No alcanzaron a pasar ni 24 hrs desde la presentación del gobierno en la Comisión Interamericana de Derechos Humanos (CIDH) para que el número de heridos por perdigones en los ojos aumentara. Lo que ya es considerado una cifra récord en el mundo, se está transformando en el protocolo de actuación de FFEE durante las manifestaciones.
Miércoles 13 de noviembre de 2019
En el marco de cada manifestación, a eso del medio día en adelante, los hospitales y centros de atención médica de Chile se transforman en verdaderos hospitales de guerra.
Las salas de espera se llenan de personas con heridas de perdigones, bombas lacrimógenas lanzadas al cuerpo o asfixiadas por los gases que se usan a mansalva.
La jornada de ayer no fue distinta, aun cuando las cifras oficiales hablan de poco más de 50 heridos, solo en el hospital Van Buren de Valparaiso, recibió más de 20 personas con heridas de perdigones en varios lugares del cuerpo. 2 de ellas en los ojos.
No alcanzaron a pasar ni 24 hrs desde la presentación del gobierno en la Comisión Interamericana de Derechos Humanos (CIDH) para que el número de heridos por perdigones en los ojos aumentara. Lo que ya es considerado una cifra récord en el mundo, se está transformando en el protocolo de actuación de FFEE durante las manifestaciones.
A pesar de los anuncios del gobierno de activar algunos protocolos para "regularizar" el uso de las escopetas, FFEE sigue totalmente fuera de control al momento de tomar las calles y reprimir.
Hasta el día lunes el número se elevaba hasta los 190 heridos, después de la jornada de ayer el número sobre pasó con creces los 200 casos. Chile y el mundo están conmocionados por la profunda herida que esta introduciendo este criminal gobierno en el conjunto de la población.
Rechazar la represión y fortalecer la movilización hasta derrotar el gobierno
Se hace urgente que las organizaciones sociales y políticas denuncien con fuerza la represión que está callendo sobre quienes se manifiestan contra el gobierno.
El Frente Amplio está pidiendo la salida de Ubilla (Subsecretario del interior) y de Mario Rosas (General a cargo de Carabineros) pero así como el cambio de Chadwick no modificó en nada la represión, tampoco lo podrían hacer estos cambios.
Hay que fortalecer la movilización y continuar el llamado de Huelga hasta que caiga el gobierno. Hay que echar abajo al gobierno e imponer una Asamblea Constituyente libre y soberana, que pueda discutir desde abajo hacia arriba toda la estructura neoliberal de esta sociedad que se impuso durante la dictadura.
