El ministro creó un organismo con abogados sindicales y empresarios, para discutir los proyectos de flexibilización del gobierno y el “incremento de la productividad del trabajo”.
Viernes 8 de febrero de 2019 12:16
Esta semana se conoció una nueva medida de Dante Sica para avanzar con las contrareformas que viene intentando el gobierno. Bajo la resolución 60/2019, el ministro creó el Consejo Asesor del Trabajo, “una herramienta para promover una planificación estratégica que permita avanzar en el desarrollo de políticas relativas a las relaciones del trabajo”.
Entre las funciones que se le asigna al Consejo, hay algunas que marcan la pauta de sus objetivos: “asesorar en políticas públicas orientadas a la generación del empleo y al incremento en la productividad del trabajo” y “emitir opinión respecto de la armonización de los planes de empleo en relación con los planes económicos”.
¿Quiénes lo integran? En principio, fueron nombrados Juan José Etala (Unión Industrial Argentina), Carlos Marcelo José Aldao Zapiola (ex directivo de la Cámara de Empresas de EEUU), Abel De Manuele (ex abogado de UPCN), Miguel Ángel Maza (ex funcionario de Trabajo) y Leonardo Jesús Ambesi (ex funcionario de Tomada). Junto a Julio Simón, un ex juez ligado a Gastronómicos y la UOM, empezarán a reunirse en los próximos días bajo el paraguas de Sica.
Según analiza Juan Manuel Barca en IProfesional, los principales objetivos de la iniciativa son “emprolijar los proyectos laborales elaborados por la gestión Triaca y, a la vez, mostrar una señal de respaldo a los cambios exigidos por el FMI”. Es conocida la decisión de Sica de avanzar en la reforma laboral, sea con los proyectos ya presentados o en forma parcial. Entre ellos, abaratar las indemnizaciones, la creación del fondo de cese laboral, eliminar la “irrenunciabilidad”, además de cambios en la jornada y otras condiciones laborales.
En las últimas semanas, el plan de avanzar “convenio por convenio” sufrió algunos contratiempos. Hasta la Asociación Obrera Textil, que poco ha hecho en defender los puestos y condiciones de sus afiliados, se viene oponiendo a la reforma que plantea el gobierno y las cámaras del sector.
Incluso el conflicto de Vaca Muerta ha puesto en vilo a reformas de convenio ya pactadas, como la de petroleros. Es que Guillermo Pereyra entregó todo lo que le pidieron pero los empresarios no cumplieron con su parte de “conservar los puestos de trabajo”.
Con ese panorama, la jugada del gobierno busca que este “consejo de notables” se convierta en una nueva herramienta de negociación con las cúpulas sindicales, tanto para la eventual reforma como para otros proyectos. Y que de ahí surjan proyectos más “prolijos” (consensuados) que los que no pudieron avanzar en 2018, más allá de la buena voluntad de la mayoría de la CGT.
Más allá de los métodos, la “armonización de los planes de empleo en relación con los planes económicos” está claro que es un ajuste a las condiciones laborales y de vida de la clase trabajadora.
Foto: Infobae
