Poetas de Taller Literario GREDAZUL fueron invitados a una nueva versión del "Festival Internacional de Poesía y Arte GRITO DE MUJER", que reivindica los derechos de género e instala una cultura basada en los derechos humanos.
Miércoles 21 de marzo de 2018

Este martes 14 de marzo del presente, la SOCIEDAD DE ESCRITORES DE CHILE, ubicada en Almirante Simpson 7, comuna de Providencia, desarrolló por cuarta vez, una nueva versión del Festival Internacional de Poesía GRITO DE MUJER. Coordinado y organizado en Chile por la Directora de la institución y el fotógrafo profesional Malú Ortega.
Su conducción estuvo a cargo de la escritora Paulina Correa. La jornada maratónica, se inició a las 16:00 hrs., con la intervención del cantautor mexicano Marcos Leija y terminó alrededor de las 22:00 hrs., con distinguidos escritores, que realizaron sus lecturas, bajo el lema: "Faros de esperanza" a las madres del mundo, inspirados en temas como: El feminicidio, las madres como pilares de una sociedad libre de violencia, que luchan y cuyas hijas son o han sido víctimas de violencia, abuso, secuestro, trata, etc.
Participaron en el festival, los poetas nacionales: Miguel Reyes, Ingrid Córdova Bustos, Ana María Vieira, Claudio Bueno, Melania Tello, Edith Contador, Claudio Shüdeck, Nelly Raquel Salas, Julieta Salinas, Rosa Alcayaga, Sandriuska poeta marciana, Patricia Tellez, Anita Montrosis, Susana Figueroa, Juany Rojas, Fabio Salas, Ana Partal, Violeta Guiralde, Renato Salinas, Hilda Carrera, entre muchos otros, y los poetas del Taller Literario GREDAZUL: Cecilia Aretio, Andrea Campos, Nilo Sagredo, Felipe Rodríguez y Carla Andrea Zapata. También, compartieron sus lecturas con el público, los poetas migrantes: Miriam Alicia Sendoya, Sara Petrizzo y Calinio Vagg.
El evento terminó con la lectura dramatizada de la obra teatral “ MÍA”, del dramaturgo Jaime Espinoza, interpretada por Leyla Ponce, Ignacio Núñez y Miguel Acevedo.
"GRITO DE MUJER" es un Festival poético artístico, creado por la escritora dominicana Jael Uribe, Presidenta del Movimiento Mujeres Poetas Internacional y constituye una cadena de eventos simultáneos en distintos países durante el mes de marzo, como tributo a la mujer y contra la violencia. de género. Su finalidad, es dar a conocer talentos poéticos y artísticos, fundamentalmente femeninos, y potenciar su rol de liderazgo. Cuenta para su difusión, con colaboradores y coordinadores voluntarios en los distintos países en que se organiza.
En nuestro país, se realiza desde hace varios años. Dejo, a continuación, para el disfrute de los lectores una pequeña muestra con la poesía de algunos de sus exponentes:
1.- Cecilia Aretio Aguirrebeña:
MATERNIDADES OBSCURAS
Siglo veintiuno y aún
maternidades que angustian
mujeres son presa fácil
de autoridades injustas.
Chile,
tres casos conmueven
congelándonos el alma
por su género: tragedia,
desolación y hondo trauma.
Las tres mujeres son madres,
pero, primero personas
todas sufrieron abusos
que a la dignidad traicionan.
Sus nombres pronunciaré
no hay ficción ni fantasía
Gabriela en el altiplano,
aymara es su biografía.
Joane, hermana inmigrante,
llega a Chile desde Haití
mal destino le esperaba
en nuestro indiferente país.
Macarena al Wallmapu
vino a sembrar rebeldías
quiso proteger la tierra
y le arrancaron su vida.
Las tres fértiles morenas
preñadas de su energía
madres sufrientes o alegres
de geografías heridas.
Que distantes sus historias
del guión y estereotipia,
enjuiciador e inflexible,
de movimientos pro vida.
Maternidad se celebra
con superflua admiración
pero bajo todo eslogán
la mutilan en la acción.
De Santiago al sur mapuche,
medioambientalista hembra
política y activista
una leal compañera.
Y cruzando largo cielo
joven madre aventurera
deja atrás su tierra isleña.
Violencia institucional
arrasó con su existencia.
Un padre viudo acunará a su pequeña.
Gabriela Blas acusada
de negligente asesina
pastoreando en las alturas
su hijito se le extravía.
Después de largo calvario
tras varios años en prisión
una corte internacional
feroz maltrato paró.
Difícil es que cese su dolor.
A Macarena Valdés
la colgaron de una viga
dentro de su propio hogar
condenando a cuatro hijos
a traumática horfandad.
Convencernos quieren
que fue una suicida
no resiste análisis
huele a montaje homicida.
Encarcelan a Joane Florvil,
su delito:
idiomático y de piel,
maternidad y autoexilio
extranjera sin poder.
La separan de su beba,
se la quitan,
sin que existan pruebas
de un supuesto abandono.
Colapsa en la celda
no logra resistir
le arrebató su vida
un sistema vil.
Tres dramas enlazados
en esta década postmoderna,
para algunos;
de códigos victorianos
y usanzas de la edad media,
para tantas.
Por nuestro andino norte
pastora de tropa ajena
niña y mujer vulnerada
sin madres que la protejan.
Joane,
Macarena,
Gabriela:
Una plegaria fraterna
como un mantra las envuelva
lleve calma a sus heridas
a hijos e hijas proteja.
Que su trayectoria y muertes
enciendan luces morenas
abran sendas justicieras
desaten nudos de miseria.
2.-Felipe Rodríguez Medina:
MYRIAM
Átame fuerte a tus piernas para seguir amándote.
No importa si mañana estaré viva para lavar los platos.
No importa que mañana las angustias se escondan debajo de la cama.
Seduce el miedo de mis ojos
para mirarte mientras lloro,
mientras sangro.
Arráncame el deseo con tu voz.
Llévame a pasear por la Historia
para no encontrarme
y reírnos juntos.
Pues siempre debemos reírnos,
aunque en las antologías no aparezca mi nombre
y las puertas de mi cuarto permanezcan siempre cerradas.
Bailemos
escuchando el silbido del poder que me silencia.
La violencia es un juego,
una exageración que se calma con amor.
Bésame lento, fuerte,
abriendo tu boca que también insulta.
Mi piel siente orgullo de tus manos,
orgullo de ser el espejo de tu ego
que adormece la noche.
Así la crueldad se hace estrecha;
excusa para buscar paz.
La sombra que dibuja promesas
derriba soles disfrazados de domingo.
Por eso soy la muda que se proyecta en tus ambiciones.
La muda que habla con Dios
y moldea su paladar con un gozo a medias,
después de sacar la basura y limpiar la mesa.
Fingiendo lentamente
para volver a enmudecer
cuando las paredes escupen migajas.
Átame fuerte a las zancadas de tu deseo
para perderme en tu amor.
3.- Nilo Sagredo Cavieres:
UNA MILLA CÚBICA DE CLARO DE LUNA ( a Isabel y Antonio, militantes del MAPU, prisioneros en Villa Grimaldi y actualmente detenidos desaparecidos)
Antes de humo de altar ninguno Herida mía Con centro en la lengua
Mi calavera con pátina de oro Tizne epiléptico
Melena vuelta alambre -Momia en papiro de viejas mariposas-
Yo, escrito a uña huraña de desierto
Esto, después del bello monstruo Del cuerpo y sus tripas
Manzanas, fermentos, nuestro resplandor de ser
Cirio de médulas Tan antes de la inventada perfección del ángel
Ahora, en nuestro íntimo desgarro: digo el tramo, la trama, la trampa
La caída de imposible recuerdo...
Fuimos entonces Mar colectivo fálico y gigante?
Evidentes fantasmas, demonios, sirenas?
El tritón en su hoguera de agua alumbrando el abismo de Dios?
Éramos el mundo, su poema? Mi masa
De torturada, duplicada en sangre Triplicada, aserrada
Desde dentro de mis huesos a picotazos de águila
Derrumbada y muerta Mas porfiadamente viva
Tal el corno y el arpa, la flauta de Mozart en matutino capullo?
Éramos alba con soles que no vemos? Frescas, verdes, coníferas columnas?
Tubos de música subiendo Del amado tendón, la roja rodilla, la fibra, la arteria?
Esta boca que deliró, cantó, grito esperanza Aún cayendo del avión azul Prusia
Por una milla cúbica de claro de luna?
Éramos incandescencia encendida, la mesa infinita del océano donde se afirmaban
Estos panes de luz? Esta hogaza mordida
En miel de Homero, con ternura de bardo?
Finalmente fuimos salado regusto A esmeralda nocturna? Nuestro llorar explica
Este doliente júbilo que ríe
Dichoso dolor? Soy Isabel, hablo Por las cuencas vacías de mis ojos
Donde brotan
Los húmeros de mi corazón: canto Que el alma es de carne De yema de huevo
De oxígeno Con branquias De pez ciego del abismo:
Soy la mar Con sus mareas y revanchas Sus celos, afrentas Lamentos
Y la roja luna telepática que conjura Este salmo de locura
De un millón de genios en sus botellas.
4.- Carla Andrea Zapata:
FEMICIDIO
He tejido tus besos de pájaros húmedos,
abismos, tormentas, células invisibles.
El miedo parece un líquido que nos une y devora.
Voy dormida, en el destello de tu piel,
no encontrada en el ocaso de la noche.
Colgada de pies, con el abdomen cubierto de espinas
dejando un rastro transparente de dolor.
Tiemblo de agonía y muerte en la obscuridad,
soy sosiego interrumpido,
gélido y vulnerado instante , perseguido.
Sordo latido y gemido que no cesa,
sólo inacabada y deshuesada ausencia,
cayendo como una hoja
ciega de invierno y nubadas
en lo más profundo del deseo.
Miro mis manos, mis dedos
y un ojo se rompe como el agua
en los angostos silencios del olvido.
Alguien que amé me acecha,
arranca mis párpados y estira una a una mis vértebras;
sin piedad va mordiendo la tenue luz
que abandona la soledad de mi ombligo.
Alguien que amé corta mi lengua,
la entierra bajo las estrellas
coloca en ella una sucia lápida y la olvida …
Alguien que amé cose en un hilo
de lluvia mi agonía.
Entonces, soy polvo y vacío…
fuego que arde y no se apaga
ceniza desparramada en la curvatura salvaje del universo,
estela en el aire, laguna de tiempo
cuando mis huesos lloran hundiéndose en la nada.