cumple con los requisitos básicos de seguridad e higiene. Entre las faltas que se mencionan en la Resolución 37/2010 figura que Shell reglamenta los exámenes médicos que debería hacer a la vez que adultera los informes médicos, que tapa los contaminantes a los que estamos expuestos. Todo esto fue verificado por un seguimiento de la SRT en los últimos tres años. Si esto fue comprobado con el personal propio de Shell, qué les queda para cientos de contratistas que los hace trabajan en las peores condiciones, qué les queda a los controles ambientales de los vecinos de Dock Sud.
Juan José Aranguren y Teófilo Lacroze, el nuevo CEO de Shell, nos hablan de la eficiencia, de cumplir las reglas y las leyes, mientras gasta miles de pesos en medidas extraordinarias a la Corte para hacer caer nuestros juicios de reinstalación. Ya lleva casi un año de no cumplir con la cautelar a favor de Gustavo Michel para que vuelva a trabajar. Mientras tanto el Secretario General del sindicato de los petroleros y diputado massista Alberto Roberti, se saca fotos en una de sus casas en un barrio privado con los 240 pares de zapatos de su mujer, Mónica López, también diputada del Frente Renovador. Somos los trabajadores quienes seguimos peleando día a día por mejores condiciones de trabajo.
Una vez más queda en evidencia cómo esta multinacional juega con las vidas de los trabajadores. Mientras estas denuncias salen a la luz, nosotros volvemos todos los días a trabajar. Si bien la resolución es importante no avanza seriamente en resguardar la integridad de los trabajadores.
Por estos motivos en el 2014 junto a Nicolás del Caño, Raúl Godoy y Pablo López, presentamos el proyecto de ley de nacionalización de hidrocarburos, donde exponíamos cómo esta industria puede quedar bajo control de los trabajadores, junto a la comunidad y los pueblos originarios. De esta manera, las ganancias millonarias pueden ser aportadas no sólo al mejoramiento de las condiciones de trabajo, sino también a la salud, a la educación, a la búsqueda de energías renovables etc. Si bien estas medidas ratifican lo que ya sabemos, insistimos en que cualquier cambio vendrá si somos los propios trabajadores los que las tomamos en nuestras manos.