Diferentes empresas han donado millonarias cifras para la teletón, pero tienen a sus trabajadores y trabajadoras enfrentándose día a día al desempleo y al contagio por COVID-19.
Domingo 5 de abril de 2020
Este año en medio de una pandemia donde hasta el día sábado 4 de abril habían 4.161 contagiados y 27 personas fallecidas por COVID-19 se realiza una nueva jornada de teletón, recibiendo aportes de diferentes personas, artistas, deportistas hasta empresarios.
Para poder llegar a la meta la institución recibe diferentes donaciones, los mayores montos son aportados por los empresarios quienes se ponen “la mano en el corazón y en el bolsillo” en esta jornada televisiva, pero son esos mismos dueños de empresas quienes tienen trabajando a la gente a pesar de los altos índices de contagio.
Mientras los empresarios que conforman la CPC (Confederación de la Producción y del Comercio) donan 5 mil millones de pesos o como la familia Luksic que dona 2 mil millones de pesos, al igual que otros empresarios, son estos mismos magnates que tienen a sus trabajadores expuestos todos los días al contagio del virus, sin prestarles los insumos correspondientes para el resguardo y al mismo tiempo los obliga a seguir trabajando con amenazas de despido o descuento de sus sueldos.
En tiempos de pandemia aumentan los cuestionamientos a esta labor de exposición de los niños y niñas con capacidades diferentes, más aún cuando el estado debiera ser el responsable de garantizar la rehabilitación y cubrir sus necesidades, al igual como debiera cubrir las necesidades de este virus con Test masivos, licencias médicas pagadas, garantizar los insumos necesarios para los y las trabajadoras de la salud y las camas con ventiladores que necesita la población en medio de una crisis sanitaria.
La única salida realista frente a la pandemia y la crisis de la salud publica, sólo la puede llevar adelante las y los trabajadores. La producción y la administración de los servicios básicos en manos de los empresarios ha demostrado, una vez más, que es incompatible la sed de ganancias con las necesidades del conjunto de la población.