Los obreros vienen de protagonizar una importante movilización el lunes, mientras el intendente intenta maniobrar con una mesa de diálogo.
Miércoles 10 de enero de 2018 11:57
Tras la concurrida movilización de los trabajadores de Stockl a Adrogué -centro de Almirante Brown- el lunes 8, la Intendencia de Cascallares tuvo que dar una respuesta proponiendo una "mesa de diálogo". La misma esta integrada por representantes del municipio, de las entidad empresaria del parque industrial y la burocracia sindical. Lo ofrecido en la misma son migajas: los trabajadores no recibieron una respuesta al reclamo del pago de los sueldos adeudados y la continudad de los puestos de trabajo.
Cuál es la salida para fortalecer la lucha de Stockl
La reunión de "la mesa de diálogo" realizada el martes 9 estuvo compuesta por representantes de la Secreteria de Producción, el Ministerio de Trabajo del distrito, Costello -dirigente de la CGT Regional- y un representante de la Comisión Mixta que reune a las patronales del parque industrial de Burzaco. Es irrisorio que dicha reunión se presente como una salida para el conflicto, cuando lo único que se le ofrece a los trabajadores es la ayuda alimentaria, medicamentos y asesoramiento legal.
Que haya tenido que interceder el municipio muestra la fuerza en la lucha de los trabajadadores; no podía seguir ignorando el reclamo. Los trabajadores de Stockl llevan la tercera semana de vigilia en la planta resguardando su fuente de trabajo, y han impulsado un fondo de lucha y colecta de alimentos que se hizo extensiva. Realizaron un concurrido festival solidario y una asamblea abierta, donde junto a organizaciones y trabajadores de otras fabricas coordinaron una primera acción masiva fuera de la fabrica, la movilización del lunes 8 que reunio a cerca de 1000 personas en el centro de Almirante Brown.
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El intendente Cascallares propone esa mesa ofreciendo migajas como respuesta, busca no pagar el costo político, ya que la realidad va contra su discurso. Fue Cascallares quien ganó las elecciones hablando de la generación de empleo del parque industrial de Burzaco, quien tomo medidas como reducir costos impositivos a las patronales a cambio de que mantengan la mano de obra.
Hablamos del distrito donde producen grandes firmas multinacionales como Ball o General Mills, que cuentan con ganancias multimillonarias, o firmas como La Serenísima que compiten a nivel internacional. Las políticas de flexibilización y precarización laboral y ahora despidos son moneda corriente en el parque industrial, en particular en la rama metalúrgica.
El rol de la CGT regional y la UOM no puede ser acompañar pasivamente estas reuniones que intentan desactivar la lucha de los trabajadores, mientras los trabajadores continúan sin cobrar el sueldo. Tienen que convocar ya mismo un plan de lucha para imponer el reclamo de los trabajadores de Stockl.
Es necesario plantear una salida de fondo: que el municipio pague los sueldos adeudados y que mantenga los puestos de trabajo. Si Rodolfo Stockl no puede mantener la producción en la empresa, que sea el municipio el que intervenga con un plan de producción, en el camino de estatizar la planta.
En esa "mesa de diálogo" están los que tienen el poder para resolver el conflicto si quisieran, para que se paguen los sueldos y se mantengan los puestos de trabajo, pero evidentemente no lo piensan hacer. Con ella el intendente intenta desviar a los trabajadores de su principal herramienta que es la movilización.
Hay que retomar el camino de la movilización para imponer el reclamo y difundir la lucha. Volver a convocar las reuniones de solidaridad, seguir impulsando el fondo de lucha y rodear de solidaridad a los trabajadores de Stockl.
