Excomisionado para la reconstrucción de la CDMX señala que la asignación de los recursos hecha por la Asamblea Legislativa no corresponde con las necesidades tras los sismos de septiembre de 2017.
La Izquierda Diario México @LaIzqDiarioMX
Sábado 17 de febrero de 2018
A través de una carta dirigida a Miguel Ángel Mancera, el comisionado para la Reconstrucción, Recuperación y Transformación de la Ciudad de México, Ricardo Becerra, presentó este viernes su dimisión al cargo que había ocupado desde octubre de 2017.
Entre las razones que expuso el funcionario se encuentra el que las decisiones provengan de la Asamblea Legislativa de la Ciudad. Expuso que recibió un oficio en donde se le informaba que los recursos ya habían sido decididos e instruían a la Secretaría de Finanzas a comenzar a aplicar los recursos del Programa de Reconstrucción.
Sin embargo, Becerra señala que la asignación de los casi 8 mil millones de pesos del fondo de reconstrucción no tiene relación con el diagnóstico realizado por la Comisión para la Reconstrucción de las necesidades tras afectaciones por los sismos de septiembre de 2017, ni con el orden de prioridades definido por esa Comisión.
Las prioridades según esta comisión constaban de: certeza jurídica, evitar riesgo para las personas y realizar estudios de suelo y reforzamiento.
Becerra Laguna, quien protagonizó en noviembre un escándalo al acudir en estado de ebriedad a una reunión con damnificados de la delegación Benito Juárez, con expediente de un edificio distinto sobre el que iba a hablar con los vecinos, no renunció pese a los reclamos. Hoy, que ve vulnerado su control sobre los recursos que legítimamente son de los miles de damnificados de la Ciudad, es cuando decide irse.
Un mes después, vecinos de la delegación Coyoacán denunciaron que Becerra simplemente no acudió a una reunión, misma que tuvo que reprogramarse.
Mientras las instituciones continúan discutiendo el destino de los recursos, cientos de familias continúan a la espera de que se cumplan las promesas que políticos de todos los niveles hicieron tras los sismos de 2017. Basta un vistazo a la zona en donde ocurrió la tragedia del multifamiliar Tlalpan para confirmar que, a casi cinco meses, la ayuda no ha sido efectiva.
