Tras una reunión en el Ministerio de Trabajo y a la espera de “nuevas ofertas”, la cúpula de los conductores de trenes decidió “postergar” el paro anunciado para este jueves 20.
Miércoles 19 de agosto de 2015
“Sin bajar sus banderas, La Fraternidad apuesta a la paz social”. Así tituló el secretariado del gremio de conductores de trenes la medida de fuerza que estaba anunciada para este jueves 20.
En la declaración aseguran que recibieron una nueva convocatoria del Ministerio de Trabajo. En la reunión – dicen los dirigentes ferroviarios – “se nos solicitó “suspender” las medidas de fuerza para intervenir ante las autoridades correspondientes a los efectos de acercar posiciones. Acorde a su trayectoria histórica,sin arriar las banderas de nuestros reclamos, La Fraternidad acepta un cuarto intermedio, a tal efecto se POSTERGAN las medidas anunciadas para el día de mañana”.
El subrayado, parte de la versión original del comunicado, no es casual. La medida había sido anunciada de cara a las negociaciones que se estaban llevando adelante en las paritarias del sector, y no está claro si estas se van a destrabar.
El gremio pide un 32 % anual, y los empresarios y el gobierno vienen proponiendo un acuerdo por 16 meses y menor porcentaje, tal como acordó la Unión Ferroviaria.
Sin embargo, parece que las negociaciones van “aflojando” las posiciones de la cúpula fraternal. En declaraciones a los medios, Omar Maturano aseguró que el gremio "no tiene problemas en firmar una paritaria de 16 meses, siempre y cuando se ofrezca un 35 por ciento mensual".
Las negociaciones, aún sin definición clara, ponen en evidencia varias cosas. Por un lado, la decisión del gobierno y los empresarios que seguir poniendo techos para ajustar el salario, cerrando acuerdos a más largo plazo. Por otro, el poder de fuego que tienen los gremios del transporte, los mismos que encabezaron los últimos paros nacionales. Finalmente, queda claro el doble discurso de la dirigencia sindical opositora, que en las conferencias de prensa se refiere a la inflación, el empleo, las jubilaciones y otros reclamos pendientes de la clase trabajadora, pero se limita a (amenazas de) medidas en defensa de sus reclamos corporativos.
El lunes se sabrá si el próximo miércoles hay paro nacional o los trenes siguen rodando.

Redacción
Redacción central La Izquierda Diario