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Red Internacional
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MUNDO OBRERO. Simplicity: los mismos dueños de Farmacity amenazan con rebajas y despidos

La cadena comercial del grupo Pegasus, que también es dueño de Farmacity, persigue, amenaza y recorta el sueldo a los trabajadores que se niegan a asistir a su lugares de trabajo sin las condiciones de seguridad e higiene necesarias para evitar el contagio. Además, niega la licencia a madres y trabajadores con familiares de grupo de riesgo.

Catalina Ávila @linaa_avila

Miércoles 15 de abril de 2020 21:30

Los dueños de Farmacity, el grupo empresarial Pegasus, vuelven a ser noticia después de que cobraran público conocimiento los despidos que realizaron y la especulación sobre el precio del alcohol en gel que estaban llevando adelante en el medio de la pandemia del coronavirus. Esta vez, la nota la dan los trabajadores de la cadena Simplicity, también perteneciente a este grupo empresarial, que comercializa productos de perfumería, maquillaje, de cuidado personal, accesorios de moda y limpieza, en sus 39 locales, la mayoría ubicados en la provincia de Buenos Aires gobernada por Axel Kicillof.

"El 19 de marzo, antes de que el presidente decretara la cuarentena total, la empresa ya nos había comunicado los horarios laborales de los días siguientes. No conformes con el descontento que expresamos, mandaron un mail a todos los empleados con una declaración jurada para circular por la calle. La declaración jurada figura como "Farmacity". Pero en la provincia de Buenos Aires Farmacity no está habilitado, por lo tanto la declaración jurada no tenía validez. Yo soy asesora de belleza y en mi permiso para circular dice que soy trabajadora de supermercado. El gerente nos dijo que pongamos eso sin ninguna explicación", explicó Julia, de 26 años, trabajadora de uno de los locales del conurbano bonaerense.

"En cada local trabajan entre 10 y 15 empleados, y ahora hay locales que están trabajando con personal adentro, pero cerrado sin atención al publico, y hacen ir a sus empleados solo para justificar su sueldo. Los municipios no los tienen habilitados y no están exceptuados pero nos hacen ir igual y exponernos al viaje en transporte público. Trabajamos más de tres semanas en condiciones de poco cuidado ya que ni siquiera nos brindaban ni barbijos ni alcohol en gel. Vale aclarar que además de todo esto no se estaba vendiendo alcohol en gel, ya que estaba en oferta de 2x1 y especulaban a que acabe la oferta para venderlo más caro. Sin ir más lejos ayer aumentaron sin justificación los precios de todos los jabones antibacteriales", denunció la joven.

Además, informó a La Izquierda Diario que los trabajadores cobran $20000 aproximadamente por 30 horas semanales, y entre ellos hay mujeres con hijos a quienes la empresa les negó la licencia paga, así como también lo hizo con los trabajadores que tienen familiares parte del grupo de riesgo. Pero no solo negó la licencia que debe otorgar por ley, sino que recortó el sueldo y amenaza con despidos a quienes no se presenten a trabajar: "Un compañero dijo que no quería asistir porque tiene familia de riesgo y vive con dos nenes muy pequeños, y lo llamaron de manera intimidatoria para que se presentara a la brevedad diciendo que si no lo hacía le iban a mandar una carta de abandono de trabajo. Hoy el día ya se lo descontaron".

Frente a todas estas irregularidades por parte de la empresa que prioriza sus ganancias por encima de la vida y la salud de los trabajadores y sus familias, Julia cuenta que la mayoría de los trabajadores de la cadena se empezaron a organizar, pero la empresa quiere meter miedo: "Los trabajadores de los locales de zona sur y norte, Avellaneda, Lanús, Quilmes, Lomas, Adrogué, Monte Grande, San Isidro y más, habíamos decidido no presentarnos a trabajar. Debido a esto circulaban mensajes intimidatorios por parte de la empresa amenazando con sanciones y descuentos en los haberes. Nos están intimando (por separado) para ir a hacer tareas a local cerrado. Mañana y pasado quieren que vayamos a trabajar de esa manera. Creo que esto es más indignante todavía porque nos exponen a salir de nuestras casas en un momento en que debemos estar resguardados, solo para justificar el sueldo".

Como venimos reflejando desde La Izquierda Diario, miles de trabajadores son obligados bajo amenaza de despidos, rebajas salariales, suspensiones y sin ningún tipo de protección para evitar el contagio, a presentarse a trabajar en el marco del aislamiento social y obligatorio decretado por el gobierno, dando certificados truchos y persiguiendo a quienes se organizan frente a estos abusos. Simplicity no es la excepción: los últimos días vimos cómo las y los pibes precarizados de las cadenas de comidas rápidas hicieron virales sus denuncias acerca de los descuentos salariales y el atropello empresarial que están sufriendo, mientras el gobierno no toma ninguna medida y el sindicato deja correr esta situación.

Queda claro que para los empresarios la vida de las y los trabajadores no vale nada. Por eso es necesario exigir que las empresas otorguen las licencias pagas para aquellos contagiados o que tengan familiares de grupo de riesgo. Es fundamental poner en pie Comisiones de Seguridad e Higiene en cada establecimiento que continúe en actividad para que sean los trabajadores quienes definan en qué condiciones y de qué manera trabajar, exigiendo a las empresas que garanticen los recursos elementales para su cuidado. Los sindicatos deben ponerse a la cabeza de exigir que no haya ni despidos ni rebajas salariales de ningún tipo. Además, el Estado debe garantizar un salario de cuarentena de $30000 para todos aquellos que tengan que cumplir el aislamiento social y obligatorio y no tenga licencia paga. Nadie tiene que pasar necesidad en el marco de la pandemia.

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Desde La Izquierda Diario venimos difundiendo las denuncias que todos los días nos llegan de trabajadoras y trabajadores que no se callan más frente al abuso de los empresarios. Hacenos llegar la tuya también, ayudanos a difundir y organizate!

Aclaración: el nombre de la denunciante es falso para preservar su identidad